Si no hay una sola nube en el cielo, tienes que entrecerrar los ojos. Unas buenas gafas de sol deberían protegerte del molesto sol deslumbrante y también de su radiación ultravioleta.
En general pasar tiempo al aire libre y al sol es beneficioso para l salud ocultar, pero si los rayos solares golpean los ojos con intensidad, puede producirse una inflamación dolorosa e incluso una lesión, si la incidencia es directa. A largo plazo también aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades oculares como las cataratas.
Por qué las lentes de las gafas de sol no deberían ser demasiado oscuras
A la hora de encontrar gafas de sol adecuadas, hay que tener en cuenta que el tinte de las lentes no tiene nada que ver con la protección UV, así que la suposición de que “cuanto más oscuro, mejor” es un error.
Unos vidrios demasiado oscuros, incluso, puede causar daños. Si se usan gafas de sol que filtran mucha luz con sus cristales muy oscuros, las pupilas se dilatan demasiado y al quitarse las gafas, aumenta la exposición de la retina a los rayos ultravioletas dañinos.
¿cuál es la protección más adecuada para los ojos?
Los vidrios de las gafas son tratados con diferentes agentes para filtar los rayos ultravioletas. Existe una escala que va del 0 al 4, cuanto mayor es el valor, más eficaz es el filtro frente a las radiaciones solares.
- La categoría 2 es ideal para el verano en la zona central de Europa.
- Para la zona sur, para la playa o la montaña, la categoría 3 es una buena opción.
- Las gafas de sol de categoría 4 son adecuadas para estar al alire libre en alta montaña
- Las gafas de las categorías 0 y 1 tienen menos demanda en verano, y son las más adecuadas para los cielos nublados y el clima cambiante, respectivamente.
Cómo reconocer los cristales con protección uv
La pregunta sigue siendo, ¿cómo puedo saber si las gafas ofrecen una buena protección contra la radiación UV?
Una pista importante es la marca CE, que garantiza que las gafas de sol cumplen con la norma pertinente de la Unión Europea en relación con la seguridad y que cuentan con un filtro UV que mantiene gran parte de la radiación nociva alejada de los ojos. En concreto, la normativa europea especifica que las gafas bloquean el 95% de los rayos UV.
Algunos modelos también llevan la indentificación "UV400", que garantiza que las gafas ofrecen un «100 % de protección UV» porque están equipadas con un filtro que bloquea todas las longitudes de onda en el rango de 10 a 400 nm.
No es posible conocer la protección que ofrece unas gafas adquiridas fuera de la UE.
Es la forma lo que importa
Aunque a algunas personas les parezcan más elegantes las microgafas de sol, si quieres proteger tus ojos de forma óptima del sol, las lentes deberían llegar al menos hasta las cejas. También es mejor usar modelos con las patillas un poco más anchas para que llegue menos luz solar lateral al ojo.
¿Segundo par de gafas o ajustables?
Para las personas con problemas de visión que usan normalmente gafas graduadas, un segundo par de gafas de cristales tintados es una buena idea para complementar las gafas de diario.
Los soportes que se enganchan a las gafas normales parecen ser la solución, pero a menudo, en el día a día, no son tan prácticos como parecen.
Otra opción es tener unas gafas de diario con cristales que se adaptan a las respectivas condiciones de iluminación.
A los usuarios de lentes de contacto les conviene comprar gafas de sol normales. También existen lentes de contacto con protección UV integrada, pero sólo cubren una parte del ojo.