Las albóndigas veganas son uno de los platos que más han evolucionado según hemos ido sumando nuevos productos a nuestra despensa vegetal, especialmente en el apartado de las proteínas vegetales.

Las albóndigas, como las hamburguesas y otros formatos similares, son geniales para hacer en cantidad, ya sea de forma aislada o en un batch cooking, y congelar. No tienes por qué freírlas: las puedes saltear y cocinarlas en salsa, las puedes hacer al horno o también en la freidora de aire. Las opciones, como vemos, también han aumentado en la forma de cocinarlas.

Cómo hacer albóndigas veganas

Tenemos varias opciones para hacer albóndigas sin carne ni huevo:

  • Albóndigas de verduras, sin proteína. Para mí son las menos interesantes, y nos puede parecer que estamos consumiendo proteínas cuando no es así
  • Albóndigas de lentejas y otras legumbres. Estas son de las más clásicas y suelen llevar también cereales, en forma de harina. Tienen buena consistencia y son baratas y fáciles.
  • Albóndigas de tofu, seitán o tempeh. Las carnes vegetales de primera generación, las de toda la vida, son buena base para las albóndigas.
  • Albóndigas de soja texturizada u otras proteínas texturizadas vegetales como la de garbanzo o guisante. Esta última, la de la proteína texturizada de guisante, es mi opción favorita a la hora de hacer albóndigas, ya que compacta prácticamente por sí sola y es ideal si no quieres usar harinas.
  • Albóndigas de las nuevas picadas vegetales o a base de hamburguesas vegetales, de estilo carne. Con la llegada de las nuevas carnes vegetales, encontramos picadas vegetales que nos sirven para hacer albóndigas muy parecidas a las de carne animal, sin necesitar hacer casi cambios en las recetas, aparte de usar huevo de lino en vez de huevo animal. Si son compradas, esta opción puede ser menos recomendable para el día a día si se trata de un ultraprocesado, por lo que te recomiendo revisar la etiqueta y fijarte especialmente en la sal, el tipo de aceite y grasas y en los valores nutricionales.

Los ingredientes con los que podemos hacer albóndigas veganas o vegetarianas son muy variados y, por lo tanto, sus acompañamientos también deberían serlo. En general, quitando las albóndigas de verduras, el resto necesitan ser acompañadas de una buena ración de vegetales, ya sea salteados, a la plancha, en crema o en ensalada.

En el caso de que queramos un plato de pasta con albóndigas, recuerda que puedes añadir verduras salteadas y que la proporción de pasta ha de ser la ración que necesites. Es decir, la pasta es un acompañamiento, y no al revés.

Recetas veganas de albóndigas

Albóndigas de lentejas y avena
Stockfood

1. Albóndigas de lentejas y avena

Son las albóndigas veganas más sencillas de hacer porque realmente necesitan muy pocos ingredientes. También las puedes hacer con otras legumbres.

Ingredientes:

  • 150 g de arroz integral cocido
  • 150 g de lentejas cocidas escurridas
  • 1 cucharada de harina de arroz o de garbanzo
  • harina de arroz para empanar
  • 1 cucharadita de ajo en polvo
  • 1 cucharadita de orégano seco
  • aceite de oliva virgen extra para cocinarlas
  • sal y pimienta negra al gusto
  • el mix de especias que más te guste o encaje (opcional)

Preparación:

  1. Tanto el arroz como las lentejas tienen que estar bien escurridas. El líquido/humedad que puedan contener marcarán algunas cantidades de esta receta que pueden variar.
  2. Tritura el arroz y las lentejas. Lo puedes hacer a mano o con un procesador de alimentos.
  3. Añade la harina de garbanzo, las especias y el aceite de oliva y mezcla bien. No te tiene que quedar una crema, sino una masa.
  4. Enfría la masa en la nevera al menos un par de horas.
  5. Formas las albóndigas, enharínalas y ¡listas!
Albóndigas de tempeh
Stockfood

2. Albóndigas de tempeh

Si no sabes cómo cocinar el tempeh, esta receta es una buena opción para salir del tempeh marinado a la plancha. Si quieres, puedes enharinarlas para sellarlas, pero no suele ser necesario.

Ingredientes:

  • 250 g de tempeh
  • 100 g de harina de garbanzo
  • 50 g de levadura nutricional
  • 1 huevo de lino (1 cucharada de semillas de lino trituradas y 3 de agua)
  • 1 cucharada de orégano
  • 1 cucharadita de ajo en polvo
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • sal al gusto
  • aceite para freír o hacer al horno.

Preparación:

  1. Prepara el huevo de lino para que aparezca el mucílago, el gel que nos ayudará a hacer estas albóndigas. Para ello pon las semillas en el agua y déjalas reposar mínimamente.
  2. Pica el tempeh muy fino y aplástalo o tritúralo con un procesador de alimentos.
  3. Añade el resto de los ingredientes y haz una masa compacta.
  4. Puedes añadir más especias; hay muchas mezclas y preparados con especias que funcionan muy bien.
  5. Da forma a las albóndigas y márcalas, fríelas o cocínalas como gustes.
Albóndigas de guisante texturizado
Stockfood

3. Albóndigas de guisante texturizado muy fáciles

El guisante texturizado tiene una característica muy interesante: se compacta prácticamente solo. Eso hace que sea extremadamente fácil hacer albóndigas con esta proteína texturizada. Vas a necesitar más o menos harina de garbanzos, maicena, harina de arroz u otro compactante según la marca.

Ingredientes:

  • 100 g de proteína texturizada de guisante
  • 3 cucharadas de harina de garbanzos
  • 1 cucharadita de ajo en polvo
  • 1 cucharada de aceite de oliva
  • sal y pimienta al gusto
  • agua caliente o caldo de verduras para hidratas

Preparación:

  1. Hidrata la proteína texturizada con agua o caldo de verduras, mejor si está caliente.
  2. Escurre lo más posible, que no quede nada de líquido. Siempre estarás a tiempo de añadir. La proteína texturizada ha de quedar casi deshecha; si no, puedes acabar de triturar con un tenerdor.
  3. Mezcla todos los ingredientes bien y haz una masa.
  4. Déjala reposar unas horas en la nevera.
  5. Da forma de albóndigas y ya puede cocinarlas. Puedes enharinarlas y marcarlas, freírlas u hornearlas.
Salsa de champiñones para albóndigas veganas
Stockfood

4.​ Salsa de champiñones para albóndigas

Aunque puedes usar salsa de tomate casera o pisto, una de mis opciones favoritas es usar una salsa de setas con una de las tandas de albóndigas. De esta forma, aunque comamos las mismas albóndigas dos veces, tendremos la sensación de cambiar de plato.

Ingredientes para 4 raciones:

  • 200 gramos de champiñones
  • 1 cebolla blanca mediana
  • 100 ml de leche de avena
  • 50 ml de caldo de verduras
  • 50 ml de aceite de oliva suave o 50 g de margarina sin grasas hidrogenadas
  • sal y pimienta negra molida
  • 1 cucharadita de maicena o algún tipo de harina (opcional)

Preparación:

  1. Pelas y pica la cebolla. Limpia y corta los champiñones lo más pequeños posible.
  2. Rehoga la cebolla primero.
  3. Añade los champiñones y cocina durante unos minutos.
  4. Añade la parte líquida y las especias y deja que se cocine a fuego medio.
  5. Si no quieres añadir un espesante, tritura la mitad de la salsa. Si vas a usarla para acabar de cocinar unas albóndigas, no dejes que se consuma todo el líquido o añade otros 50 ml de caldo para que luego no te queden secas.