Vaya por delante que para que una dieta sea completa, variada y equilibrada, es fundamental incluir en ella, alimentos frescos, y si es posible, de temporada. Así lo aconsejan instituciones como la Fundación Española del Corazón. Sus expertos recomiendan consumir fruta de temporadacon piel y bien lavada, ya que así se conservan las vitaminas, la fibra y los minerales.
Partiendo de esta idea, tenemos ante nosotros todo un abanico de opciones dietéticas para nuestro menú diario. En este artículo, nos centraremos en las frutas de temporada, y en concreto, en la pera de agua o blanquilla cuya temporada trascurre entre los meses de junio y diciembre, siendo agosto el mes en el que vive su momento óptimo.
Si es "perfecta", desconfía
Comer fruta de temporada es la mejor manera de disfrutar de las cualidades organolépticas del alimento, es decir, de su sabor, aroma, textura, e incluso de su apariencia. También es la forma de aprovechar sus propiedades nutricionales cuando están en su mejor momento.
Para escoger las mejores, siempre podemos confiar en el criterio del frutero donde compramos normalmente, o escuchar los consejos de los expertos y aprender a distinguir cuáles son las mejores frutas, en este caso, las peras de agua más ricas.
Uno de los influencers con más éxito del momento ha publicado recientemente un consejo sobre el asunto. En su vídeo, el frutero responde a la siguiente pregunta: ¿Cómo puedo saber si una pera está buena antes de partirla? Básicamente, el frutero tiktokero asegura que una pera que por fuera se presenta perfecta, lo que llamaríamos, una pera bonita, cuando la partimos por la mitad, vemos que está excesivamente madura (modorra, como él dice). Esto es así porque, tal y como explica en el vídeo, la pera blanquilla madura de dentro hacia afuera, de modo que, cuando en el exterior parece estar en su punto, en el interior ya está "pasada".
Por tanto, el truco del frutero consiste en elegir las peras menos agraciadas. Eso sí, esto no incluye las peras golpeadas o con signos de estar contaminadas. O dicho de otro modo, lo más acertado es descartar las peras más atractivas, priorizando en su lugar las peras más feas y con manchas. Eso nos dará la pista para elegir la pera más dulce, fresca y jugosa.
perfecta para adelgazar
La característica más genuina de las peras de agua o blanquilla es que cuando está madura, suelta un hilillo de líquido. Ese es el motivo por el que se le llama pera de agua.
Es una fruta fresca y jugosa que aporta numerosas propiedades nutricionales. Así, destaca por ser diurética, depurativa, saciante y tener muy pocas calorías. Aspectos que hacen que sea una candidata ideal para formar parte de una dieta de adelgazamiento.
Estas son otras propiedades asociadas al consumo de la pera que merece la pena tener en cuenta:
- Fortalece el sistema inmunitario.
- Cuida de la microbiota intestinal.
- Ayuda a controlar la tensión arterial.
- Contribuye al buen funcionamiento del sistema nervioso y muscular.
- Combate el daño producido por los radicales libres, gracias a su contenido en antioxidantes. Por tanto, ayuda a frenar el envejecimiento prematuro de los tejidos y órganos.
- Reduce los efectos de la diabetes, la hipertensión arterial y problemas relacionados con el sistema circulatorio, gracias a su bajo contenido en sodio e hidratos de carbono, y su elevado aporte en potasio.
Valor nutricional por cada 100 g
- Energía: 43 kcal
- Proteínas: 0, 30 g
- Grasas: 0,10 g
- Carbohidratos: 11,40 g
- Azúcares: 9,75 g
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