Las 5 películas que aconseja un psiquiatra ver este 2025 para aumentar la inteligencia emocional y aprender más sobre nosotros mismos

El arte tiene el poder de transformarnos, es lo que defiende a capa y espada el autor de El arte de ser humanos, el neurocientífico David Bueno. Y si hablamos de arte, no podemos olvidarnos del cine, el último en llegar, pero posiblemente el más destacado en pleno siglo XXI. Por supuesto, hay películas y películas. Y aunque todas ellas puedan generar reacciones positivas en nuestro cerebro, hay historias con el potencial de cambiarnos la vida.

Es lo que nos propone el Dr. Alejandro Martínez Rico, uno de los psiquiatras más reconocidos de internet. “Las películas no son solo entretenimiento: son espejos de nuestra humanidad. Nos permiten entrar en mundo que, aunque ficticios, resuenan con nuestras vivencias más reales”, explica el experto.

En su opinión, hay cinco títulos indispensables, que además cuentan con muy buenas valoraciones de la crítica, que pueden enseñarnos mucho y ahorrarnos algún que otro disgusto. “Cuando se trata de salud mental, el cine tiene un poder único: el de derribar muros”.

Casa en llamas (2024)

Además de haberse hecho con algunos Goya, Casa en llamas es una de las películas del año. La cinta nos coloca en medio de una incómoda comida familiar. Por medio del humor negro y escenas cargadas de tensión, nos invita a abordar algunas verdades incómodas.

Y es que, en muchas ocasiones, las reuniones familiares pueden ser el escenario perfecto para el caos. En Casa en llamas vemos cómo el pasado nunca se queda del todo atrás y cómo, a veces, es necesario incendiar los recuerdos para empezar de nuevo.

La película nos recuerda que las conversaciones incómodas son inevitables, pero huir de ellas solo aviva las brasas del rencor. Entre reproches y silencios cargados, nos enseña que aprender a poner límites, reconocer nuestras heridas y soltar lo que nos quema por dentro es clave para la salud mental.

El peor vecino del mundo (2022)

“Jamás debes juzgar a nadie, porque no tienes ni idea de la mochila que carga a sus espaldas”, nos advierte el Dr. Alejandro al introducirnos esta película. Con Tom Hanks comiéndose la pantalla, la cinta nos presenta la historia del peor vecino del mundo. Es gruñón, se enfrenta sin descanso a todo lo que sus vecinos intentan hacer y se niega a aceptar que el mundo ha cambiado. Guarda, además, un terrible secreto: desde hace días, intenta acabar con su vida.

La película nos habla de las razones que nos quedan en la vida para vivir cuando creemos haber perdido lo más importante. Es una oda a la comunidad, al poder de las relaciones personales (por minúsculas que parezcan) y a la belleza de la vida en sí misma.

No podemos juzgar a los demás por lo que aparentan sin conocer su historia. Y a veces, pararse a escuchar a quien menos habla es la mejor forma de devolverle voz a quien la ha perdido.

Bajo terapia (2023)

El Dr. Alejandro recomienda esta película por muchas razones. “Da muchísimos consejos muy utiles”, asegura. Y la trama te dejará sin habla. Dirigida por Gerardo Herrero, la cinta adapta una obra de teatro homónima, y nos coloca en el siguiente escenario: tres parejas se reúnen en una habitación para hacer una peculiar terapia de pareja. Deben resolver, por turnos, diferentes preguntas incómodas y confiar en el proceso para solucionar sus problemas de pareja.

Bajo Terapia no solo aborda temas habituales en las parejas, muchos de los cuales barremos bajo la alfombra hasta que ya es demasiado tarde. No, la cinta va un paso más allá y, como explica el psiquiatra, “el final aborda una triste realidad que todos deberíamos aprender a reconocer”.

 

 

 

 

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El padre (2020)

Si alguna vez te has sentido perdida en un lugar que solías conocer, entenderlas la angustia de El padre. La película, galardonada con dos premios Oscar, nos sumerge en la mente de unas personas con demencia. Como explica el Dr. Alejandro, “aborda en primera persona cómo se está sintiendo alguien que está empezando a perder todos sus recuerdos”. Es una construcción compleja que nos obliga a ver el mundo a través de los ojos de este padre que pronto no recordará nada.

La cinta es un recordatorio (valga la redundancia) de que la memoria es frágil, pero la dignidad no debería serlo. Nos habla del miedo a desaparecer en vida y de lo difícil que es aceptar que alguien a quien amamos ya no nos reconoce. También nos enseña algo crucial: a veces, cuidar de otro significa aprender a soltar y aceptar la realidad tal como es, no como desearíamos que fuera.

 

Del revés dos (2024)

Si en la primera película Pixar nos enseñó que la tristeza no solo no es mala, sino que además es necesaria, en esta secuela nos enfrenta a una emoción a la que tememos y odiamos aún más: la ansiedad. El Dr. Alejandro lo tiene claro: “si alguna vez has sufrido ansiedad, es obligatorio que la veas”.

Esta animación nos recuerda, con gran precisión, lo abrumador que es crecer y lo fácil que es perderse en un mar de expectativas. Nos dice que está bien sentir miedo, que la inseguridad es parte del proceso y que incluso las emociones incómodas tienen algo que enseñarnos. “Es como si hubieran cogido a los mejores psicólogos del mundo para escribir el guion de esta maravillosa película”, explica el psiquiatra.

No podemos controlarlo todo, eso queda claro en esta nueva aventura de Riley, pero sí podemos aprender a convivir con lo que sentimos sin dejar que nos domine.

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