Si buscas una planta que florezca casi eternamente, la Polygala myrtifolia, también llamada milamores, polígala y lechera del Cabo, es la elección perfecta. Pero para que muestre sus maravillosas flores violetas desde la primavera hasta el otoño, es esencial un cuidado adecuado.
La polígala es originaria de Sudáfrica, Nueva Zelanda y Australia y se está extendiendo también a la región mediterránea como una especie neófita. Crece como un arbusto y tiene hojas herbáceas y robustas.
Ubica la polígala a salvo del frío
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La Polygala myrtifolia es un arbusto perenne que puede alcanzar una altura de entre 0,5 y 1,5 metros, aunque en algunas variedades puede llegar hasta los 3 metros. Su porte redondeado y su denso follaje verde claro u oscuro proporcionan un atractivo fondo para sus llamativas flores.
Como no es resistente al invierno riguroso, en los lugares con heladas debe conservarse como planta de maceta que pueda trasladarse a ubicaciones a salvo del frío, pues sufre con temperaturas por debajo de los -5º C.
El lugar de verano debe ser completamente soleado y cálido. Son especialmente adecuadas los jardines, terrazas y balcones orientados al sur-suroeste.
En invierno debe que permanecer a una temperatura de 5 a 10 ºC, teniendo en cuenta que necesita mucha luz para florecer.
Cómo regar la polígala
Al igual que muchas plantas en macetas de climas subtropicales, estas se han adaptado a suministros de agua moderados. La polígala también se alegra si el sustrato se mantiene moderadamente húmedo al regar.
La maceta debe tener un sistema de drenaje de agua que funcione bien para evitar el encharcamiento. Se puede regar tanto con agua de lluvia como con agua del grifo. Por lo tanto, un alto contenido de cal en el agua no supone ningún problema.
Cada cuánto abonar la planta
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La polygala también es poco exigente en cuanto a la fertilización. Dado que su crecimiento es débil, fertilizar cada 10 a 14 días es suficiente.
Un fertilizante para plantas de balcón o maceta es muy adecuado para este fin. Debe tener una combinación equilibrada de nutrientes.
Esto asegura un crecimiento uniforme de flores, hojas y plantas. Los oligoelementos también juegan un papel. Estos solo se encuentran en pequeñas cantidades (trazas), pero son importantes para la salud de las plantas. Los oligoelementos importantes son los metales hierro, zinc, magnesio y cobre.
Cuándo Podar y trasplantar
Dado que la polígala es bastante pequeña, la necesidad de poda es limitada. Durante el verano, los brotes se pueden acortar periódicamente si se vuelven demasiado largos.
La corona se puede moldear una vez al año, y el momento ideal para esto es a principios de la primavera. Dependiendo de la invernada, puede ser necesario también retirar algunas ramas muertas al podar en primavera.
así debes Trasplantar la polígala para que crezca bien
El trasplante regular también promueve el crecimiento de la polígala. Sin embargo, la maceta debe agrandarse en pequeños pasos para que la planta no esté demasiado ocupada con el enraizamiento y menos con el crecimiento de la copa y la formación de flores.
Una maceta nueva con un diámetro unos 4 cm más grande será suficiente. Es especialmente importante que la maceta tenga un orificio de drenaje.
El suelo debe ser permeable y estructuralmente estable. Es óptima una mezcla de tierra universal sin turba, arena de cuarzo para la permeabilidad y gravilla volcánica.
El trasplante, al igual que la poda, se puede realizar a principios de la primavera. Después del trasplante, la planta se riega, por lo que no necesitará ningún fertilizante ni agua durante aproximadamente seis semanas después del trasplante.
Sin embargo, debes comprobar el contenido de humedad de la maceta de vez en cuando utilizando un medidor de humedad.
La hibernación puede ser crucial en invierno
Por muy hermoso que sea el verano, el invierno suele ser molesto cuando se trata de plantas exóticas. Aunque la polígala es básicamente poco exigente, pasar el invierno en zonas de especial frío requiere cierta experiencia.
El problema principal en invierno puede ser la falta de luz, porque entonces la planta pierde sus hojas. Por lo tanto, es importante colocar la polígala lo más cerca posible de una fuente de luz. La planta con hojas densas necesita luz desde varios lados. Por lo tanto, es importante pasar el invierno con una fuente de luz diurna.
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