La urolitina A es una sustancia que se encuentra naturalmente en algunos alimentos y, según un estudio de la Universidad de Copenhague (Dinamarca), podría mejorar el estado de las neuronas y, por tanto, podría prevenir su deterioro.

La investigación se ha realizado con ratones de laboratorio y, en concreto, los investigadores se fijaron en cómo esta sustancia podría mejorar la memoria y otras funciones de las neuronas, explica el doctor Vilhelm Bohr, profesor asociado del Departamento de Medicina Celular y Molecular en la Universidad de Copenhague, anteriormente catedrático del Departamento del Instituto Nacional sobre el Envejecimiento de los Estados Unidos.  

Aunque el estudio se realizó en modelos de ratón, las perspectivas son positivas. Hasta el momento, las investigaciones han mostrado resultados prometedores para la sustancia en los músculos y se están planificando ensayos clínicos en humanos. Entre los alimentos que aportan urolitina A destacan las granadas, las fresas y las nueces.

Estos alimentos no contienen directamente urolitina A, pues esta se forma a partir de otros compuestos que sí están presentes en esos alimentos, concretamente ácidos elágicos y elagitaninos. Las frambuesas y las almendras también aportarían estas sustancias.

La urolitina mejora la función cerebral

Los investigadores descubrieron previamente que una molécula específica, el ribósido de nicotinamida (NAD), desempeña un papel clave en enfermedades neurodegenerativas como el alzhéimer y el párkinson, ya que ayuda activamente a eliminar las mitocondrias dañadas del cerebro. Los autores tenían indicios de que la urolitina podría conseguir, al menos, una acción similar. 

Muchos pacientes con enfermedades neurodegenerativas experimentan una disfunción mitocondrial, una dificultad para eliminar las mitocondrias débiles, que se acumulan y afectan a la función cerebral. Las mitocondrias son orgánulos celulares con la función de generar la energía para el funcionamiento de la célula. Son por lo tanto claves en la salud celular.  

Los investigadores creen que los principios activos que sean capaces de estimular la mitofagia (la eliminación de las mitocondrias en mal estado) y generar nuevas mitocondrias podrían ser muy interesantes en la prevención y tratamiento de las enfermedades neurológicas degenerativas.  

La urolitina ayuda a eliminar mitocondrias débiles

Los resultados del nuevo estudio muestran que la urolitina A ayuda a eliminar las mitocondrias débiles del cerebro con la misma eficacia que el suplemento de NAD. Sin embargo, los investigadores aún no saben cuánta urolitina A se necesita para mejorar la memoria y aliviar otros síntomas. En cualquier caso, muy probablemente será necesaria una dosis mayor de la que puede proporcionar, por ejemplo, una granada o una ración de fresas al día. 

Ahora mismos los investigadores tratan de encontrar la dosis precisa que se podría conseguir mediante un suplemento (ya se comercializan), que se podría usar también con fines preventivos sin efectos secundarios importantes.  

Los investigadores señalan que, tratándose de una sustancia natural presente en alimentos comunes, es poco probable que se den efectos secundarios negativos. Hasta el momento se cuenta  con estudios con resultados satisfactorios sobre la urolitina y las alteraciones musculares. Ahora toca centrarse en el alzhéimer, afirman los investigadores. 

Propiedades de la urolitina A

La literatura científica señala una serie de propiedades de  la urolitina: 

Podría favorecer la longevidad

Varios estudios realizados en animales demuestran que la urolitina A puede prolongar la vida de animales como la lombriz intestinal (Caenorhabditis elegans). No hay estudios con personas pero se cree que la acción de la urolitina a nivel bioquímico podría ser positiva en muchas especies.

Mejora la resistencia muscular

Los ensayos clínicos han demostrado que la suplementación diaria de urolitina A puede mejorar la fuerza, la resistencia aeróbica y el rendimiento físico en personas de mediana edad y mayores.

Mejora la inmunidad​

La urolitina A podría promover la diferenciación de células madre hematopoyéticas (HSC) y activar la actividad linfática del sistema inmunitario.

Ayuda con la pérdida de peso

Los estudios muestran que la urolitina A puede prevenir la obesidad y la disfunción metabólica inducidas por la dieta sin efectos adversos. Promueve la conversión de la grasa corporal en energía, lo que reduce la proporción de tejido adiposo. 

Regula la microbiota intestinal

La urolitina A puede mejorar la microbiota intestinal, reducir los marcadores de inflamación y restaurar la función de barrera intestinal.

¿Alimentos o suplementos?

La conversión de los elagitaninos y ácidos elágicos en urolitina A puede variar según la persona, pues en su metabolización interviene la microbiota intestinal. Por eso, si lo que se quisiera es obtener una dosis concreta de urolitina A lo ideal sería hacerlo con el suplemento correspondiente.

Sin embargo, consumir los alimentos enteros siempre tiene la ventaja de que se obtienen otros nutrientes importantes que la naturaleza ha puesto juntos porque actúan en sinergia.