Los champiñones, pese a no ser una verdura (son hongos), son de los ingredientes más socorridos en la cocina: igual te sirven para una ensalada que para un salteado, una empanada o un guiso.

Como muchas veces no tenemos tiempo para preparar todos los ingredientes, podemos recurrir a los champiñones laminados. Los sueles tener en dos formatos: frescos y de lata.

4 recetas con champiñones laminados muy rápidas de preparar

Los champiñones laminados frescos son los mismos que puedes comprar al peso pero se les han cortado los pies y los han cortado en lonchas finas. Están casi listos para usar, solo tienes que lavarlos un poquito poniéndolos en un escurridor y dándoles con el agua del grifo. Después ya los puedes usar tranquilamente.

Los champiñones laminados de lata o de bote vienen cocidos y en conserva, por eso tienen ese color más oscuro y esa textura tierna y jugosa. Estos sí vienen preparados ya para cocinar. Solo tienes que escurrirlos.

Están genial para ensaladas, platos fríos, acompañamientos, etc., ya que solo tenemos que mezclar y servir.

Con los champiñones laminados frescos podemos hacer lo mismo que con los enteros. Te propongo 4 opciones de recetas muy rápidas y sabrosas: