Cada nuevo día trae consigo un millón de fantásticas posibilidades, aunque a veces nuestra rutina nos nubla la vista de tal manera que no siempre somos capaces de verlas. Empezar la jornada con una meditación guiada puede ayudarnos a empezar el día con energía.
Comienza el día centrando tu propósito
¿Por qué ayuda la meditación? Porque nos ayuda a vivir en conexión con nuestra intención y propósito. Si hay algo que nos desmotive de la rutina es posiblemente el hecho de que tendemos a perder la sensación de propósito en ella, o quizás se nos ha olvidado nuestra intención fundamental.
Con intención fundamental me refiero a aquella a gran escala por la cual elegimos en su día comprometernos a dedicar nuestro tiempo vital a lo que lo estamos dedicando hoy. Y también me refiero a la que, a pequeña escala, da dirección a tu día, a tu momento presente o a situaciones concretas de tu vida cotidiana.
Tus intenciones son esas cualidades realmente relevantes para ti y con las que quieres dotar a tu vida de sentido.
Cuando las revisas, puedes darte cuenta de si las estrategias que estás llevando a cabo para conectar con esas cualidades en tu vida siguen funcionando para ti o no.
Poniendo un ejemplo: cuando conectas con tu intención de pasión y libertad al haber elegido ese trabajo nómada, puedes en primer lugar darte cuenta de si ese trabajo sigue sirviendo a esas intenciones y, en segundo lugar, darte cuenta de si esas intenciones siguen presentes o si, por el contrario, ahora tus intenciones son otras. Eso podrá ayudarte a saber si lo que eliges es correcto para ti en cada momento.
De esta manera, puedes tomar decisiones desde un lugar de solidez en ti. Pero este no es el único beneficio de vivir en conexión con tu intención y propósito: también lo es el hecho de que la energía fluye hacia donde va tu intención, lo cual puede servirte para vivir tu día a día de forma sencilla y plena, sin importar mucho lo que hagas.
La energía fluye hacia donde va la intención
“Energy flows where intention goes” dice un dicho inglés, anunciándonos el hecho de que estamos cargando con energía el lugar en el que pongamos nuestra atención e intención conscientes.
La intención está llena de vida y energía, nos da entusiasmo y dirección, nos da fuerza y pasión. Y lo hace porque brota directamente de nuestros anhelos humanos más profundos, que a su vez nacen de nuestro Ser. Nuestra intención es, por tanto, un reflejo directo de nuestras necesidades esenciales a nivel emocional y espiritual y por eso conectar con ellas da sentido a nuestro camino, y a la dirección que tomamos en él.
Cómo meditar para empezar el día con energía
Esta meditación guiada la he dedicado a energizarte a través de respiración y de visualización y, sobre todo, a que conectes con una intención que de dirección a tu día y te mantenga en contacto con tu Ser.
- Cierra tus ojos y nota cómo te sientes ahora mismo. Siente el efecto en tu cuerpo de esta noche de descanso, de tus sueños. Y siente también cómo es empezar este nuevo día para ti, cuál es tu sensación interior al enfrentarte a este día. Acógela con apertura, sea la que sea y siéntela.
- Ahora puedes tapar tu fosa nasal izquierda con tu mano y comenzar respirando largo y profundo por tu fosa nasal derecha.
- Centra toda tu atención en el aire de la inhalación y visualízalo como una luz reluciente que entra en ti y se expande por tu cuerpo revitalizando todas tus células. Siente la energía que esto te aporta, y siente la vida en tu cuerpo y cada una de sus partes, siéntete viva/o.
- Visualiza que el sol está detrás de ti brillando resplandeciente, enviándote su fuerza y su luz.
- Ahora pregúntate, ¿Cuál es mi intención para el día de hoy? Y deja que tu cuerpo responda, sintiendo en él qué cualidad te gustaría vivir hoy. Puede ser alegría, flujo, paz, pasión, determinación, autenticidad... Sea cual sea tu cualidad hoy déjate inundar por las sensaciones físicas internas que aparecen en tu cuerpo cuando conectas con ella..
- Desde esta cualidad en ti, poco a poco puedes abrir tus ojos, observando lo que hay a tu alrededor desde este lugar en ti.
- Te sugiero que invites esta cualidad a cualquier actividad que hagas a lo largo del día de hoy, o que traigas conciencia a cómo esa cualidad puede estar presente ya en lo que estás haciendo, sin que te hubieras dado cuenta antes.