Las meditaciones guiadas son una excelente forma de entrenar la atención, de facilitar a nuestra mente un estado de calma activa que, por la propia naturaleza de la mente y por la sobreestimulación del día a día, a veces nos cuesta alcanzar.
Cambios profundos en nuestro ser ocurren cuando incorporamos la atención plena a nuestra vida. Por eso parar y hacernos conscientes del momento presente puede ser un acto completamente revolucionario.
Cuando paramos el flujo mental del hacer constante y del mantenernos continuamente ocupados, nos damos la oportunidad de atravesar la capa de nuestra mente para entrar a un nivel más profundo de nuestro ser.
Normalmente evitamos atravesar esa capa mental, ya que es la capa que nos hemos creado a lo largo de la vida para asegurarnos una ilusoria sensación de seguridad.
Esa sensación la conseguimos controlando las situaciones que se nos presentan en la vida. De esta manera nos mantenemos en lo conocido, en nuestra zona de confort personal. Aunque la mayoría del tiempo nos aporte frustraciones, tensiones, estrés y ansiedad, al menos la conocemos bien y por eso nos hace sentir seguros.
¿Qué puede aportarme entrenar mi atención?
Una vez atravesamos la capa mental podemos acceder a una versión más verdadera de nuestra experiencia, ya que con la práctica atravesaremos también nuestras percepciones basadas en dinámicas inconscientes.
Nuestra atención es precisamente la base para aumentar nuestra consciencia.
Cuando dejamos atrás la dispersión mental y somos capaces de concentrar nuestra atención en el momento presente, nos damos cuenta de lo que ocurre de verdad. Podemos, poco a poco, ver lo que pasa dentro de nosotros ante ciertas situaciones o ante cualquier estímulo externo o interno. Haciéndonos conscientes de nuestras reacciones internas, comenzamos a conocernos mucho más, y el autoconocimiento es el primer paso para aceptarnos completamente con compasión.
Es también desde el autoconocimiento y la conciencia de nosotros mismos desde donde podemos realmente elegir nuestra vida. Es decir, desde ese lugar interior podemos elegir nuestras acciones ante las situaciones que experimentamos, en lugar de reaccionar automática e inconscientemente a ellas. Esto nos da una libertad y un poder creador inmensos.
Cómo meditar para entrenar tu atención
Esta es una meditación muy básica para entrenar tu atención usando tu respiración como anclaje al momento presente.
- Cierra tus ojos y encuentra una postura cómoda.
- Respira profundamente y en la exhalación deja ir lo que estuvieras haciendo y lo que vayas a hacer luego, y poco a poco vete aterrizando en este momento presente.
- Hazte consciente del latido de tu corazón.
- Ahora centra tu atención en la respiración. Date cuenta de cómo está fluyendo y obsérvala con curiosidad. Déjala seguir su flujo natural sin la necesidad de cambiarla.
- Adaptándote a ese flujo, comienza a contar tus ciclos completos de respiración del 1 al 10.
- Inspiro. Expiro. 1.
- Inspiro. Expiro. 2.
- Inspiro. Expiro. 3.
- Inspiro. Expiro. 4.
- Inspiro. Expiro. 5.
- Inspiro. Expiro. 6.
- Inspiro. Expiro. 7.
- Inspiro. Expiro. 8.
- Inspiro. Expiro. 9.
- Inspiro. Expiro. 10.
- Comienza a contar de nuevo dos o tres veces más del 1 al 10.
- Si en algún momento notas que te despistas o te pierdes en pensamientos, no pasa nada. Suavemente vuelve a centrar tu atención en la respiración y empieza de nuevo con la cuenta.
- Te invito a que continúes entrenando tu atención con esta meditación todo el tiempo que quieras.
- Cuando lo sientas abre tus ojos.