Hay un apartado de la gastronomía tradicional que nos encanta: los rebozados. Habitualmente, los relacionamos con recetas sencillas y modestas. ¿Quién no ha preparado unos filetes empanados para llevárselos a una excursión con la familia o los amigos al campo? Además, es una de las opciones preferidas de los niños. No hay menú infantil que se precie que no ofrezca unos filetes de pollo empanado.

Sin embargo, este plato, cuando pasa por las manos de un chef como Ferrán Adrià, puede convertirse en una auténtica delicatessen. Y eso es lo que ha ocurrido. El afamado cocinero publicó hace tiempo una colección de DVD llamada La cocina fácil de Ferran Adrià y, entre muchas otras ideas, compartió un sorprendente truco para hacer que tus platos empanados sean más ricos y crujientes. 

El rebozado de Ferrán Adrián

El rebozado es una técnica que no es muy complicada. En realidad, solo requiere de tres ingredientes, harina, huevo y pan rallado. Eso sí, todo ello aderezado con algo de paciencia, ya que es una técnica un poquito entretenida que necesita que le dediques tiempo.

Ahora bien, el resultado puede ser muy distinto en función del tipo de ingredientes, incluido el aceite que se utiliza para freír, o la temperatura del mismo. También hay quien añade ajo molido y perejil al pan rallado, dándole un toque diferente al alimento rebozado.

Ferrán Adrià nos propone un tipo de rebozado distinto, en el que el pan rallado se sustituye por otro ingrediente, que no solo le da un "crunch" especial a tus platos, tambi��n le da un gusto distinto. 

El secreto transoceánico

El truco del reconocido chef catalán es de lo más sorprendente. Se trata de los nachos. El cocinero sugiere reemplazar el pan rallado por estos crujientes de maíz triturados. De esta manera, el resultado es un rebozado mucho más crujiente que si utilizáramos el pan rallado. Pero, también estamos añadiendo un toque se sabor nuevo con un gusto picante y sabroso.

¿Cómo preparar este rebozado? Muy sencillo. Sigue estos sencillos pasos para ello:

  • Echa los nachos en un recipiente.
  • Con una batidora, tritura los nachos poco a poco. 
  • La idea es que quede un polvo fino, pero no demasiado, ya que los trocitos más grandes son los que le harán el toque crujiente al rebozado.

 

Rebozado sin gluten

Las personas con intolerancia al gluten se ven privados de los rebozados tradicionales a base de pan de harina de trigo. Sin embargo, no tienen por qué renunciar a este tipo de recetas. Basta con que utilicen rebozados vegetales elaborados con harinas sin gluten. Estas harinas hacen las funciones del enharinado, así como las del huevo. Es decir, se emplean en las dos fases del rebozado. 

Harina de garbanzos

La harina de garbanzos es una buena opción para el rebozado sin gluten.

iStock

Estas harinas sin gluten con una capacidad de adherencia similar a la del huevo, son:

  • Harina de maíz
  • Harina de arroz
  • Harina de garbanzo
  • Recuerda que la avena contiene gluten, por lo que no entraría en esta categoría.

Una manera de hacer el "huevo" es utilizar harina de garbanzo con agua, añadiendo si queremos una pizca de cúrcuma para darle color. También podemos mezclar a partes iguales estas harinas o dos de ellas, como prefieras. El objetivo es evitar que el sabor del garbanzo le robe protagonismo al del alimento que estamos rebozando. 

La proporción más habitual es utilizar 1 cucharada sopera de harina de garbanzo por 3 de agua, y podemos mantener estas medidas con la mezcla de harinas.

Esto mismo lo podemos hacer con frutos secos, aunque es posible que si son trozos gruesos necesitemos dos capas de rebozado para poder empanar bien.

Si te ha interesado este artículo y te gustaría recibir más sobre bienestar, únete al canal de WhatsApp de Cuerpomente.