El liquen plano es una lesión de la piel cuyo aspecto recuerda al del liquen vegetal, planta que se forma de la unión de un alga y un hongo y que se encuentra en lugares húmedos, sobre las piedras o en el tronco de los árboles.
Es una enfermedad inflamatoria crónica no infecciosa ni contagiosa, que aparece como bultos planos violáceos que se desarrollan durante varias semanas y puede afectar a brazos y piernas, manos, puños, pliegues de los codos, rodillas, tobillos, pies, cuero cabelludo y también la zona genital.
En la boca (interior de las mejillas, encías o lengua), la vagina y otras áreas recubiertas por membranas mucosas, el liquen plano forma manchas blancas reticuladas que a veces tienen llagas dolorosas. Es muy importante tratarlo a tiempo para evitar complicaciones potencialmente graves.
Síntomas del liquen plano
Estas lesiones cutáneas pican bastante, lo que resulta muy molesto. En la boca aparecen en la cara interna de las mejillas, en los bordes de la lengua, en forma de placas blancas, líneas y estrías que pueden parecerse al vegetal.
Causas del liquen
La causa puede estar relacionada con el sistema inmunitario y al mismo tiempo tener un componente psicosomático, puesto que a menudo aparece después de un trastorno emocional.
Los últimos estudios atribuyen al liquen plano un origen vírico, que puede coincidir con antecedentes de haber sufrido la hepatitis C.
Conviene evitar las amalgamas y metales en la boca
La existencia de empastes de amalgama adyacentes y otros metales en puentes y coronas sobre los dientes puede influir en la aparición del liquen plano en la boca.
Es aconsejable eliminar todo metal, tanto las amalgamas como los puentes o aparatos de otros metales, de una forma controlada y con tratamiento previo, guiado por un dentista, a ser posible bioenergético.
Terapias naturales para tratar el liquen plano
Se puede tratar el liquen plano de forma natural desde distintos ámbitos, que además son complementarios:
- Equinácea para aumentar las defensas: se recomienda tomar 20 gotas de tintura cada mañana.
- Aceites esenciales para aplicar sobre las lesiones de la piel: los de palmarrosa, clavo, geranio y laurel, mezclados con aceite de almendras dulces, tres veces al día. O bien, aceites esenciales de laurel y árbol del té, mezclados asimismo con aceite de almendras dulces, aplicados suavemente sobre las lesiones de la boca después del cepillado. Para el liquen oral, se puede enjuagar la boca por las mañanas con esta mezcla: 40 ml de aceite vegetal de comino negro, 20 gotas de aceite esencial (AE) de ravintsara, 20 de AE de romero verbenona, 10 de AE de geranio rosa y 10 de AE de camomilla noble.
- Oligoterapia: por la mañana manganeso-cobalto. Por la noche, azufre.
- Flores de Bach: Resultan apropiados los remedios de Wild Rose (Rosa silvestre), Olive (Olivo) y Mimulus (Mímulo): 15 gotas cada día. La rosa silvestre se indica para personas apáticas que aceptan todo lo que ocurre. El olivo, para el cansancio provocado por un gran esfuerzo. Y el mímulo para la ansiedad y el miedo cotidiano de causa conocida, y para la timidez.
- Homeopatía: Para las lesiones cutáneas se recomiendan: Anacardium Orientale 5 CH, Arsenicum album 5 CH y Natrum muriaticum 5 CH, 3 gránulos de cada una 3 veces al día, hasta que se experimente una mejoría. Para las lesiones bucales se recomiendan, sin embargo: Mercurius solubilis 9 CH, Belladonna 5 CH y Thuya 9 CH, 3 gránulos de cada una 3 veces al día.
- Enjuagues con propóleo al 20% diluido en agua. Se puede tomar, además, 10 gotas antes de cada comida, y aplicarlo directamente en la lesión, alternando con miel de manuka, también directamente.
- Cura hepática tomando durante 21 días con extractos de alcachofa, cúrcuma, bardana o cardo.
- Otras ayudas: puede ser útil tomar probióticos, magnesio y zinc.