Para mucha gente, una de las mejores maneras de disfrutar de una cena con amigos es alrededor de una pizza. Probablemente el hecho de compartir un plato, cortarlo en partes iguales y repartirlo, tenga algo que ver. Ahora bien, en términos nutricionales es importante distinguir entre una pizza casera y una precocinada. De hecho, la diferencia podría decirse que es abismal, al menos, desde el punto de vista nutricional, siendo especialmente recomendable la primera frente a la segunda.
Por tanto, pensando en la salud, ¿cuál sería el criterio que deberíamos seguir a la hora de comer una pizza? Básicamente, la clave está en los ingredientes. Cuanto más naturales, mejor. Cuando la hacemos en casa, la lista de alimentos para su preparación es mucho más saludable. Ahora bien, el abanico de opciones dentro del universo de las pizzas caseras es enorme.
A continuación, encontrarás una de las opciones más saludables. Lo que hace que sea especial es la base, la cual está hecha con calabaza y harina de trigo sarraceno, aunque también puede utilizarse harina de avena, según la autora de la receta. Y es que la calabaza, con todas sus variedades, es uno de los ingredientes más versátiles en la cocina. Con ella puedes preparar desde la típica crema, a bases de pizza como la que descubrirás a continuación, hasta donuts, cheesecake de calabaza, buñuelos o paté.
Base de pizza con calabaza y avena
Normalmente, le damos más importancia a los ingredientes que cubren la base de la pizza que a la propia base. Sin embargo, la base es la responsable de gran parte del éxito de este plato. Por un lado, las hay finas, gruesas, o con el borde relleno, por ejemplo; y por otro, podemos hacerlas con distintos tipos de harina y con diferentes alimentos, lo que le aportarán una textura determinada y un sabor especial.
A continuación, encontrarás la receta de la base de pizza hecha con calabaza y harina de trigo sarraceno, una delicia crujiente y con un sabor diferente.
Ingredientes:
- Tres trocitos de calabaza cocida
- 1 huevo
- 1 cucharada de harina de trigo sarraceno, o de avena triturada
Modo de preparación:
La elaboración de la base de la pizza de calabaza y avena es muy sencilla, y el resultado es espectacular. Estos son los sencillos pasos que señala la experta. Síguelos:
- Aplasta los tres trocitos de calabaza cocida en un plato.
- Añade el huevo y la cucharada de harina de trigo sarraceno a la mezcla hasta que obtengas una masa homogénea.
- A continuación, extiende la masa sobre un papel vegetal engrasado con aceite y dale forma de pizza.
- Mete la bandeja en el horno a 200 ºC durante 15 minutos.
- Pasado ese tiempo, sácala y ya está lista para cubrirla con los ingredientes que más te gusten. En el vídeo, la influencer ha puesto tomate natural triturado, queso, lacon y orégano.
- Ahora, dale un golpe de grill para fundirlo.
agregados saludables
Más allá de la base de la pizza, no podemos restar importancia a los ingredientes que escogemos para cubrirla. Un posible arreglo saludable podría incluir tomate natural triturado, champiñones, cebolla y tiritas de pimiento rojo y verde. Espolvorea un poco de orégano por encima.
La cuestión es que evites los alimentos con un aporte excesivo de grasas saturadas, como el bacon o el embutido.
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