Cuando compramos un fertilizante deseamos hacer lo mejor por nuestras plantas. Sin embargo, nos cuestan un buen dinero y su uso está relacionado con importantes problemas ambientales.  Los fertilizantes artificiales pueden reducir la actividad microbiana en la tierra, necesaria para que las plantas se desarrollen de manera saludable. Además, aportan un exceso de nitrógeno y fósforo que puede dañar los ecosistemas.

La alternativa son los fertilizantes naturales, como el compost u abono orgánico que se produce a partir de la descomposición controlada de residuos orgánicos, como restos de alimentos, hojas, ramas y otros materiales biodegradables.  Los residuos de la cocina que tiras al contenedor marrón se utilizan precisamente para fabricar compost. Otra forma concentrada de fertilizante líquido natural que puedes preparar en casa es el agua de ortigas.

Sin embargo, con arroz también puedes preparar un fertilizante natural líquido muy sencillo que le irá muy bien a tus plantas.

cómo hacer AGua de arroz para utilizarla como fertilizante  

¿Cuántas veces has lavado arroz para que no se pegue al cocinar y has tirado el agua por el fregadero alegremente? Ese agua de arroz es rica en nutrientes beneficiosos para las plantas. Por lo tanto, puede emplearse como regar. Tus plantas te lo agredecerán toda la vida, ahorrarás un recurso escaso y dinero. 

Aún mejor que el agua de lavar el arroz es el agua donde lo has cocido, si no la ha absorbido toda. Este agua es aún más rica en nutrientes.

No le eches sal

Lo que siempre debes tener en cuenta es que no le puedes echar sal al agua si quieres usarla para fertilizar tus plantas. Lo que es seguro es que no vas a echar sal al agua si preparas un delicioso arroz con leche. 

¿Por qué el agua de arroz es un buen fertilizante?

El agua de arroz es beneficioso para las plantas de interior y exterior de varias formas. 

  •  El agua de cocción contiene micronutrientes como los minerales potasio, hierro, calcio, magnesio, fósforo, cobre, zinc y boro, entre otros. Dos de estos componentes también se encuentran en los llamados fertilizantes NPK, siglas que se refieren a nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K).
  • Las plantas pueden almacenar el almidón del agua de arroz en sus membranas celulares y luego utilizarlo para generar energía.
  • Estos carbohidratos también pueden contribuir a un suelo más saludable porque aumentan la actividad de las bacterias beneficiosas.

Por cierto, da igual si utilizas arroz basmati, arroz arborio, arroz salvaje u otras variedades naturales, aunque el más económico y fácil de encontrar es el arroz blanco de grano redondo.

Desventajas del agua de arroz como fertilizante para plantas

Como fertilizante, el agua de arroz tiene algunas desventajas:

  •  Hay que usarla con rapidez, pues no se puede guardar porque se estropea. 
  •  El azúcar que contiene puede atraer plagas, como las hormigas.
  •  Los carbohidratos pueden endurecer la tierra en las macetas.
  •  La cantidad de nutrientes no es suficiente para algunas plantas.

Agua de arroz ecológica como fertilizante

Al comprar alimentos ecológicos puedes estar seguro de que en su cultivo no se utilizaron pesticidas químicos-sintéticos. Con el arroz convencional, corres el riesgo de que los residuos de pesticidas entren en tu cuerpo. Así que el arroz ecológico no sólo es mejor para ti, sino que también produce agua de arroz ecológica como fertilizante para tus plantas.

Por otra parte, ten en cuenta de que la planta de arroz tiene la tendencia natural a absorber el arsénico que se encuentre en la tierra. El arsénico es una sustancia muy tóxica que puede encontrarse naturalmente en el suelo o puede haber llegado allí como un contaminante.

El arroz local es preferible

En el arroz que se cultiva en España, especialmente en el de grano redondo, hay muy poco arsénico, por lo que no es algo que deba preocuparnos. Gran parte del arsénico se elimina en el agua de lavado y de cocción, que podemos usar tranquilamente para regar nuestras plantas. Así, además, quitamos ese arsénico de circulación. En cambio, el arroz que procede de Asia puede contener proporciones de arsénico mucho más altas. Es una razón más para preferir los productos locales.