El arroz permite preparar infinidad de variaciones. Con el arroz como ingrediente principal, y bien complementado con hortalizas, algas o legumbres, pueden prepararse platos muy consistentes como paellas, risottos o budines, que pueden suponer un plato único muy equilibrado. Puedes hacer también refrescantes ensaladas, postres dulces e incluso es un recurso muy valioso y económico a la hora de preparar rellenos o dar consistencia a cualquier tipo de croquetas vegetales, ya sea para reutilizar las sobras del día anterior o para improvisar una comida rápida.
Sin embargo, muchas personas se preguntan cómo hacer el arroz para que quede perfecto. En este artículo te contamos cómo puedes preparar las recetas con arroz con éxito asegurado.
Cómo hacer un arroz: planificar
Cuando se planifique una receta con arroz, se deben tener varios aspectos en cuenta.
- Decide qué tipo de plato vas a preparar. El arroz ha sido un alimento base de la humanidad desde hace miles de años. Esto ha permitido que se desarrollaran más de 100.000 tipos de arroz diferentes. Cada variedad de arroz tiene sus propias características: forma, tamaño, color, aroma, textura e incluso contenido nutricional. Por todo ello es muy importante elegir la correcta para cualquier plato determinado.
- Elige bien el tipo de arroz. Para tener éxito a la hora de preparar una receta, es necesario saber elegir la variedad apropiada de arroz, debido a que cada grano tiene unas características distintas y diferentes necesidades a la hora de cocinar. Aunque el arroz blanco absorbe más fácilmente los sabores y es más rápido de cocción, el arroz integral o incluso el semi-integral tienen la ventaja de ser nutritivamente superiores y más equilibrados.
- Calcula bien la ración. Se debe calcular aproximadamente 60 g de cereal en crudo por persona, aunque hay que tener en cuenta que el arroz blanco triplica su volumen al cocerse, mientras que el integral sólo lo dobla.
- Piensa en los ingredientes. El arroz admite prácticamente cualquier especia y es muy fácil de perfumar con ingredientes cl��sicos como ajo, laurel, perejil, apio... o con algunos más exóticos como salsa de soja, curry, miso o ciruelas umeboshi. No hay que olvidarse de las recetas dulces de arroz, con miel o azúcar integral y especias como canela, clavos de olor, etc.
- Considera qué utensilios necesitas. ¿Qué tipo de arroz vas a preparar? Según el tipo de arroz que preparaes, necesitarás una paella, una olla o una sartén. Quizá necesites algún otro utensilio. Por ejemplo, si se prepara este cereal como guarnición, se puede hacer que gane presencia fácilmente dándole forma con un molde (como los de flan) engrasado en aceite y bañado en una salsa roja o verde que lo contraste y le proporcione vistosidad.
Los mejores utensilios para cocinar arroz
Sea arroz bomba, integral, basmati, salvaje, rojo, de grano largo o cualquier de sus múltiples variedades, es raro el hogar que no disfrute de este cereal ancestral. Para cocerlo y sacarle partido existen muchas opciones.
Arrocera eléctrica
Es el aparato más específico para arroz, y el más cómodo, pues lo cuece con precisión, se apaga cuando está en su punto y hasta puede mantenerlo caliente. En un recipiente interior extraíble y fácil de limpiar, pones el arroz, el agua o caldo y la sal, si deseas, luego lo tapas, conectas y te olvidas.
Para elegir arrocera valora la capacidad, los materiales o si tiene apagado automático, mantenimiento del calor, tapa de cristal o accesorios como una cesta para cocer al vapor, jarra medidora o espátula.
Paelleras
Además de fijarte en el tamaño, el tipo de fuego y que tenga unas asas que no quemen, busca materiales seguros y atóxicos, como acero inoxidable y el hierro certificado sin metales pesados ni nanotecnología.
Cazuela u olla exprés
Por supuesto, puedes cocer el arroz en cualquiera de tus cazuelas. Existen modelos grandes con un contenedor especial para arroz y, aunque es poco habitual, también hay cazuelas-arroceras de cerámica y de estilo oriental que cuecen todos los granos de forma uniforme y aprovechan el calor residual del principio de la cocción.
Olla lenta
Las ollas lentas son cazuelas eléctricas cuecen a baja temperatura durante más tiempo. Consumen poca electricidad y son ideales para guisos, purés y también recetas con arroz.
Vaporeras
Hay vaporeras de distintos materiales como cristal, acero inoxidable, bambú o silicona platino, pero según el tamaño de los agujeros para circular el vapor, necesitarás un accesorio para cocer los granos. Las vaporeras eléctricas suelen incluirlo y, al tener varios niveles, se aprovecha más el tiempo y puedes cocinar varias elaboraciones a la vez.
Cómo hacer el arroz según el método de cocción
Ahora que ya sabes qué arroz vas a preparar y has planificado un poco la receta, considera estos trucos para saber cómo hacer el arroz perfecto según el método de cocción.
Cómo hacer el arroz con agua caliente
Es un método simple y que se emplea con frecuencia para cocinar tanto el arroz blanco como el integral. Consiste en poner a calentar abundante agua con sal en una cacerola y, en el momento en que comienza a hervir, se introduce el arroz.
Pasados unos minutos se baja el fuego y se deja cocer lentamente y sin la tapa, removiendo de vez en cuando hasta que esté tierno.
Una vez cocido, se echa en un colador y se enjuaga en abundante agua fría. Se escurre y se sofríe en un buen aceite de oliva antes de servir.
Cómo hacer el arroz al vapor
Es una forma muy saludable y ligera de cocinar, pero requiere más tiempo de cocción. Este método es idóneo para el arroz glutinoso o el vaporizado de cocción corta.
Si se emplea arroz integral, será necesario ablandarlo dejándolo en remojo en abundante agua fría durante 2 horas como mínimo, renovando ésta 2 o 3 veces.
Se escurre en un colador enjuagándolo bien y se introduce en un cestito de bambú o en cualquier recipiente de acero inoxidable especial para la cocción al vapor. Durante la cocción se debe vigilar el nivel de agua, añadiéndola siempre caliente.
Cómo hacer el arroz por absorción
Es el método más empleado para cocinar el arroz integral, pero requiere algo de experiencia, pues se debe acertar desde el principio la cantidad de agua fija, que dependerá del tipo de arroz, de la cantidad de arroz y del recipiente.
En una cacerola, con una tapa que cierre bien y de fondo grueso o difusor, se introduce una taza de arroz integral, dos tazas de agua fría con la sal y un buen chorro de aceite de oliva para que el grano quede suelto.
Se pone el fuego fuerte, se tapa bien la cacerola y cuando rompe a hervir se baja la llama, cocinando a fuego lento hasta que el arroz haya absorbido toda el agua (unos 40 minutos). Se deja reposar 5 minutos más antes de servir.
Es muy importante que no se destape la olla durante el proceso, así como que no se remueva el arroz, pues se cocería desigualmente y quedaría pastoso.
Cómo hacer el arroz según sea su variedad
A continuación presentamos algunas de las variedades de arroz más comunes, crudas y cocidas y cómo cocinarlas. La mayoría pueden encontrarse fácilmente en los establecimientos de alimentación habituales y las más exóticas en las tiendas de delicatessen .
- Arroz integral de grano largo. Es aromático y tiene una consistencia esponjosa, se cuece antes que otros integrales y sus granos quedan sueltos. Se adapta bien a todo tipo de recetas, pero es ideal para ensaladas, paellas y sofritos. Es especialmente importante que al consumir arroz integral éste proceda de cultivo biológico, ya que al no habérsele extraído toda la cáscara podría contener más residuos de plaguicidas.
- Arroz glutinoso rojo. Resulta ideal mezclado con otras variedades de arroz. Textura pegajosa y atractivo color rojo. Necesita una medida de arroz por dos de agua y una cocción larga entre 45 minutos y una hora.
- Arroz calasparra semi-integral. De cultivo biológico, es el único de España con denominación de origen Es una variedad selecta, de grano corto tipo "bomba", que se cultiva en Murcia. No se deshace a pesar de su grosor.
- Arroz arborio. De grano medio, redondo y con sabor a nuez, es la estrella de los risottos. Puede absorber mucho líquido sin apelmazarse. Consistencia cremosa. Combina con setas silvestres y sabores fuertes.
- Arroz salvaje. No es arroz, sino una planta de los lagos de Norteamérica Granes largos, de color oscuro y sabor anuezado. Suele cocinarse junto con otros arroces integrales. Requiere 50 minutos de hervor suave.
- Arroz basmati blanco. El más apreciado por los gourmets de todo el mundo, dada su incomparable fragancia y lo suelto que queda. Se cuece en 15 minutos. Ideal para pilafs y como base para acompañar platos picants.
- Arroz basmati integral. Variedad integral de grano largo de gran calidad. El verdadero (cultivado en la India) desprende un intenso aroma Es de cocción relativamente rápida, pero es preferible remojarlo antes. Excelente con legumbres.
- Arroz dulce. Como indica su nombre, destaca por su sabor dulce. Una vez hervido, se machaca con un mortero, se forman bolas y se fríen. Muy adecuado para tomar con sopa de miso y para dietas infantiles.
- Tailandés aromático. También llamado "jazmín", es semejante al basmati, pero algo más suave de sabor A pesar de ser largo, se torna suave y ligeramente pegajoso al cocinarlo y es un clásico en las recetas orientales.
- Arroz vaporizado. De grano largo, se somete a la acción del vapor antes de ser pulido, por lo que conserva las vitaminas del grupo B, aunque carece de la fibra y los minerales del integral. Rápido de cocinar, queda muy suelto
- Blanco bomba. Es un grano corto, redondo, completamente refinado De cocción rápida, absorbe muy bien los sabores. Tiende a abrirse y liberar el almidón, lo que lo hace adecuado para el arroz con leche.
Cómo cocinar con derivados del arroz
Existe en el mercado una amplia variedad de productos derivados del arroz, que son tan sanos como éste, pero que permiten diferentes usos culinarios:
Harina de arroz
Se consigue a partir de la molienda del arroz integral o blanco. No contiene gluten.
Se usa con frecuencia en la cocina oriental para elaborar fideos, pasteles, galletas y rollitos de primavera.
Es útil como agente espesante en salsas o caldos. Se utiliza igual que si se tratase de harina de trigo o de maíz.
Leche de arroz
Se elabora con agua, harina de arroz, generalmente glutinoso, y algún aceite vegetal. De sabor suave y ligeramente dulce, esta leche ayuda a enriquecer sopas y cremas, y además da muy buenos resultados en las recetas dulces o simplemente como una nutritiva bebida refrescante.
Copos de arroz
Se obtienen sometiendo a los granos de arroz a una presión y calor que los convierte en copos muy compactos, a la vez que respeta las propiedades nutritivas.
Son excelentes en un muesli con frutas y yogur o para añadir a las sopas.
Galletas de arroz
Las galletas de arroz inflado son un saludable tentempié. Contienen pocas calorías y sacian rápidamente el apetito. Resultan deliciosas en el desayuno, con mermelada o miel.
Vinagre de arroz
De color claro, es suave y se emplea en la cocina japonesa.
Está elaborado a partir del vino de arroz, con un proceso de agriado que suele durar diez meses.
Se usa para cocinar, como condimento en ensaladas o para perfumar el arroz de los rollitos.