No son solo los jóvenes liderados por Greta Thunberg los que actúan contra el cambio climático. Es mucha la gente de todas las edades implicada en la protección del planeta, como un grupo de mujeres mayores suizas, apodadas “abuelas por el clima”, que acaba de lograr un hito histórico. Denunciaron al gobierno suizo por no protegerlas de los riesgos del cambio climático y la justicia les ha dado la razón.
Inacción frente a los efectos del cambio climático
Hace años que conocemos los efectos del cambio climático, tanto en para la salud del planeta como para la nuestra, que están íntimamente ligadas. Sin embargo, los cambios para revertirlo no llegan con la velocidad que deberían y muchos de nuestros gobernantes parecen más interesados en otros aspectos, como la maquinaria de la guerra, que en preservar nuestra salud.
Frente a esta inacción, un grupo de más de 2.000 mujeres suizas, conocidas como Klima Seniorinnen (algo así como “mayores por el clima”), todas ellas de una edad superior a los 64 años, decidieron pasar a la acción.
Pusieron una demanda contra el Gobierno de su país argumentando que su falta de acción frente a las consecuencias del cambio climático las pone en riesgo de morir durante las olas de calor.
Ser mujer y mayor, factores de riesgo frente al cambio climático
Ser mujer y tener más de 65 años son dos factores que se ha visto que aumentan el riesgo de morir cuando las temperaturas son extremadamente altas. Y esto es precisamente lo que este grupo de activistas exponían en su denuncia, que su edad y género las hacían particularmente vulnerables al impacto del cambio climático y a la inacción del Gobierno.
También los bebés y los niños pequeños, aquellas personas que sufren algún tipo de enfermedad y quienes trabajan al aire libre tienen un riesgo mayor de tener consecuencias negativas por el calor extremo.
El tribunal de derechos humanos les da la razón
El pasado 8 de abril consiguieron que el máximo tribunal de derechos humanos de Europa, en Estrasburgo, dictaminara por 16 votos a favor y solo uno en contra que su Gobierno ha violado los derechos humanos de sus ciudadanos al no hacer lo suficiente para combatir el cambio climático y ahora debe ajustar sus objetivos climáticos actuales basándose en la ciencia.
La presidenta del Tribunal, Siofra O'Leary, indicó en la sentencia que el gobierno suizo tenía carencias para cuantificar, a través de la fijación de un precio al carbono, la limitación de sus emisiones de efecto invernadero. Además, no había cumplido con sus propios objetivos de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
"Es probable que las generaciones futuras soporten una carga cada vez más grande por las consecuencias de los fallos y omisiones actuales en la lucha contra el cambio climático", afirmó.
Esta es la primera vez que el Tribunal de Estrasburgo emite una condena contra el gobierno de un estado por inacción climática, lo que crea un precedente muy esperanzador y anima a todos los movimientos sociales y ecologistas preocupados por el cambio climático a exigir una tierra habitable para todos nosotros. De hecho, cada vez son más los litigios abiertos por la inacción climática y, sin duda, este veredicto abre la puerta a que prosperen y se añadan muchos más.
El parlamento suizo rechaza la sentencia
Pese a esta victoria histórica, el parlamento suizo ha rechazado la sentencia. El pasado 5 de junio, y por 111 votos a favor y 72 en contra, los parlamentarios aprobaron una declaración crítica con la sentencia del TEDH, alegando que Suiza respeta todos los compromisos internacionales en cuestiones climáticas.
La moción aprobada por el parlamento sugiere que no es necesario cumplir con el fallo del TEDH, pero la decisión final depende del gobierno suizo y se espera para agosto.
Las temperaturas no paran de subir
El aumento exponencial de las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de las actividades humanas en las últimas décadas es el principal causante del cambio climático, que tiene como consecuencia el calentamiento del planeta y otros efectos derivados como el aumento del nivel del mar, el derretimiento del hielo, el calentamiento y la acidificación de los océanos o el aumento de los fenómenos meteorológicos extremos.
Las temperaturas medias del planeta han aumentado significativamente en los últimos años: se estima que aumentan de media 0,2 ºC por década. De hecho, el año 2023 fue el mas caluroso desde que se tienen registros (seguido de 2016 y 2020), y de los 10 años más cálidos, 9 han ocurrido en los últimos 9 años.
Un estudio de 2022 indicó que las altas temperaturas pueden haber sido responsables de más de 70.000 muertes prematuras en Europa, con lo que denuncias como la que hicieron las “abuelas por el clima” son realmente indispensables para salvaguardar nuestra salud y obligar a los gobiernos a revertir el cambio climático.