Alrededor del 60 % de todos los hogares españoles tiene un lavavajillas, un electrodoméstico que facilita mucho las tareas y, según un estudio comparativo de la Universidad de Bonn de 2020, también ahorra energía y agua en comparación con el lavado a mano.
Si utilizas un lavavajillas en lugar de lavar a mano, necesitarás en promedio un 50% menos de agua y un 28% menos de energía para lograr el mismo resultado.
Si se te acaban las pastillas para lavavajillas y quieres lavar los platos, tienes una solución casera muy sencilla que te sacará del paso y te la contaremos aquí, pero lo realmente importante es que, si utilizas normalmente pastillas para lavavajillas convencionales, sepas que existen alternativas mucho más sostenibles e igual de efectivas y que, a la hora de reponer las pastillas, optar por ellas será la mejor decisión que puedas tomar.
bicarbonato para las urgencias
Si lo que deseas es salir de una urgencia, puedes utilizar solamente el bicarbonato. Pero si vives en una zona en que el agua sea dura, acuérdate de rellenar periódicamente el compartimento de sal del lavavajillas.
Es suficiente con que pongas una una cucharadita colmada de bicarbonato de sodio en el compartimento para las pastillas del lavavajillas por ciclo de lavado. ¡Es una solución económica y ecológica!
Lo que nunca debes hacer
Si te quedas sin lavavajillas, que no se te ocurra poner lavavajillas para lavar platos a mano en la máquina. Esto provocaría que se formara mucha espuma, que saldría del lavavajillas y convertiría tu cocina en una fiesta de la espuma.
Además, muy probablemente el lavavajillas dejaría de funcionar y no desaguaría correctamente, porque la espuma hace que el sensor que controla la entrada y salida del agua no funcione correctamente.
A la hora de reponer las pastillas para lavajillas, elige alternativas ecológicas
Para conseguir una vajilla higiénicamente limpia, no es necesario utilizar limpiadores químicos agresivos llenos de sustancias contaminantes y envueltos en una fina película de plástico.
Ingredientes como los fosfatos y los tensioactivos químicos son problemáticos y, a menudo, se encuentran en los productos de limpieza convencionales.
Es mejor utilizar detergentes para lavavajillas que sean de origen vegetal y 100% biodegradables. No contaminan las aguas subterráneas y son inofensivos para la salud.
Además de los detergentes de lavavajillas para lavar a mano, también existen pastillas para lavavajillas con estas propiedades.
Si además quieres evitar el sufrimiento de los animales, asegúrate de que el líquido lavavajillas sea vegano (muchos productos contienen ingredientes animales como grasa de lana, cera de abejas, productos lácteos o bilis bovina).
Los ingredientes de la versión ecológica son mejores para el medio ambiente, pero ¿qué pasa con el envase? No todas las pastillas ecológicas para lavavajillas están empaquetadas sin plástico. Para ser coherentes, conviene elegir las que se presentan en cartón. Hay pastillas para lavavajillas que vienen envueltas individualmente, pero en una película soluble en agua que se descompone directamente durante el proceso de lavado.
Algunas marcas evitan por completo empaquetar las pastillas individualmente. Otra opción es hacer tus propias pastillas para lavavajillas y guardarlas en un frasco.
Esto te dará la ventaja de disponer de una dosis de detergente en porciones y seguir protegiendo el medio ambiente.
Otra opción es hacer las pastillas para lavavajillas tú mismo. Llevan su proceso, así que no te sirven como remedio de urgencia, pero si las vas haciendo regularmente no te quedarás sin reservas.
Haz pastillas para lavavajillas tú mismo
Para hacer tabletas para lavavajillas necesitarás varios ingredientes. Muchos de ellos son auténticos todoterrenos en el hogar. Seguro que ya tienes alguno en casa, pero si no es así te irá muy bien hacerte con ellos para este y otros usos.
Ingredientes (para 16 pastillas):
- 75 g de bicarbonato de sodio (doméstico): libera de la grasa, la suciedad y los olores
- 75 g de ácido cítrico: eficaz contra la cal
- 75 g de carbonato de sodio: afloja la suciedad fuerte
- 25 g de sal especial para lavavajillas: suaviza el agua
- 4 cucharadas de agua: mezcla los ingredientes y los mantiene unidos
- Aceite esencial: opcional para el olor, pero también para el efecto. El aceite de limón y el aceite de naranja tienen un efecto limpiador y antibacteriano. Lo mejor es utilizar aceites naturales.
Si vives en una zona con poca dureza del agua, la sal no es necesaria en las pastillas caseras para lavavajillas. De todos modos, en los lavavajillas hay un compartimento separado para la sal especial, que siempre debes mantener lleno.
Utensilios necesarios:
Para hacer tus propias pastillas para lavavajillas, también necesitas:
- 1 bandeja de cubitos de hielo (los moldes de acero inoxidable son mejores para el medio ambiente que los de plástico o silicona).
- 1 cuchara
Elaboración:
- Pon todos los ingredientes secos en un bol y mézclalos.
- Poco a poco vierte el agua. Los ingredientes ahora comenzarán a formar espuma. Esto es normal, ya que el ácido cítrico y el bicarbonato de sodio reaccionan entre sí, así que solo usa la cantidad de agua que necesites. Evita inhalar el vapor.
- Revuélvelo todo. La consistencia debe ser bastante firme, similar a la arena mojada. Si desea agregar aceite esencial, añádelo ahora.
- Llena los huecos del molde con ayuda de la cuchara, aprentando bien. La masa aún puede aumentar un poco a medida que los ingredientes continúan reaccionando entre sí.
- Ahora deja secar el molde en un lugar seco a temperatura ambiente durante 24 horas. Luego, simplemente puedes dar la vuelta al molde y las pastillas se desprenderán.
- Coloca las pastillas caseras para lavavajillas en un recipiente hermético; por ejemplo, en frascos viejos con tapa de rosca. Manténlos secos.
Consejos y sugerencias para hacer pastillas de lavavajillas caseras
- Las pastillas del lavavajillas suelen estar secas en el molde a las 24 horas. Si las sacas del molde cuando aún están ligeramente húmedas, pueden romperse y perder su forma. Para evitar esto, ve a lo seguro y déjalas por un día o más si te parece que aún no se han secado lo suficiente.
- No necesitas mucho para hacer tus propias pastillas para lavavajillas. Si te faltan algunos ingredientes, esto generalmente no es un problema. Sin embargo, mezcla al menos ácido cítrico y bicarbonato con agua.
- El bicarbonato de sodio y la sal apoyan y mejoran el efecto de limpieza de las pastillas del lavavajillas. Si deseas evitar la formación de demasiada espuma, puedes poner el ácido cítrico al final de todo.
- La cantidad de pastillas que obtienes depende de la capacidad de tu bandeja de cubitos de hielo. Aumenta o disminuye la cantidad de cada ingrediente según sea necesario.
- Al elegir la forma de los cubitos de hielo, debes asegurarte de que las pastillas individuales encajan en el compartimento de tu lavavajillas. Si es necesario, no llenes demasiado el molde.
- Lava tus platos con la mayor frecuencia posible en el programa eco, ya que utiliza menos agua y electricidad.
- Enjuaga bien la bandeja de cubitos de hielo después de usarla para hacer pastillas de detergente. Si es apta para lavavajillas, puedes ponerla en él.
- Si dejas de lado el agua y el aceite esencial, tienes detergente de lavavajillas en polvo casero. Por lo general, unas dos cucharadas por lavado son suficientes.
Electrodomésticos eficientes
A la hora de comprar un electrodoméstico nuevo, conviene que prestes atención a la eficiencia energética y elegir un programa "eco" para el lavado (aunque tarde más que otros programas).