El entrenamiento de fuerza en la mujer es imprescindible para gozar de buena salud, especialmente a partir de los 40 años, edad en que se comienza a perder masa muscular y densidad ósea, lo que puede dar lugar a problemas como la osteoporosis.
Las kettlebells o pesas rusas constituyen una forma efectiva de mejorar la condición física independientemente del nivel de partida, ya que proporcionan un entrenamiento de todo el cuerpo en poco tiempo y son más dinámicas que las pesas tradicionales.
qué son las kettlebells o pesas rusas
Las kettlebells, también conocidas como pesas rusas, son un tipo de pesas formadas por una bola de hierro fundido con asa, muy utilizadas en disciplinas como el crossfit o el entrenamiento funcional. Son ideales para levantamientos de peso muerto y el reparto irregular del peso confiere a los ejercicios características específicas
Uno de los puntos fuertes de las kettlebells es que son fáciles de utilizar debido a que son compactas y portátiles, ocupan menos espacio que el equipamiento de gimnasio y nos permiten entrenar en casa y al aire libre.
En cuanto a sus beneficios para la salud, van desde la mejora de la fuerza y la resistencia hasta la quema de calorías y la tonificación muscular.
- Fortalecen los músculos estabilizadores: Algo que resulta fundamental para mantener una postura adecuada, especialmente para aquellas mujeres que pasan largas horas frente al ordenador, ya que reducen la tensión muscular y previenen molestias en el cuello y la columna vertebral.
- Ayudan en la pérdida de peso: La mayoría de los ejercicios trabajan varios grupos musculares al mismo tiempo, lo cual permite quemar calorías de forma eficiente y mejorar la fuerza y la resistencia cardiovascular.
- Reducen el riesgo de lesiones: Al ejercitar movimientos funcionales que imitan actividades cotidianas, mejora la capacidad para realizar tareas rutinarias con mayor facilidad, reduciendo el riesgo de sufrir lesiones.
- Mejoran el estado de ánimo: El entrenamiento con kettlebells reduce el estrés, ya que libera endorfinas y brinda una sensación de logro y empoderamiento, aparte de ser una actividad que se disfruta.
- Favorecen la coordinación: Al implicar movimientos dinámicos que requieren una conexión entre la mente y los músculos, mejoran la coordinación y también la conciencia corporal.
Cómo iniciarte en el uso de las kettlebells
Lo mejor es comenzar con un peso ligero, entre cuatro y ocho kilos, para familiarizarte con los movimientos y desarrollar una técnica adecuada. Calienta antes de empezar con simples ejercicios de movilidad articular. Escucha a tu cuerpo y no fuerces los movimientos. Nunca deberías sentir dolor o malestar.
Si entrenas para estar en forma, puedes empezar por realizar tres series de diez repeticiones para cada ejercicio.
Para ganar fuerza y musculatura, es preferible hacer menos repeticiones con un peso más grande; mientras que para mejorar la resistencia y quemar calorías, es recomendable hacer más repeticiones con un peso más ligero.
6 ejercicios con kettlebell para empezar
Estos ejercicios son fáciles para iniciarse en el uso de las kettlebells, pero practicando esta secuencia entrenarás la mayoría de grupos musculares del cuerpo: