Muy probablemente habrás visto en varias ocasiones fotos y vídeos de personas bañándose en aguas humeantes con un paisaje helado al fondo. Son estampas paradisíacas que suelen proceder de Islandia. Lo que probablemente no sabes es que muy cerca de ti existen lugares similares o, incluso, con más encanto, porque cuentan con más vegetación y un clima es más benigno.
Las fuentes y lagos termales aparecen debido a la actividad geotérmica. En Islandia, esta actividad es evidente por la existencia de volcanes. Sin embargo, existe una comunidad en nuestro país con varios lagos y charcas termales preciosas sin volcanes a su alrededor.
Una charca de 30 metros de diámetro que está a la temperatura de confort todo el año
Galicia es la más mágica de las comunidades de España. Montañas siempre verdes salpicadas de miles de pequeñas aldeas milenarias, ríos serpenteantes y rías, acantilados, playas con arquitecturas naturales únicas en el mundo... maravillas naturales que vienen acompañadas de misterios, meigas, cruceiros y la Santa Compaña.
Y en Galicia hay también lugar como la charca termal O Alligal. Es un rincón perfecto para quienes buscan relajarse y conectar con la naturaleza. Situada en la parroquia de Codesido, en el municipio de Vilalba, en el corazón de la provincia de Lugo, es una instalación pública que puedes visitar gratuitamente durante todo el año.
En esta charca-piscina, el agua se halla siempre a una temperatura de 23 ºC, ideal para el baño. Se pueden ver burbujas en el fondo arenoso, que revelan los manantiales por donde surge continuamente el agua caliente, procedente de capas profundas de la tierra.
Aguas medicinales
Los lugareños suelen visitarla para aliviar los dolores de la artritis y la artrosis. La tradición dice que te tienes que bañar 7, 9 u 11 días seguidos para conseguir los mejores resultados. ¿Por qué no 8, 10 o 12 días? No se sabe, son cosas del pueblo gallego, pero cada vez más personas se acercan para disfrutar simplemente de una placentera experiencia de inmersión en la naturaleza.
La charca termal natural, con fama de milagrosa, se convirtió en una pequeña piscina en 1930. Hoy es una gran piscina redonda de 30 metros de diámetro, pero aunque se haya modernizado, el lugar conserva su carácter auténtico y su conexión con el pasado.
¿Cuándo se puede visitar la charca de O Alligal?
Aunque la gente acude a la piscina termal durante todo el año, principalmente los fines de semana, es en verano cuando hay mayor afluencia, haciendo del estanque una de las piscinas más concurridas de la zona. Facilita la visita que junto a la charca haya un gran aparcamiento y que la instalación cuente con aseos, vestuario y un bar. Incluso hay iluminación por si te quieres bañar por la noche.
Sin embargo, las épocas ideales para visitar la charca son la primavera y el otoño e, incluso, el invierno, porque está mucho menos concurrida y puedes disfrutar del contraste entre el agua templada y el aire fresco. Solo tienes que llevar ropa adecuada para abrigarte al salir.
Una de las virtudes de O Alligal es que todavía es un rincón secreto al que no llegan las riadas de turistas.
¿Qué se puede hacer allí?
Alrededor de la charca o piscina hay bosques de robles y abedules, y prados verdes que invitan a hacer senderismo. También encontrarás áreas para sentarte y disfrutar de un picnic.
Si buscas escapar de la rutina y experimentar la esencia auténtica de Galicia, la charca de O Alligal es un destino que no puedes perderte. Prepárate para un baño de tranquilidad y belleza que recordarás siempre.
En Galicia hay otros lugares parecidos, pero cada uno es único
- Las termas de Outariz y Canedo son las mayores zonas termales municipales de Ourense, con seis piscinas termales y dos piscinas de agua fría, unidas por una pasarela metálica curva de color blanco.
- Las termas de Chavasqueira se encuentran junto al río Miño. El diseño de las instalaciones termales se inspira curiosamente en la cultura termal japonesa. El mundo se nos ha quedado pequeño.
- En el centro de la ciudad de Ourense se encuentra la piscina termal de As Burgas.
- Las termas do Muíño da Veiga, también en la provincia de Ourense, cuentan con un gran espacio ajardinado para el recreo, cuatro piscinas de agua a 40 ºC y una de agua fría.
- Las termas de Prexigueiro, en la parroquia de Francelos (Orense), son encantadoras porque se encuentran rodeadas de bosques. Cuenta con cinco pozas de agua caliente.
- Las termas de Porto Quintela (Bande, Orense) conservan los restos de una mansión romana y unos baños de agua termal. Son de acceso libre.
- Las termas de Barbantes o de Cenlle cuentan con un gran espacio ajardinado y tres pozas termales o piscinas naturales con el agua a 21-28 ºC.
- En las termas del río Caldo se han construido pozas con cantos rodados que forman unas agradables piscinas de acceso libre.