Comenzar el día con una infusión es una excelente idea. De hecho, este gesto es muy positivo a cualquier hora del día. Así, prepararse un té, una manzanilla o un poleo menta, por ejemplo, después de comer o a media tarde, no solo es un auténtico placer para el paladar, también es una inestimable fuente de salud y bienestar emocional.
Aunque la mayoría de las infusiones tienen el poder de desencadenar un efecto relajante, también es cierto que cada una proporciona unos beneficios específicos que hacen que sea única. En este sentido, existe una infusión que conocemos como "infusión de la felicidad" a la que se asocian infinidad de propiedades a cual más valiosa y atractiva. Detrás de ese sobrenombre encontramos la infusión de lavanda.
fuente natural de salud
Al hablar de lavanda es posible que lo primero que te venga a la cabeza son los inmensos y espectaculares campos de lavanda en Brihuega (Guadalajara). Visitar este lugar es, sin duda, un auténtico placer para la vista y el olfato. Sin embargo, las cualidades de esta planta no se quedan ahí. El uso de la lavanda es de lo más versátil, se pueden encontrar velas, aceites esenciales, incienso, jabones o bolsitas para preparar infusiones.
En el caso de las infusiones, a su agradable sabor, fuente de bienestar, habría que agregar sus propiedades nutricionales, que constituyen una interesante fuente de salud. Según una investigación publicada en 2013, el linalilo, el 1,8-cineol B – ocimeno, el terpinen-4-ol y el alcanfor son el origen de sus bondades nutricionales, las cuales se concretan en que mejora la digestión y ciertos problemas digestivos, especialmente si derivan de una alteración nerviosa o el estrés. Además, la lavanda puede evitar problemas gastrointestinales como cólicos, inflamación intestinal y flatulencia.
equilibrio emocional
Además de los beneficios mencionados, la infusión de lavanda tiene muchos otros efectos que inciden directamente sobre nuestro estado emocional. Y es que cada vez hay más estudios que demuestran, con mayor o menor contundencia, que esta bebida elaborada a base de lavanda ayuda a conciliar el sueñoy alivia los episodios de estrés. De ahí que podemos llamarla "infusión de la felicidad".
El origen de esta agradable sensación de bienestar obedece a varios factores que van desde su sabor y composición nutricional, hasta el aroma que emana. De hecho, se cree que su olor es un potente catalizador que favorece la producción de endorfinas (hormonas de la felicidad, junto con la dopamina, la serotonina y la oxitocina). Esto mismo es lo que ocurre con otros aromas como el romero, las fragancias cítricas como la naranja, el ylang ylang y el incienso (por eso se usan en muchas clases de yoga).
dulces sueños
Otra de las propiedades de la infusión de lavanda, relacionada con el estado de ánimo y la salud mental, es su capacidad para combatir el insomnio. Esta valiosa cualidad está respaldada por numerosos estudios científicos. Uno de ellos, se publicó en 2022 en el European Journal of Applied Sciences. Su trabajo evalúo el impacto de la ingesta de té de lavanda antes de acostarse en un grupo de personas entre 20 a 35 años durante dos semanas. El resultado fue que el té de lavanda puede tener un efecto positivo en la profundidad del sueño.
Tres años más tarde, un trabajo publicado en Journal of Alternative and Complementary Medicine vino a corroborar el estudio mencionado. Sus autores concluyeron que inhalar lavanda mejora la higiene del sueño en personas que padecen trastornos como el insomnio.
Por otro lado, el Comité de Medicamentos a Base de Plantas (HMPC) de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) concluyó que el aceite esencial de lavanda puede usarse para dormir mejor y para aliviar los síntomas leves del estrés mental y del agotamiento.
paz y serenidad
Los estudios dedicados a investigar los efectos de la infusión de lavanda en la salud mental no hacen sino aumentar año tras año. Además, aunque no todos van acompañados de resultados concluyentes, lo que sí se puede afirmar con seguridad es que el olor a lavanda desencadena un efecto relajante, y posee un uso potencial contra los trastornos nerviosos.
Uno de esos estudios se publicó en Complementary Therapies in Medicine y analizó el efecto té de hierbas de lavanda en la ansiedad y la depresión de las personas mayores. Sus autores concluyeron que tomar té de lavanda reduce ambos trastornos. De modo que integrarlo en la alimentación diaria podría complementar una terapia para su tratamiento.
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