Un gato es un gran compañero de piso o de habitación. Es limpio, en cierto modo autónomo, y no necesita grandes cuidados. Pero eso no quiere decir que no precise atenciones ante diferentes situaciones que pueden poner en riesgo su bienestar psicológico. Depresiones, ansiedad, estrés o traumas son algunos de los problemas de salud mental a los que puede verse sometido.
Por supuesto, esto no ocurre de la noche a la mañana, sino que lo habitual es ir viendo señales que, si se presta atención, pueden ayudar a darse cuenta de que algo no está bien en tu felino.
síntomas de que un gato tiene un problema de salud mental
La estabilidad emocional de un gato puede no ser siempre la misma día tras día o año tras año. Al igual que los seres humanos, los felinos domésticos pueden pasar por crisis de ansiedad, depresión, estrés o incluso un TOC (trastorno obsesivo compulsivo).
Cuando se comparte el día a día con un gato sólo hay que observarlo para determinar si algo no acaba de ir. Sin embargo, darse cuenta de ello puede no ser suficiente para dar la voz de alarma y pensar en un problema mental. Es por ese motivo por el que existen estudios donde se han desarrollado métodos para evaluar su estado emocional, como por ejemplo el llevado a cabo por el RSPCA (Royal Society for the Prevention of Cruelty to Animals).
Entre los síntomas más habituales que manifiestan los felinos con problemas emocionales están:
- Conductas compulsivas. Como puede ser arañar un mueble o una zona de la casa, intentar escaparse o la vocalización excesiva a través de maullidos, gruñidos u otros sonidos repetitivos y constantes.
- No hacer sus necesidades en el arenero. También es posible que haya un marcaje en otras zonas de la casa con orina o heces. Cuando un gato no hace sus necesidades donde debe, puede deberse a que se siente intimidado en ese lugar, que el arenero está sucio o bien que hay un problema de otra índole.
- Dejar de comer. Que un minino esté inapetente no sólo puede ser señal de una mala salud mental, sino de muchos otros problemas de salud. Pero, en general, el dejar de comer indicará que hay algo que no va bien y conviene averiguar la causa.
- Comportamientos agresivos como atacar, morder o gruñir, aunque también comportamientos como rehuir de la compañía humana.
- Apatía. La apatía en los gatos se detecta a través de los cambios en sus horas de sueño (pasa más tiempo dormido de lo habitual) y en sus ganas de juego (tiende a no querer jugar). Tampoco reacciona a los estímulos o bien se asusta de estos y termina escondido durante horas.
- Hiperactividad. Debido, en muchas ocasiones, a situaciones de ansiedad que pueden venir por no tener estímulos suficientes para el animal. Por ejemplo, no disponer de ventanas para trepar, espacios donde aislarse, escaleras o estanterías por donde saltar.
En este vídeo te contamos algunas de las comodidades y cuidados que puedes dar a tu gato para mejorar su bienestar y que se sienta cómodo y feliz en casa:
¿Qué hacer si tu gato no está bien?
En caso de que hayas detectado alguno de los síntomas anteriores, si bien pueden deberse a otros problemas, no está de más acudir al veterinario. De esta manera, se pueden descartar situaciones más graves que puedan poner en peligro la vida de tu gato o poner remedio a un trastorno que, de lo contrario, podría afectar seriamente al animal.
Si se descarta cualquier problema físico, es recomendable ponerse en contacto con un etólogo, especialista en la psicología felina, ya que puede ayudar a solventar muchas de las situaciones problemáticas a nivel mental de los gatos. Una de las posibles soluciones que alientan en muchos casos es el uso de las flores de Bach, una opción que permite tratar, de manera interna, problemas como la ansiedad, por ejemplo la ansiedad por separación, o el aislamiento u otras situaciones conflictivas.
En todo caso, el primer paso para ayudar a mejorar la salud mental de un gato es determinar cuál es la causa, o causas, por las que se ha generado una inestabilidad en ella. De esa forma, se podrá atacar el problema y que tu felino se vuelva a sentir bien física y mentalmente.