El otoño avanza y nos sitúa a las puertas del invierno, que arrancará hacia finales de mes. El paisaje en la huerta se transforma poco a poco, sin renunciar todavía a la mayoría de las frutas y las verduras típicas de la estación otoñal.

Por esta época, las reinas del calendario de temporada son ya las naranjas, que empiezan a llegar más dulces y ayudan a nuestras defensas con su riqueza en vitamina C y otros compuestos antioxidantes.

Las verduras de invierno se consolidan en diciembre y preparan el terreno para que nos adentremos en una cocina más lenta y nutritiva que nos proporcione calor interno. A su vez, el frío invita a pasar más horas en casa y a dedicarle a los fogones el tiempo que merecen.

Para la medicina tradicional china tan importante es ahora seguir cuidando de nuestros pulmones (los órganos que requieren más atención en otoño) como empezar a prepararse para el cambio de estación cuidando de nuestros riñones. Las raíces, las legumbres y las cocciones largas nos ayudan en este sentido.

 

¿Qué frutas y verduras están en temporada en diciembre?

En el último mes del año todavía podrás encontrar las frutas más típicas del otoño. De algunas convendrá irse despidiendo a medida que avancen los días y el frío arrecie, como la chirimoya, el caqui o el membrillo, aunque otras seguirán ofreciendo la mejor versión de sí mismas durante todo el mes, como la granada o el aguacate.

temporada de cítricos y frutas tropicales

Sigue habiendo manzanas, peras, kiwis, dátiles frescos, algo de uva... pero sin duda la estrella de la temporada son las frutas cítricas. Junto a las mandarinas, que ya llevan carrerilla, y los limones, que encontramos prácticamente todo el año, despuntan las naranjas, cuya piel gruesa les permite resistir sin problemas las temperaturas más bajas del invierno.

De las zonas más cálidas del país seguirán llegando también frutas tropicales como el mango, la papaya o la piña, que ponen una buena guinda a las comidas festivas de esta época.

Abundantes verduras invernales

Sin embargo, poco a poco los colores verdes y blancos irán predominando en tu cesta de la compra con la consolidación de coliflores, brócolis, repollos, alcachofas, nabos, chirivías, hinojos, puerros y las verduras de hoja invernales, que llegan cada vez más esplendorosas.

Acelgas, borrajas, cardos, apios y espinacas no pueden faltar en tu cocina en esta época. En guisos, en caldos, hervidas... estas verduras serán una gran compañía durante los meses fríos.

En el cambio de estación no te faltarán tampoco las calabazas ni los boniatos. Son hortalizas concentradas que reconfortan, alimentan y aportan sustancias esenciales para el cuidado de las mucosas, más vulnerables en esta época.

Y encontrarás todo tipo de raíces y otros tubérculos, con toda la energía que habrán ido concentrando bajo tierra.

Buenos alimentos para hacer ensaladas invernales

Si bien es cierto que el organismo te pedirá más platos calientes, no es necesario que renuncies por completo a platos como las ensaladas, en las que siempre puedes combinar vegetales crudos y cocinados o tibios. De hecho, incluir en el menú alimentos crudos, aunque sea en pequeña cantidad, te ayuda a obtener mejores dosis de minerales y vitaminas.

Con las lechugas de invierno, como la escarola, las endibias o los canónigos, las posibilidades son infinitas. Casan de maravilla con hortalizas como la zanahoria y el hinojo, o con frutas como la manzana, la pera o la uva. Y para aquellos a los que les cuesta renunciar al tomate, cuya temporada quedó hace tiempo atrás, llega una variedad de invierno que además es exquisita: el tomate raf.

Aquí tienes tu lista de la compra para diciembre:

Diciembre también es un buen mes para...

A lo largo del otoño y el invierno se recogen muchas raíces, tanto para cocinar como para uso medicinal. Ahora es un buen momento para recoger, por ejemplo, la raíz de regaliz.