Cuando se va a plantar una o varias plantas en una maceta no se es consciente de que se pueda hacer algo mal en esta operación que, a priori, parece tan sencilla.
Sin embargo, en muchos ocasiones se cometen errores que harán que las plantas no prosperen adecuadamente o incluso que se nos mueran. Te explicamos a continuación cómo plantar en macetas para que todo salga perfecto.
1. Usar una maceta sin orificio de drenaje
Si quieres plantar en maceta, puedes cometer el primer error al comprar dicha maceta si no está dotada de un orificio de drenaje, sin el cual el agua no podrá evacuarse correctamente.
En estas macetas, las raíces de las plantas quedan prácticamente sumergidas en el agua y comienzan a pudrirse. Antes de plantar una maceta, debes asegurarte de que el agua no se pueda acumular.
El material del que debe estar hecha la macetadepende únicamente de tu gusto.
- Si has elegido una artesa o cajón de madera, conviene impermeabilizarla antes de plantar en ella.
- Si la maceta es de barro, sumérgela en agua durante 24 horas antes de plantar en ella, de lo contrario luego absorberá el agua de las plantas.
2. Colocar la maceta torcida
Los desniveles en el suelo de la terraza o del balcón a menudo significan que la maceta quede torcida y sería un error dejarla así.
Esto no sólo es visualmente molesto, sino que también puede provocar que las plantas crezcan de forma poco natural y que el agua se acumule en exceso en ciertos puntos.
Antes de plantar la maceta, debes asegurarte de que esté en posición vertical. La mejor manera de hacerlo es utilizar un nivel de burbuja.
Los pequeños desniveles de la terraza y del balcón se pueden compensar con listones de madera o cuñas. Esto también crea un espacio a través del cual el agua puede salir del cubo.
3. Llenar la tierra directamente en la maceta
Si te has asegurado de que la maceta quede recta en la terraza o balcón, no debes cometer el error de rellenar la maceta directamente con tierra.
Primero, cubre el orificio de drenaje con un trozo curvo de cerámica y luego rellena el fondo con una capa de cinco a diez centímetros de grava o arcilla expandida. Esto evita el encharcamiento de la maceta y garantiza unas condiciones óptimas para las plantas.
4. Usar tierra mala
Que la tierra sea de calidad es uno de los requisitos más importantes para un buen crecimiento de las plantas.
Por lo general, ahorrar en tierra para macetas es un gran error. Una tierra barata (y de mala calidad) no proporciona a las plantas los nutrientes que necesitan. Si vas a plantar en un recipiente, es mejor utilizar la tierra para macetas adecuada para tus plantas.
5. Colocar las plantas incorrectamente
Otro error a la hora de plantar la maceta sería colocar mal las plantas.
- No dejes las plantas más pequeñas en el medio porque recibirán menos luz solar.
- Las plantas más grandes, por el contrario, necesitan espacio y quedarían demasiado apretadas en el borde exterior de la maceta.
Si deseas plantar flores y plantas a diferentes alturas, planta primero los ejemplares más grandes y llena el espacio restante con flores más pequeñas, por ejemplo.
Si deseas diseñar la maceta con un solo tipo de planta, comienza por el medio, avanza hacia el borde y finalmente rellena los huecos. Así puedes plantar de forma óptima toda la maceta sin desperdiciar espacio.
6. Regar muy poco durante la primera semana
La maceta está plantada y has evitado con éxito todos los posibles errores. Para que todo tu duro trabajo no sea en vano, no olvides suministrar suficiente agua a la maceta, idealmente todos los días durante la primera semana.
Para ello, riega las plantas en la maceta con un buen chorro de una regadera o con una manguera de jardín.
Si el suelo se ha asentado, agrega más tierra fresca. Después de ocho semanas podrás fertilizar las plantas por primera vez y pronto, disfrutar de sus maravillosas flores.