Las mandevillas o dipladenias, también conocidas como jazmín de Chile, jazmín brasileño o jazmín sudamericano, son arbustos trepadores de la familia Apocynaceae.
Son originarias de las selvas de América del Sur y son populares como plantas de maceta y jardinera, capaces de desarrollar durante todo el verano grandes flores de diferentes colores: blancas, rojas, amarillas y, sobre todo, flores rosadas como las de la buganvilla.
Las mandevillas son una gran opción si buscas plantas trepadoras con flores que no tarden mucho en consolidarse en el jardín y que no sean muy difíciles de cuidar.
¿Cómo son las dipladenias o mandevillas?
Las dipladenias son arbustos trepadores de rápido crecimiento que se enroscan rápidamente hacia arriba cuando se les da suficiente alimento.
Dependiendo de la variedad, las trepadoras parecidas a lianas pueden alcanzar hasta seis metros, aunque las variedades comerciales se desarrollan menos, al menos durante el primer año. Después del invierno del segundo año, brotan de manera exuberante.

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Las hojas de color verde oscuro y brillantes de la dipladenia tienen tallos cortos y son ligeramente peludas. Los cinco sépalos del mandevilla se abren en una flor en forma de embudo de hasta cinco centímetros de tamaño en los colores blanco, amarillo, violeta y varios tonos de rojo.
Flores todo el verano
Su temporada de floración va desde mayo hasta el otoño y continúan formando nuevos brotes durante todo el verano. Las nuevas variedades muestran una impresionante abundancia de flores.
Las flores blancas de la mandevilla laxa, de hoja perenne, desprenden una agradable fragancia.
Después de la floración, aparecen frutos en cápsula con semillas alargadas y peludas. Para obtener una mayor abundancia de flores, conviene eliminar estos frutos.
La polinización la realizan principalmente abejas y abejorros, y en las zonas tropicales también colibríes.
Cómo plantarla: en el jardín o en maceta
Las dipladenias son una opción excelente para jardines y patios gracias a su capacidad para adaptarse a distintos espacios.
Son ideales para crear muros verdes en celosías, enrejados o arcos de jardín. Su rápido crecimiento permite que cubran estructuras en poco tiempo, ofreciendo sombra y un estallido de color con sus flores exóticas.

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Para su cultivo en el suelo del jardín, es recomendable elegir un lugar bien drenado y con abundante luz. Si el clima es cálido, pueden permanecer al aire libre durante todo el año.
En zonas con inviernos fríos, es mejor cultivarlas en macetas grandes para poder trasladarlas a un lugar protegido durante los meses más fríos.
Una buena idea para integrarlas en el diseño del jardín es combinarlas con otras plantas trepadoras de diferente coloración. También pueden plantarse junto a arbustos perennes para aportar contraste y dinamismo al paisaje.
El sitio y la tierra adecuados
Para florecer profusamente, las mandevillas necesitan una ubicación cálida y luminosa. Lo ideal es colocarlas en un sitio donde reciban luz abundante, pero protegidas del sol directo del mediodía en climas muy calurosos, ya que algunas variedades pueden resentirse con una exposición excesiva.
En cambio, si se cultivan en sombra parcial, producirán menos flores, pero seguirán creciendo bien. Las temperaturas óptimas para estas trepadoras tropicales rondan los 20 °C o más.
Durante el invierno, si la temperatura baja de 10 °C, es recomendable trasladarlas a un invernadero o interior luminoso para evitar daños por el frío.
El sustrato debe ser ligero, con buen drenaje y rico en materia orgánica. Aunque pueden tolerar suelos ligeramente ácidos, alcalinos o calcáreos, lo mejor es un sustrato para macetas de alta calidad con perlita o arena para mejorar la aireación.
En jardines, se recomienda mezclar la tierra con compost y arena para garantizar un drenaje adecuado y evitar encharcamientos.
Cuidados de la dipladenia
Para cuidar bien de tu mandevilla o dipladenia, presta especial atención a estos aspectos:
Riego moderado
El requerimiento de agua de una dipladenia es moderado. La planta puede almacenarla durante mucho tiempo en sus hojas gruesas y en las raíces
Riégala de manera que el exceso de agua pueda drenar inmediatamente para evitar encharcamientos.
Utiliza únicamente agua templada con el menor contenido de cal posible. Mantén el cepellón uniformemente húmedo durante toda la temporada de crecimiento y rocía las plantas con frecuencia.
Después de la floración, se reduce el riego. Para garantizar que las plantas trepadoras prosperen, debes proporcionarles un fertilizante líquido de alta calidad para plantas en macetas una vez a la semana.
guías para conducirla
Dado que son plantas trepadoras, necesitan una ayuda para trepar en la maceta. Guía siempre los brotes sinuosos a través de la ayuda para trepar antes de que queden atrapados en las plantas vecinas.
Necesidades de trasplante
El trasplante se realiza cada dos o tres años en primavera a una maceta un poco más grande. Las dipladenias más grandes toleran reducir el tamaño del cepellón para volverlo a colocar en la misma maceta con tierra fresca.
Enfermedades y plagas
Las mandevillas son propensas a plagas como la mosca blanca en climas cálidos y secos, y a pulgones en mayo. En invierno pueden ser atacadas por cochinillas.
Si la infestación resulta muy grave, se recomienda podar la planta drásticamente a finales del invierno.
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