Umeboshi significa en japonés "ciruela deshidratada". La umé es en realidad una variedad de albaricoque originaria del Japón, aunque popularmente se la considera una ciruela. Es muy apreciada en las dietas orientales por su sabor y por sus propiedades, y en la dieta macrobiótica se utiliza para activar el sistema digestivo, mejorar los resfriados y aportar energía al organismo.
¿Qué son las ciruelas umeboshi?
Las ciruelas umeboshi son un alimento fermentado. Se recogen frutos frescos de ciruela umé y se secan al sol sobre esterillas de arroz durante varios días.
Posteriormente se fermentan con sal y hojas de shiso (Perilla frutescens var. crispa) durante varios meses, lo que incrementa el ácido cítrico, uno de sus principales componentes beneficiosos para la salud.
Se comercializan enteras en frascos de vidrio, en pasta de umeboshi para consumir a modo de paté o en píldoras elaboradas con extracto.
Las ciruelas umeboshi son alcalinizantes
Las ciruelas umeboshi contienen el doble de proteínas, minerales y grasas que otras frutas y son especialmente ricas en minerales como el calcio, el hierro, el fósforo y el potasio. Esta composición explica una serie de efectos positivos. Estos son los 8 principales.
- Combate la acidosis. Consumir dos ciruelas umeboshi al día ayuda a neutralizar la acidez y a mantener un pH adecuado en la sangre. El efecto se atribuye al ácido cítrico, que por un parte facilita la absorción intestinal de los minerales alcalinos de la propia fruta y, por otra, descompone el ácido láctico y evita que se acumule en la sangre y los tejidos.
- Depuran el organismo. Estas ciruelas también estimulan el funcionamiento del hígado y aceleran el movimiento peristáltico de los intestinos, dos acciones que ayudan a eliminar las toxinas y a evitar el estreñimiento.
- Abren el apetito. Estimulan la secreción de jugos gástricos y, en consecuencia, el apetito.
- Aumentan la energía. La eliminación de los residuos metabólicos que acidifican el organismo conlleva una agradable sensación de bienestar y un aumento de la vitalidad.
- Regulan el colesterol. Al mejorar la función hepática disminuye el colesterol LDL en la sangre.
- Combaten el mal aliento. Reducen las fermentaciones bucales e intestinales que causan el problema.
- Previenen el envejecimiento precoz. Aportan antioxidantes que previenen el deterioro celular.
- Sirven para tratar mareos y vómitos. Tanto las náuseas de la mujer embarazada como los mareos sin causa aparente pueden prevenirse ingiriendo una ciruela umeboshi en cada comida.
Cómo se toman las umeboshi
Las ciruelas umeboshi se toman directamente en ayunas o durante las comidas, masticándolas lentamente o desmenuzándolas y mezclándolas con arroz o verduras. Para el cansancio ocasional es ideal tomar un té bancha o kukicha en el que haya estado en remojo una umeboshi unos minutos.
Es cierto que su sabor salado y muy intenso no agrada a todo el mundo. En ese caso puedes tomar el extracto en píldoras. Basta tomar entre 3 y 5 diarias, siempre disueltas en la boca. Si se ingieren directamente, los efectos quedan mermados.