Los efectos psicológicos son fenómenos fascinantes que influyen en nuestra percepción, pensamiento y comportamiento de maneras sorprendentes. Estos efectos, también conocidos como sesgos cognitivos, son patrones predecibles en la forma en que procesamos la información y tomamos decisiones.
Aunque la mayoría pueden parecer extraños o ilógicos, es importante destacar que los efectos psicológicos no son problemas mentales ni trastornos psiquiátricos, solamente reflejan particularidades curiosas de la mente humana.
A través de este artículo, exploraremos 20 de estos efectos psicológicos curiosos
20 efectos psicológicos en los que quizás te reconozcas
Estos efectos psicológicos nos ayudarán a comprender mejor cómo interpretamos la realidad y cómo reaccionamos a ella. Quizá te reconozcas en alguno de ellos.
Efecto Mandela
Tendencia a recordar incorrectamente eventos históricos o detalles culturales, compartiendo, a menudo, estos falsos recuerdos con otros y perpetuando la confusión.
El fenómeno que puso nombre a este efecto es la creencia de muchas personas de que Nelson Mandela murió en prisión en los años 80, en lugar de en 2013, en libertad y, tras haber sido, incluso, presidente de su país.
Efecto Zeigarnik
Tendencia a recordar tareas incompletas o interrumpidas con mayor facilidad que las tareas completadas. Las tareas pendientes suelen recordarse con tensión y ansiedad.
Curiosidad: Fue descrito por la psicóloga Lituana Bliuma Zeigarnik al darse cuenta de que un camarero recordaba los pedidos que aún tenía pendientes, mientras que olvidaba los que ya había servido.
Efecto Flynn
Describe el aumento continuo en las puntuaciones de inteligencia de la población general, a lo largo de las décadas. Existe controversia sobre la explicación de este fenómeno. Unos lo achacan al efecto del sistema educativo (al potenciar las habilidades cognitivas que miden los tests), mientras que otras hipótesis apuntan a mejoras en la nutrición y la salud general.
Curiosidad: Algunas investigaciones han encontrado que este crecimiento se ha frenado en las últimas décadas; hablan de efecto Flynn negativo.
Síndrome de Stendhal
El síndrome de Stendhal se refiere a una reacción emocional intensa ante la belleza artística, en la que una persona se siente abrumada y puede experimentar síntomas físicos como mareo, palpitaciones o, incluso, pérdida de conocimiento.
Ejemplo: Un visitante de un museo que se siente abrumado y conmovido por una obra de arte en particular.
Efecto Hawthorne
Es la tendencia de las personas a cambiar su comportamiento cuando se sienten observadas, lo cual puede provocar una mejora temporal en su rendimiento.
Un ejemplo clásico es el de los trabajadores que mejoran su productividad cuando saben que se está llevando a cabo un estudio sobre su trabajo.
Sinestesia
Las personas con sinestesia experimentan una mezcla y combinación de los sentidos, de forma que un estímulo en un sentido desencadena una respuesta en otro.
Por ejemplo, una persona puede ver colores específicos cuando escucha ciertos sonidos o notas musicales.
Efecto Dunning-Kruger
El efecto Dunning-Kruger se refiere a la tendencia que tienen algunas personas a a sobrestimar su propia habilidad o conocimiento en un área determinada, a pesar de la falta de experiencia o habilidades reales. Por contra, las personas con altas capacidades para un tema, tienden a subestimar su habilidad al ser conscientes de su complejidad y de lo que aún les queda por aprender.
Por ejemplo, un estudiante universitario que cree que es muy bueno en matemáticas, pero que realmente tiene un bajo rendimiento en esta materia.
Efecto Mozart
Se refiere al impacto positivo de escuchar música clásica sobre el desarrollo de la inteligencia y otras habilidades cognitivas. Fue acuñado por el otorrinolaringólogo francés Alfred Tomatis.
Estudios posteriores han encontrado que, aunque escuchar música clásica sí parece tener un efecto beneficioso, éste no es tan exagerado como se suponía décadas atrás.
Efecto Pigmalión
Se habla de efecto Pigmalión para referirse al hecho de que las expectativas de una persona hacia otra pueden influir en su rendimiento. Si alguien tiene expectativas altas de otra persona, es más probable que esa persona tenga éxito debido a la retroalimentación positiva y las oportunidades que se les brindan.
Cuando las expectativas son negativas y provocan el fracaso de la persona, se habla de Pigmalión negativo.
Síndrome del impostor
El síndrome del impostor alude a la sensación de que uno no merece el éxito que ha logrado y de que es una especie de "fraude" o "impostor" en su campo. Estas personas dudan de su capacidad y sienten que en cualquier momento serán descubiertas.
Ejemplo: un profesional altamente exitoso que siente que no merece su posición y que sus logros se deben a la suerte o al engaño.
Efecto Priming
La exposición previa a un estímulo puede afectar a la interpretación o la respuesta ante otro estímulo posterior. La situación inicial puede ser una experiencia, un comentario de otra persona o, incluso un pensamiento de nuestra propia mente, y puede condicionar nuestra reacción posterior.
Por ejemplo, si escuchamos una canción que nos recuerde a la infancia, es más probable que ese día nos apetezca algún alimento que tomábamos en esa época.
Efecto Forer
Las personas tienden a aceptar descripciones vagas y generales de su personalidad como si fueran específicas y personalizadas para ellos. Esto se debe a que las descripciones son lo suficientemente amplias como para que muchas personas puedan relacionarse con ellas.
Por ejemplo, cuando el horóscopo describe a alguien como "una persona extrovertida pero a veces introvertida, que se preocupa por los demás pero también tiene momentos de egoísmo" esta descripción podría aplicarse a muchas personas.
Efecto placebo
Por efecto placebo se conoce al fenómeno en el que un tratamiento sin efectos curativos conocidos mejora la salud de una persona, simplemente porque cree que la terapia es efectiva.
Ejemplo: Una persona con dolor de cabeza que recibe una píldora de azúcar en lugar de un analgésico real, pero que siente alivio del dolor de todos modos.
Efecto Halo
La impresión general positiva que una persona tiene de alguien puede influir en la forma en que percibe todas sus otras características. En otras palabras, si alguien piensa que una persona es atractiva o inteligente, es más probable que también piense que es amable y simpática.
Por ejemplo, un entrevistador que se impresiona por la apariencia de un candidato podría pensar que tienen todas las habilidades necesarias para el trabajo, incluso si hay pruebas de lo contrario.
Efecto de la camarilla
Esta es la tendencia a preferir estar en grupos o rodearse de personas con las que tienen algo en común, como intereses, valores o antecedentes culturales.
Por ejemplo, en un grupo de trabajo, los miembros que comparten una misma opinión pueden llegar a excluir a aquellos que piensan diferente, creando una camarilla que refuerza sus creencias y opiniones.
Disonancia cognitiva
Las personas experimentan malestar e incomodidad cuando sus creencias, actitudes o comportamientos se contradicen y entran en conflicto. Para reducir este malestar, se renuncia o se modifica una de las partes, de forma que la persona se autoengaña bajo una supuesta estabilidad.
Un ejemplo de disonancia cognitiva puede ser el de las personas que justifican los maltratos recibidos en la infancia diciendo “mis padres me pegaban, pero lo normal”.
Efecto de la moneda perdida
Este fenómeno se produce cuando una persona invierte más esfuerzo o recursos para recuperar algo que se ha perdido, incluso cuando el valor del objeto perdido es menor que el costo de recuperarlo.
Por ejemplo, un turista pierde su cámara fotográfica y pasa el resto de sus vacaciones buscándola, en lugar de disfrutar del viaje.
Efecto de la saliencia
Tendencia a enfocarse en estímulos llamativos e ignorar los que nos resultan más neutrales. Este efecto puede influir en la toma de decisiones y percepciones.
Un ejemplo puede ser el de un conductor distraído por un cartel publicitario en la carretera, no se da cuenta de una señal de tráfico importante.
Atención selectiva
Esta es la capacidad de prestar atención solo a ciertos estímulos mientras se ignora el resto de distractores. Este es un aspecto básico para la supervivencia y la adaptación puesto que nuestra capacidad de atención es limitada y debemos aprender a filtrar cuáles son los estímulos importantes.
Seguro que te ha ocurrido alguna vez estar tan concentrada en tu móvil que no te dabas cuenta de los ruidos o las conversaciones que tenías a tu alrededor. En esos momentos, está funcionando tu atención selectiva.
Efecto de la anchura de banda limitada
Nuestro cerebro es muy poderoso, pero tiene sus restricciones. Una de ellas es la capacidad limitada para procesar y recordar información. Además, esta capacidad de procesamiento puede verse afectada por factores como el estrés o el cansancio.