La ansiedad desde la medicina energética, en especial desde la medicina tradicional china, está muy relacionada con el elemento fuego, el corazón y el intestino delgado.
El fuego es un elemento que nos ayuda a explorar la vida, nos da chispa y nos mueve hacia adelante, pero cuando esta chispa se descontrola nos saca de nuestro centro y desaparece la calma pudiendo transformarse en ansiedad, irritabilidad y sensación de descontrol interior.
Cómo afectan los elementos a nuestra calma
Según la medicina tradicional china, el elemento que nos puede ayudar más a tener calma y armonizar el fuego es la tierra.
La tierra está asociada al estómago, el bazo y el páncreas y se relaciona con la etapa vital de nuestra madurez biológica, es también esa capacidad de poder reposar las cosas, saborearlas y disfrutarlas con calma. Para poder hacer esto necesitamos la armonía de todo nuestro cuerpo, pero sobre todo de dos elementos: la madera y el fuego.
El elemento madera está relacionado con nuestro hígado y el fuego con nuestro corazón. El hígado es el gran gestor de nuestras emociones, es el que nos ayuda a crear, a decidir, a sentir con todo nuestro ser pero a la vez también a poner límites a los demás y al mundo para no perder nuestra identidad. Un hígado sano junto con un corazón armonioso son los grandes aliados para vivir intensamente, pero con calma.
Nutrición energética para la ansiedad
Como la alimentación es una gran aliada para hacernos sentir emociones porque con ella evocamos sentimientos, he ideado un plato que, gracias a sus ingredientes, ayuda a trabajar el hígado, el sistema digestivo y el corazón para llegar a una armonía que nos dé placer y calma a la vez.
No podemos olvidar que, en nuestro intestino y a través de lo que comemos, nuestra microbiota genera el principal neurotransmisor de la calma, el GABA. Sabemos por la ciencia que los alimentos que más ayudan a esto son los fermentados, además de los frutos secos, legumbres y cereales.
Por qué una ensalada de manzana verde con lima y cacahuetes
Si unimos todo este conocimiento al lema de la nutrición energética de comer "simple, sano y delicioso", he elaborado una maravillosa receta que puede ser un plato único ideal para cuando estamos ansiosos o tenemos calor interno. Incluye manzana verde y otros alimentos muy valiosos para estas situaciones, por los motivos que te cuento a continuación:
- La manzana verde es ácida y fresca, ayuda a calmar el fuego interno y relaja el hígado.
- La menta es un picante fresco que calma la agitación interna y refresca la mente.
- La rúcula es un amargo fresco que ayuda a drenar o eliminar todo lo que está en exceso.
- Las judías verdes son una verdura dulce y fresca que nos ayuda a reforzar el sistema digestivo y a trabajar el hígado
- El tempeh es de naturaleza neutra y sabor salado. Tonifica la energía y nutre la tierra. Además es una proteína completa fermentada de excelente calidad que actúa como probiótico y nos ayuda a sintetizar GABA a nivel intestinal.
- La lima es de sabor ácido y naturaleza fresca, un condimento ideal para ayudarnos a calmar el fuego interno y a recoger la energía.
- Las cacahuetes son de sabor dulce y naturaleza neutra. Con su cremosidad y nutrientes ayudan a armonizar la tierra. Su textura crujiente nos ayuda a descargar estrés y ansiedad.
- El pimentón picante es de naturaleza caliente y sabor picante, ayuda a mover la energía y a neutralizar un poco todo el exceso de frescor de la ensalada.
receta de ensalada de manzana verde paso a paso
Es una receta sencilla pero muy nutritiva y deliciosa que podrás incluir fácilmente en tus menús.
INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS
- 1 manzana verde gran Smith grande
- Unas hojas de menta
- 200 g de judías verdes a tiras finas
- 250 g de tempeh
- 2 cucharadas soperas de tamari
- el zumo de una lima
- 2 cucharadas soperas de zumo concentrado de manzana líquido
- 50 g de cacahuetes tostados
- 50 g de hojas de rúcula
- Un poco de pimentón picante molido
PREPARACIÓN:
- Corta el tempeh a daditos de 1 cm y macéralos en una disolución al 50% de tamari y agua durante 24 horas en la nevera. Escúrrelos y saltéalos en aceite en una sartén hasta que queden bien doraditos.
- Corta las judías verdes en tiras finas a lo largo, hiérvelas durante 5 minutos.
- Ralla la manzana con un corte grueso y rocíala con limón.
- Corta la menta bien pequeña. En un bol, pon la manzana rallada, la menta, el tamari, el pimentón picante al gusto, el zumo concentrado de manzana líquido y el zumo de lima, y déjalo reposar 5 minutos.
- Trocea los cacahuetes un poco con ayuda de un cuchillo para que no estén enteros.
- Monta el plato: coloca la rúcula encima del plato, después las judías verdes aliñadas con sal y aceite y encima la manzana rallada marinada. Decóralo con el tempeh frito y los cacahuetes tostados.