La Organización Mundial de la Salud acaba de publicar en un informe que la creciente popularidad y disponibilidad de alternativas de origen vegetal a las fuentes tradicionales de yodo, como la leche, los productos lácteos y el pescado, está contribuyendo a una ingesta insuficiente y persistente de yodo en Europa.
El consumo de leche está disminuyendo entre adolescentes y adultos, lo que aumenta el riesgo de deficiencia de este mineral. Esta tendencia incrementa los riesgos para la salud, especialmente para las mujeres embarazadas, que tienen mayores necesidades de yodo.
El yodo se encuentra esencialmente en los alimentos de origen animal, pero no es difícil conseguir las dosis necesarias, que son muy pequeñas, de alimentos naturales que son aptos para los veganos.
Síntomas de la deficiencia de yodo
Algunos síntomas específicos de que no estamos ingiriendo suficiente yodo son:
- La tiroides puede agrandarse hasta el punto de aprecia un bulto en el cuello (este síntoma se conoce como bocio).
- La tasa metabólica basal disminuye debido a la insuficiencia hormonal y se puede producir un aumento de peso.
Otros síntomas son menos específicos, es decir, pueden aparecer tanto por una deficiencia de yodo como por otras carencias nutricionales: ralentización de los reflejos, mala digestión, estreñimiento, sensación de frío, piel seca, depresión, falta de concentración, cansancio, desgana e irritabilidad.
En el caso de las mujeres embarazadas, la deficiencia de yodo es un asunto delicado porque puede causar trastornos de crecimiento en el bebé y aborto espontáneo.
Necesidades diarias de yodo
Estas son las cantidades de yodo que se necesitan cada día:
- Niños en edad escolar: 150-299 mcg
- Adolescentes de 14 a 18 años: 150 mcg
- Adultos: 150 mcg
- Mujeres embarazadas: 220 mcg
- Mujeres lactantes: 290 mcg
alimentos que contienen yodo en la dieta vegetal
1. Algas
Las algas son los alimentos más ricos en yodo. De hecho, un consumo excesivo puede ser perjudicial para la salud. El Comité Científico de la Alimentación Humana de la Unión Europea establece un límite máximo para la ingesta de yojo de 600 mcg/día para los adultos y de 200 mcg/día para los niños de 1 a 3 años.
La cantidad de yodo en las algas puede variar mucho entre las distintas especies, pero, en general, conviene tomar cantidades pequeñas de las algas que contienen dosis moderadas.
Por ejemplo, es más que suficiente tomar 3 g de alga nori, que es una de las que contienen menos yodo. No hace falta que este consumo sea diario. Por otra parte, intenta conseguir algas de calidad ecológica.
Para usarla habitualmente, puedes preparar una sal de algas nori:
- Tuéstala ligeramente 5 g de nori y luego deshazla con las manos.
- Ponla en un molinillo de café junto con 30 g de sal maldón.
- Tritura ligeramente la mezcla.
2. sal yododa
La Organización Mundial de la Salud recomienda consumir sal yodada. Generalmente los fabricantes añaden 20 mg de yodo por cada kilo de sal, por lo que sería necesario consumir de 8 a 13 g de sal al día para cubrir las necesidades diarias. Sin embargo, no se debe consumir más de 5 g de sal al día, por lo que la sal yodada es una gran aportación, pero puede ser la única.
Además, ten en cuenta que si utilizas la sal yodada en los guisos que se desecha el agua, parte del yodo se va a perder.
3. Complementos dietéticos de origen vegetal
La forma más segura de satisfacer las necesidades de yodo es mediante un suplemento dietético. Ten en cuenta los siguientes consejos:
- No tomes el 100% de tu requerimiento diario mediante un suplemento dietético, porque parte lo vas a conseguir de la sal yodada y las algas.
- Asegúrate de que los suplementos sean de alta calidad: deben estar libres de sustancias nocivas como pesticidas, metales pesados, toxinas ambientales y aditivos innecesarios.
- Si ya estás tomando algún suplemento dietético, comprueba si contiene yodo antes de aquirir un suplemento específico. Los productos multivitaminas suelen contener yodo.
- En caso de duda acude a tu médico de cabecera y déjate asesorar por él.