Cualquier cosa tiene su secreto, incluso lavarse el cabello. Los productos que utilizas o la forma en que lo haces puede hacer que tu cabello se muestre saludable y hermoso o todo lo contrario. De hecho, para tener un cabello bonito y sano, no es suficiente con usar un buen champú o seguir una rutina correcta de lavado.
Es lo que también sostiene el peluquero Eduard Boldova, fundador de La Bio Pelu (@labiopelu) en Barcelona, que trabaja exclusivamente con productos naturales. Asegura que el cabello refleja la salud interna, incluso el estado emocional y nuestros hábitos de vida. "Lo primero que necesita el cabello es ser tratado con mucho cariño y respeto al lavarlo", explica a Cuerpomente.
Según Boldova, son los pequeños gestos que haces al lavarte el pelo lo que puede marcar una gran diferencia. Por eso hemos querido hablar con él para que nos cuente cuáles son, desde su conocimiento y experiencia como peluquero, los secretos para lavarse bien el pelo y ofrecerle los cuidados que realmente necesita.
El cabello necesita ser cuidado de forma holística
A menudo no conseguimos mejorar el aspecto de nuestro cabello, "porque seguimos enfocándonos solo en lo superficial; cambiamos de champú, probamos tratamientos, pero no atacamos el problema desde la raíz. La verdad es que el cabello necesita ser cuidado de forma holística", explica Eduard.

iStockphoto
El estrés, las alteraciones hormonales, la mala alimentación, la falta de descanso… todo se refleja en tu cuero cabelludo y en tu melena. Pero el cabello suele ser lo último que atendemos, cuando debería ser parte esencial de nuestro bienestar diario.
"Cambiar tus hábitos de vida, mejorar tu alimentación, reducir el estrés y elegir productos verdaderamente naturales es el primer paso hacia una transformación real", asegura.
En el lavado, los pequeños gestos marcan la diferencia
Realizar un lavado correcto es el principio del cambio y Eduard explica los pequeños gestos que, como sabe por experiencia, marcan la diferencia:
- Usar solo la cantidad necesaria de champú, hasta que notes que llegas a lavar bien por todo el cuero cabelludo, no más.
- Elegir productos naturales y ecológicos que respeten la piel y no la irriten.
- Masajear suavemente el cuero cabelludo para activar la circulación, relajar y fortalecer el folículo piloso.
- Lavar tu cabello con agua templada y terminar con un enjuague frío para potenciar su brillo natural. El agua fría nunca se aplica sobre el cuero cabelludo, solo en el cabello.
- No olvidar desenredarlo antes de lavar para protegerlo de las roturas.
Un error es usar demasiado champú
El primer consejo de Eduard es usar solo el champú necesario, porque solemos aplicar demasiado. "Con una cantidad similar a una moneda de 2 € es suficiente", concreta. Pero todo depende de si el cuero cabelludo está muy sucio o lleva productos.

Espera un par de días para lavarte el cabello después del teñido.
iStockphoto
Si es el caso, es mejor hacer dos lavados suaves, repetir el lavado, con una primera aplicación para eliminar los residuos de posibles productos y la segunda para una mejor limpieza.
Antes de lavar, hay que desenredar el cabello
Pero, atención, ¡no todo empieza con el champú! Eduard advierte de que "antes de lavarse el cabello, es muy importante desenredarlo suavemente en seco con un cepillo adecuado, empezando por las puntas hasta la raíz. Esto evitará nudos y roturas posteriores durante el lavado".
Además, un buen desenredado ayuda a que el champú se distribuya de forma más uniforme en el cuero cabelludo "¡Un pequeño gesto que hace una gran diferencia!", exclama.
El error más grave es frotar el cabello de forma agresiva
Otro error común y grave es frotar el cabello de forma agresiva pensando que así lo limpiamos mejor. Esto solo daña la fibra capilar y sensibiliza el cuero cabelludo.
"El lavado debe ser suave, masajeando con las yemas de los dedos, no con las uñas ni frotando como si laváramos ropa, y solo debe lavarse el cuero cabelludo sin frotar el cabello", aconseja Eduard.
Durante el lavado, si tienes el pelo muy abundante rizado, puedes ayudarte con un cepillo especial de cerdas suaves o de silicona flexible que te permitirá repartir bien el producto y llegar al cuero cabelludo. Estos cepillos te ayudarán, además, a estimular la circulación sanguínea y a eliminar impurezas de forma más profunda. Pero Eduard insiste en que lo utilices "con movimientos suaves para no irritar".
Muchos productos para el cabello son como los 'alimentos ultraprocesados'
Eduard Boldova es un defensor a ultranza de los productos naturales para el cuidado del cabello. Piensa que muchos productos comerciales funcionan como los "alimentos ultraprocesados", con sus aromas intensos, texturas seductoras y campañas publicitarias atractivas... "Su contenido no está pensado para tu salud, sino para mantenerte dependiente: un champú para cabello graso, por ejemplo, no regula tu grasa, la elimina de forma agresiva… forzándote a usarlo constantemente", argumenta.

Mujer observando el pelo que se queda en el cepillo.
iStock
Nosotros trabajamos para reequilibrar, no para tapar problemas. Cuando ayudas a tu cuero cabelludo a encontrar su equilibrio, el cabello renace más fuerte, más brillante y más saludable. Tras años dedicados a la coloración y tratamientos naturales, hemos visto verdaderas transformaciones. Personas que pensaban que su cabello 'siempre sería así', descubrieron que, cuidándolo de forma consciente y natural, podían recuperar su fuerza, su volumen y su brillo", añade.
Tu cabello merece el mismo amor que dedicas a tu alimentación y tu bienestar. No lo dejes para el final. Empieza hoy mismo a darle lo que realmente necesita.
Los productos naturales son respetuosos con el cabello
Los productos naturales lavan de forma respetuosa tu cuero cabelludo sin dejar residuos que pueden producir alteraciones. No resecan ni irritan el cuero cabelludo, evitando así futuros problemas, caspa, caída, grasa, etc. Fortalecen y equilibran el cabello de manera natural, ya que no contienen ingredientes sintéticos. Son ideales para pieles sensibles o personas con alergias o intolerancias.
Algunas personas que recurren por primera vez a los champús y otros productos naturales comprueban que no hacen tanta espuma, lo que les lleva a desconfiar de su eficacia. Es un error. Hacen menos espuma porque no contienen surfactantes agresivos. Menos espuma no significa menos limpieza, significa más respeto por tu cuero cabelludo y un paso más hacia su equilibrio natural. Aunque la cantidad de espuma dependerá de que hayas elegido el champú adecuado, valora siempre el estado de tu cuero cabelludo y no el de tu cabello para encontrar el correcto", asegura Eduard.
Si te ha interesado este artículo y te gustaría recibir más sobre estilo de vida saludable únete al canal de WhatsApp de Cuerpomente.