El ajo es uno ingrediente indispensable en la dieta mediterránea que forma parte de infinidad de recetas a las que aporta un toque de sabor que, sin duda, marca la diferencia. Es, además, un alimento con muchas propiedades medicinales: es antiséptico, antibiótico, es un gran protector cardiovascular y estimula las defensas.

Con todas las maravillosas propiedades que tiene, ¿por qué no plantar ajos en casa y disfrutarlos durante todo el año? Su cultivo es bastante sencillo y puede hacerse tanto en un huerto grande como en un espacio más reducido, como una terraza, en macetas. Y con estos sencillos consejos tendrás el éxito asegurado

Cómo germinar los ajos en casa 

Los ajos se siembran a partir de los dientes de ajo. Si los germinas antes de plantarlos, ayudarás a que prosperen mejor y puedes hacerlo muy fácilmente en casa con el truco que explican en el perfil de Instagram de @lahuertadechanin, dedicado a compartir trucos e ideas para tener una huerta sana, sostenible y eficiente.

En primer lugar, es importante seleccionar cabezas de ajo sanas y, a poder ser, de origen ecológico, para evitar los productos químicos que podrían perjudicar su crecimiento. Retira la fina piel blanca que cubre las cabezas de ajo y después separa los dientes con delicadeza, para no dañarlos, y elige aquellos más grandes, firmes y sin ninguna mancha o lesión. 

Una vez tengas los ajos, se trata de ponerlos en una bandeja (de las de la fruta o verdura del supermercado o similar) a la que habremos hecho unos agujeritos para insertar la parte baja del ajo y favorecer que germinen rectos. 

Debajo de esta bandeja en la que habremos insertado los ajos colocaremos otra bandeja similar con un poco de agua. De este modo, la parte por donde van a salir las raíces estará siempre en contacto con el agua, pero el resto del ajo no estará empapado y evitaremos que se pudra. Conviene poner agua en la bandeja de abajo cada dos o tres días. 

Al cabo de unos días verás como han empezado a brotar los tallos y a echar raíces. En total debes esperar aproximadamente entre 10 días antes de plantarlos en el jardín. 

Cómo sembrar los ajos en el jardín

Se trata de germinar los ajos en casa con un sistema de doble bandeja para que desarrollen sus raíces antes de plantarlos en el jardín. 

Una vez los ajos hayan germinado y las raíces tengan un buen tamaño, es el momento de sembrarlos y lo ideal es hacerlo entre finales de otoño y principios de invierno.

cómo sembrarlos una vez germinados

El momento idóneo de sembrar los ajos es importante y existe la creencia de que la luna tiene un papel clave. Desde @lahuertadechanin aconsejan hacerlo en luna menguante, pues esta fase lunar ayuda a fortalecer las raíces y favorece el desarrollo del bulbo.

Para sembrarlos, primero hay que retirarlos de la bandeja con mucho cuidado de no romper ni el bulbo ni las raíces. Puedes ayudarte de con unas tijeras para romper la bandeja y poder extraerlos bien.

A continuación, haz un pequeño hoyo en la tierra y coloca el ajo con el tallo hacia arriba sobresaliendo de la tierra y cubriendo el bulbo con tierra. Debes dejar unos 10 o 15 centímetros entre cada ajo para que así tengan el espacio suficiente para crecer bien. 

Una vez tengas todos los ajos plantados, riégalos con un poco de agua para que se asienten bien en la tierra. Después, el riego debe ser moderado (a menos que el clima sea muy seco), dado que se pudren con bastante facilidad. 

Con estos trucos tan sencillos, en unos meses tendrás tus deliciosos ajos listos para cosechar. ¿Te animas a probarlo?