Dicen que todo lo bueno o mata o engorda, y aquí tienes una buena prueba de que (afortunadamente) no siempre es así, incluso tratándose de dulces. Sí, sí, tal como estás leyendo. A nadie se le escapa que el sabor dulce es el que más adeptos tiene, y aunque no seamos personas excesivamente golosas, de vez en cuando a nadie le amarga un dulce, como también suele decirse.
En nuestra mano está que el dulce en cuestión sea lo más natural posible, ya que muchos productos comerciales están repletos de un exceso de azúcares, grasas insanas, colorantes y un largo etcétera. Por ejemplo, existen alternativas más saludables, elaboradas con alimentos dulces para que puedas disfrutar sin preocupaciones. Algunas de ellas serían este "pastelito" elaborado con plátano, yogur y huevo, esta minitarta de zanahoria o este flan proteico del que ahora te cuento más.
Flan proteico en 3 minutos
Además de ser un postre o merienda saludable que vas a poder tomar sin preocuparte por su lista de ingredientes puesto que puedes hacerlo en casa sin problema, preparar esta maravilla solo te llevará 3 minutos de tu tiempo (más lo que tarde en enfriarse, claro).
Otra de sus ventajas son las proteínas que contiene. A estas alturas todos tenemos muy claro la importancia de incorporarlas a nuestra dieta, ya sea en el desayuno, la comida o la cena, así que ¿por qué no hacerlo también en postres y meriendas?
Y qué mejor que hacerlo con huevo, un alimento muy rico en proteínas completas de calidad, tanto es así que se considera el rey de los alimentos proteicos. Toma nota porque esta receta además lleva 2.
Ingredientes
- 2 huevos camperos
- Estevia
- 1 vaso de leche desnatada o bebida vegetal al gusto
- Media cucharada de esencia de vainilla
Modo de elaboración
Como verás a continuación, la receta es tan rápida como fácil y tan solo tienes que preparar los ingredientes y seguir el paso a paso. En cuanto al endulzante, aquí se ha optado por la estevia pero puedes optar por otro endulzante natural no calórico como el xilitol o el eritritol, muy de moda en la actualidad pero del que no conviene abusar.
- Casca los huevos y bátelos con la estevia hasta que quede bien integrada. Te resultará más fácil si lo haces con las varillas eléctricas.
- A continuación vierte la leche desnatada y 2 o 3 gotas de esencia de vainilla. Lee las indicaciones del fabricante ya que puede variar la dosis según la marca. Bate de nuevo hasta que obtengas una mezcla suave, homogénea y esponjosa; en principio bastará con un minuto para lograrla.
- Por último, dispón la mezcla en un bol o recipiente apto para microondas, según la forma que quieras que tenga tu flan.
- Calienta 2 minutos a máxima potencia. Si ves que no está hecho, déjalo un minuto más; el molde que hayas elegido y la potencia de tu microondas harán que el tiempo varíe, así que es mejor que estés pendiente para que te quede en su punto justo. Puedes desmoldarlo o dejarlo tal cual.
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