La forma en que miramos el mundo define cómo vivimos nuestras experiencias, enfrentamos los desafíos y aprendemos de ellos. Enrique Rojas, reconocido psiquiatra y experto en psicología positiva, propone una clasificación de las miradas que adoptamos en la vida con una diferencia sutil, pero importante, a lo que hacen otros profesionales de la salud mental.

Estas tres formas de observar el mundo no solo reflejan nuestra percepción de la realidad, sino también nuestra capacidad de gestionar emociones y encontrar sentido, incluso en medio de la adversidad. Él considera que adoptar determinada forma de mirar la vida es la clave para alcanzar la verdadera sabiduría psicológica y la auténtica felicidad. ¿Te atreves a intentar cambiar la forma en la que ves las cosas?

Hay tres formas de mirar el mundo

Rojas describe tres tipos de miradas fundamentales: la corta, la larga y la panorámica. La primera, también conocida como shorter vision, se centra en el presente inmediato, en lo que sucede hoy y ahora. Si bien esta forma de ver la vida puede ser útil para resolver problemas urgentes, esta perspectiva puede atraparnos en un ciclo de reacciones impulsivas, y una falta de previsión que solo logrará limitar nuestro crecimiento personal.

Por otro lado, tenemos la mirada larga, o longer vision, que seguramente muchos escogeríamos como la mejor o la más adecuada para llevar una buena vida. Da un paso más allá que la visión corta, para lograr enfocarse en el futuro. Esta perspectiva es esencial para planificar y visualizar metas a mediano y largo plazo, indispensable para tomar buenas decisiones. Sin embargo, incluso esta mirada puede carecer de profundidad si no se contempla una compresión más amplia del contexto de tu vida. Tu futuro no puede existir sin tu presente, y tu presente no existiría sin tu pasado. La visión a largo plazo omite estos esenciales pasos que debemos comprender e integrar.

Por último, tenemos aquello a lo que Enrique Rojas llama “mirada panorámica”, una que nos invita a ver el mundo desde una perspectiva más elevada. El psicólogo usa la metáfora de la “visión de águila”, para explicar como esta mirada nos eleva, permitiéndonos sobrevolar nuestras preocupaciones y problemas. Esta forma de mirarno solo integra presente, pasado y futuro, sino que también nos ayuda a relativizar los contratiempos, reduciendo su dramatismo y permitiéndonos encontrar significado en ellos. Es en esta capacidad de perspectiva donde, según el psiquiatra, reside la verdadera sabiduría psicológica.

Aprender a desarrollar la visión panorámica y la sabiduría psicológica

Desarrollar una visión panorámica y, con ella, la consagrada sabiduría psicológica de la que nos habla Rojas, no es un proceso automático. Requiere esfuerzo, reflexión y práctica. Y para alcanzarla, puedes empezar a poner en práctica estos hábitos.

  • Educa tu mirada. Aprender a enfocar tu atención en lo positivo y en lo que puedes controlar es fundamental para mantener una actitud optimista y esperanzadora. Esto no significa ignorar los problemas, sino abordarlos desde una postura más equilibrada y constructiva.
  • Gestiona la frustración. En lugar de dejarte llevar por el dramatismo, es esencial aprender a aceptar que la vida está llena de altibajos si queremos cultivar una visión más amplia. Reconocer en cada dificultad la posibilidad de crecer, te ayudará a mantener la calma y la confianza en el futuro, incluso en los días más grises.
  • Cultiva la empatía. La empatía no solo nos permite entender mejor a los demás, también nos ayuda a ampliar nuestra comprensión del mundo. Salir de nuestro dolor, para comprender el ajeno, calma el alma y la mente. Además, al ponerlos en el lugar de otros, adquirimos una perspectiva más rica y compleja de las situaciones.
  • Busca momentos de reflexión. Dedicar tiempo a pensar en nuestras experiencias, analizar nuestros errores y valorar nuestros logros nos ayuda a desarrollar una visión más completa de nuestra vida. Por eso, cultivar tu autoconocimiento puede ser la mejor forma de ampliar tu mirada y conseguir esa sabiduría psicológica que predica Enrique Rojas.
  • Desarrolla la paciencia. Aprender a esperar y aceptar los tiempos propios de cada situación es clave para desarrollar una perspectiva más amplia. La paciencia nos permite evitar decisiones precipitadas y apreciar el proceso de cada experiencia.
  • Amplia tu horizonte personal. Viaja, lee y exponte a nuevas culturas. Esto te ayudará a comprender el mundo desde diferentes ángulos, integrando en tu mente nuevas ideas. Estas experiencias amplían la visión y nos enseñan a valorar al diversidad de perspectivas.