Si nos detuviéramos un momento a analizar con detalle la postura que tenemos en muchas de las situaciones de la vida diaria, nos sorprendería comprobar que en demasiadas ocasiones nuestra postura deja mucho que desear. La cabeza inclinada, la espalda encorvada, el abdomen abultado, los pies hacia afuera...
Además, solemos adoptar y mantener estas posturas demasiado tiempo, lo que acaba acarreando problemas físicos a medio y largo plazo. En definitiva, nos provocamos problemas cuando serían perfectamente evitables tomando una serie de sencillas medidas. Al menos, eso es lo que defiende Shinji Sakazume, especialista en fuerza y acondicionamiento físico por la NSCA y profesor de la Escuela de Deportes YMCA de Yokoham, en su libro Un cuerpo ideal en 3 minutos (Kitsune books).
Este conocido entrenador de modelos, ha diseñado unas sentadillas especiales para mujeres con las que asegura que se consiguen los resultados prometidos en poco tiempo. Y es que, tal y como él mismo asegura, con el método adecuado todo el mundo puede ejercitar su cuerpo.
sentadillas y estiramientos curvos
Para Sakazume la clave de la belleza de la mujer reside en una silueta estilizada, es decir, con sus curvas y un cuerpo bien definido. Y para conseguir esta silueta ideal solo se necesita hacer sentadillas y estiramientos curvos.
Estos ejercicios se realizan en días alternos durante cuatro semanas. Eso no significa que los resultados no lleguen hasta que pase ese tiempo, ya que, según el experto, los cambios se pueden apreciar prácticamente desde el primer día, siendo realmente evidentes al cabo de una semana: el cuello y los hombros se descargan, la respiración se vuelve más fluida, el riego sanguíneo mejora y en definitiva, la condición física progresa notablemente.
ejercicio de La V invertida con los pies
Uno de los ejercicios que recomienda Sakazume para moldear la figura consiste en dibujar una V invertida con los pies.
Tal y como él mismo explica en su libro, "la superficie de la parte externa de los pies es la más extensa, por lo que brinda una mayor estabilidad al cuerpo, por eso tenemos un mayor equilibrio con las piernas abiertas y no cerradas.
Aplicando el mismo razonamiento, mucha gente tiende a abrir su pisada de forma inconsciente, por lo que acaban caminando con los pies hacia afuera y colocando todo su peso por la parte externa de los pies. Es una postura muy cómoda, pues la superficie que entra en contacto con el suelo es mayor por el exterior que por el interior del pie, con la que el cuerpo invierte muy poca energía gracias a que se apoya en los huesos y ligamentos de las rodillas.
Sin embargo, resulta muy difícil elevar la pelvis y estirar la columna cuando se está de pie en esa postura. Con la rotación posterior de la pelvis, los músculos de la cadera y los isquiotibiales se tensan, la espalda se curva y los abdominales también se ponen rígidos.
Estos serían los pasos para realizar este ejercicio correctamente:
- El primer paso es empezar trabajando las piernas, pues son la base de nuestro cuerpo. Separa las piernas al ancho de las caderas y gira los pies hacia dentro, formando una V invertida.
- Coloca tu peso en la parte interna. Esto te servirá para estirar las rodillas, lo que enderezará la pelvis, subirá los glúteos, estirará los abdominales y, a su vez, te servirá para elevar el pecho. Tendrás una mejor postura al alcance de la mano al ajustar tu cuerpo en el siguiente orden: primero las piernas, luego la cadera y, por último, el pecho.
Combina sentadillas y estiramientos
Para obtener los mejores resultados, el creador de este método aconseja alternar las sentadillas con ejercicios de estiramientos a lo largo de la semana. Así, lo ideal es realizar tres días de cada tipo de rutina, y un día de descanso, ya que, cuando sometes a tu cuerpo a un esfuerzo mayor del que está acostumbrado, los músculos se fatigan. Tardan entre 48 y 72 horas en recuperarse, por lo que se necesita al menos un día para compensar el esfuerzo.
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