Como cada año, el 2025 ha llegado para muchos de nosotros con una larga lista de propósitos. Muchos de ellos tienen que ver con cambiar algunos hábitos. Pero conseguir este cambio puede parecer una tarea titánica. Quizá te hayas propuesto dejar de fumar, empezar a hacer ejercicio o comer más saludable, pero siempre terminas volviendo a los viejos patrones.

Según el reconocido médico y conferencista Mario Alonso Puig hay algo que todos hacemos mal, y que resulta ser la clave esencial para conseguir cambiar de hábitos: no se trata solo de modificar conductas, sino de transformar la forma en la que nos definimos como persona. La identidad y la disciplina, por tanto, se convierten n las claves esenciales para conseguir cumplir todos tus propósitos de Año Nuevo.

El papel de la identidad en los hábitos

“Lo más importante para cambiar un hábito”, asegura Mario Alonso Puig en una entrevista en Herrera con COPE, “es que empieces a identificarte con una persona distinta”. Y no, el médico y conferenciante no está haciendo referencia a buscar un mentor, un héroe, un ejemplo a seguir ni nada parecido. Lo que Puig nos explica es que, para cambiar de hábitos, primero debemos modificar nuestras creencias a cerca de la propia identidad.

como dejar de fumar
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“Si yo me identifico como fumador, es tal el apego que tenemos a la imagen que nos hemos creado, que voy a sabotear todo aquello que vaya en contra de esa imagen”, explica el experto. Y es que “si no cambias la forma en la que te ves, ¿cómo vas a cambiar los hábitos que tienes?”.

Con esta sencilla, pero profunda reflexión, Puig nos enseña cuál es el quid del problema al que todos nos enfrentamos cuando intentamos cambiar de hábitos. Si sigues viéndote como alguien incapaz de hacer ejercicio, de comer saludable o de disfrutar de la lectura, cualquier esfuerzo que hagas para reforzar esos hábitos está destinado al pasado.

La clave, por tanto, está en identificarse con la persona que queremos llegar a ser. “Defínete en base a cómo quieres verte”.

Redefinirte como una nueva persona

Siguiendo el consejo de Puig, nos disponemos a abordar la titánica tarea de redefinir nuestra identidad. Porque, aunque parezca sencillo decirlo, no es un ejercicio superficial. Es un cambio profundo en la narrativa interna, para el cual la paciencia es esencial. Para empezar, debes proyectar la versión de ti misma que deseas ser y comenzar a actuar en consecuencia. Y saber que, aunque los cambios serán paulatinos, serán duraderos.

mujer en campo de lavanda
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Por ejemplo, si quieres dejar de ser una persona sedentaria, puedes empezar a decirte a ti misma “soy un atleta”. Al repetírtelo, empezarás a actuar en pequeñas dosis, y comenzarás a alinear y tus acciones con esta nueva identidad. “Empiezas con un minuto, dos minutos, tres minutos”, explica Puig, hasta que dices “oye, hoy he caminado 10 minutos. Claro, soy un atleta”. Entonces la imagen se asimila, y el hábito se consolida. Pero para llegar hasta ahí, debes celebrar cada minuto que has caminado.

Pequeños pasos, grandes resultados

Si esta técnica de Alonso Puig te ha motivado y vas a ponerla en práctica, hay algunos consejos que pueden serte de mucha ayuda. Porque lo más importante de esta técnica es dar pequeños pasos de forma progresiva, para reforzar esa nueva identidad que estás creando para ti misma.

  • Empieza con objetivos alcanzables. No podemos con todo a la vez, así que empieza estableciendo metas pequeñas que puedas cumplir fácilmente. Si quieres hacer ejercicio, puedes proponerte caminar cinco minutos durante la primera semana. Estos pasos iniciales no solo son más manejables, sino que también refuerzan la narrativa de tu nueva identidad.
  • Céntrate en el progreso, no en la perfección. Acepta que los cambios importantes no suceden de la noche a la mañana. Reconoce y celebra los pequeños avances, como completar un día sin fumar o leer unas páginas de un libro.
  • Haz visibles tus logros. Lleva un registro de tus avances, por ejemplo, anotando tus logros diarios en un cuaderno o una aplicación. Esto no solo te mantendrá motivada, sino que te permitirá visualizar tu progreso hacia esa nueva identidad.
  • Repite tu nueva narrativa interna. Refuerza constantemente tu identidad con frases positivas. Di “soy un atleta” o “soy una gran lectora” cada vez que completes una acción relacionada con tu objetivo. Las palabras que usas tienen un impacto directo en cómo te percibes a ti misma.
  • Rodéate de las personas adecuadas. Comparte tus metas con personas cercanas que te animen y te apoyen. El refuerzo positivo externo también puede ser un motor poderoso para mantenerte en el camino.
  • Celebra cada pequeño logro. El secreto está en celebrar cada avance que reafirme esta nueva identidad. A medida que lo hagas, tu confianza en tu capacidad para cambiar se fortalecerá, y los hábitos que deseabas se convertirán en parte natural de tu vida.