A estas alturas, quién no ha oído hablar del método Pilates, una disciplina que ya cuenta con más de 100 años de trayectoria con una enorme aceptación y que cada cierto tiempo nos sorprende con nuevas versiones. En esta ocasión, nos hacemos eco del Mat Pilates, una variante que se distingue de las demás por no utilizar ningún tipo de accesorio ni máquina. Solo necesitas una colchoneta y un pequeño espacio para hacer los ejercicios.
Antes de entrar en materia, y con la intención de contextualizar, merece la pena mencionar que el método Pilates fue creado por Joseph Pilates a principios del siglo pasado. En principio, nació con la intención de proveer a los soldados convalecientes de la Primera Guerra Mundial de unas rutinas de ejercicios que les ayudaran a recuperarse de sus lesiones. Gracias a su eficacia probada, el método fue extendiéndose y ganando adeptos entre la gente.
Con el tiempo han ido apareciendo diferentes versiones como el Pilates en pared o el Mat Pilates. Cada uno de ellos con alguna característica específica que proporciona unos beneficios concretos.
Mat Pilates, una versión transformadora
El Mat Pilates, también conocido como Pilates Matwork, se basa en alrededor de 50 movimientos diseñados por Joseph Pilates que trabajan tu cuerpo de manera integral, enfocándose en la fuerza del core, la alineación postural y la conexión mente-cuerpo.
Uno de los aspectos que caracterizan esta disciplina es su eficacia. En tan solo unas pocas sesiones puede apreciarse cómo la musculatura del cuerpo se vuelve más firme y torneada. Para ello, se enfoca en trabajar la musculatura del core y las piernas con movimientos precisos y fluidos. No se trata de hacer muchas repeticiones, sino de hacer los movimientos con la máxima precisión. Por ello, la supervisión y corrección por parte del instructor es clave, al menos, las primeras sesiones.
cuerpo y mente
El Mat Pilates proporciona numerosos beneficios. Ahora bien, es importante remarcar que no todos se refieren a la salud física. Y es que además, de tonificar, quemar calorías y ganar flexibilidad, la práctica regular de este tipo de disciplina posee las herramientas para reducir el estrés y aumentar el bienestar emocional.
Estos son los principales beneficios que podemos obtener del Mat Pilates:
- Alinea la postura. Quizá este sea el más importante, o al menos podría considerarse el punto fuerte del Pilates. Los ejercicios de Pilates son muy efectivos para corregir los desequilibrios y mejorar la postura. Además, es muy útil para aliviar dolores y prevenir lesiones.
- Aumenta la fuerza y la flexibilidad. Aunque la zona del core es la que más se trabaja en el Pilates, el resto de grupos musculares también se tonifican.
- Conecta cuerpo y mente. A través de los movimientos, tomamos conciencia de nuestro cuerpo. Además, es una técnica que ayuda a incrementar la capacidad de concentración y de atención.
- Reduce el estrés. El Mat Pilates también tiene beneficios significativos para la salud mental. Estudios han demostrado que esta práctica puede reducir la ansiedad, la fatiga y mejorar el estado de ánimo y la calidad de vida en general.
- Es apto para todo el mundo. Una de las principales ventajas del Pilates es que se ajusta perfectamente a la condición física de cada uno, así como a los diferentes niveles. Cada movimiento cuenta con diferentes versiones para que cada uno escoja la que mejor se adapte a sus necesidades.
Una sesión de 30 minutos de Mat Pilates
A continuación tienes una propuesta de una sesión de Mat Pilates de 30 minutos. Hemos recogido algunos de los ejercicios más frecuentes y más sencillos de realizar. Ten paciencia. No te exijas demasiado. Lo importante es tener constancia y ser regular en la práctica.
Fase de calentamiento (5 minutos)
- Haz una respiración profunda. Para ello, inhala expandiendo el abdomen y exhala contrayéndolo.
- Estira suavemente el cuello, los hombros y la espalda.
Ejercicios principales (20 minutos)
- Cien. Tumbada boca arriba, eleva las piernas a 90 grados y levanta la cabeza y los hombros, bombeando los brazos arriba y abajo.
- Roll Up. Siéntate con las piernas extendidas, rueda hacia atrás vértebra por vértebra y vuelve a subir controlando el movimiento.
- Plancha. Mantén la posición de plancha con los antebrazos apoyados, activando el abdomen y manteniendo la espalda recta.
- Círculos con una pierna. Túmbate boca arriba, eleva una pierna y dibuja círculos en el aire, primero hacia dentro y luego hacia fuera. Repite con la otra pierna.
- Teaser. Siéntate con las piernas flexionadas, eleva el tronco y extiende las piernas en un ángulo de 45 grados.
- Puente de glúteos. Tumbada boca arriba, eleva la pelvis del suelo contrayendo los glúteos y manteniendo la espalda recta.
Fase de enfriamiento (5 minutos)
- Vuelve a hacer estiramientos suaves de piernas, espalda y cuello, como en el calentamiento.
- Termina con una respiración profunda para relajar el cuerpo y conectar con tu mente.
Si te ha interesado este artículo y te gustaría recibir más sobre bienestar, únete al canal de WhatsApp de Cuerpomente.