Esta dieta no tiene nada que ver con las calorías ni con adelgazar. El objetivo de la dieta Louwen es proporcionar al cuerpo de la embarazada lo que necesita en este momento.  

Origen de la dieta Louwen

El actual reconocimiento de que la calidad de la dieta puede influir de manera significativa hacia el final del embarazo se debe en gran medida a los trabajos y esfuerzos del ginecólogo Frank Louwen.

El profesor de obstetricia y perinatología de la Universidad de Frankfurt am Main (Alemania) recomienda llevar una dieta baja en azúcar y carbohidratos, como mínimo a partir del último mes de embarazo (semana 36) y si es posible desde antes.

Básicamente consiste en evitar los azúcares añadidos y las preparaciones realizada con harina de trigo refinada (pan y pasta blancos, bollería y repostería, etc.). Sus recomendaciones se conocen como la "dieta Louwen", aunque él mismo no se refiere a su propuesta con su nombre.

Efecto de la dieta Louwen

Unas semanas antes de la fecha de término, el cuerpo comienza a prepararse para el parto. Este proceso natural puede verse alterado por el consumo excesivo de azúcares simples que provocan un rápido aumento de los niveles de insulina.

Esto se debe a que la insulina, que se libera en grandes cantidades, se adhiere a los mismos receptores celulares que la hormona prostaglandina.

La producción de prostaglandinas aumenta a partir de la semana 35 de embarazo. Entre otras cosas, asegura la maduración del cuello uterino y estimula las contracciones. La hormona también se administra como medicamento para inducir el parto.

Aunque parece lógico que evitar el azúcar permite que los procesos descritos se desarrollen mejor, lo cierto es que hasta la fecha no existen estudios exhaustivos que confirmen estas conclusiones.

Sin embargo, las sugerencias de Frank Louwen corresponden en gran medida a las recomendaciones nutricionales actuales. Por lo tanto, no pueden causar ningún daño durante el embarazo y pueden tener beneficios adicionales.

Si padeces diabetes tipo 1 u otra enfermedad metabólica, se recomienda consultar a un médico antes de realizar cualquier cambio en la dieta, aunque apenas hay nada que vaya en contra de las recomendaciones de la dieta Louwen.

Efectos positivos durante y después del nacimiento

La dieta Louwen puede tener varios efectos positivos en la preparación del parto, el parto en sí y los síntomas del posparto:

  • Reducción de la necesidad de medidas de inducción del parto.
  • Proceso de parto más suave y rápido.
  • Menos dolor durante el parto.
  • Mejor cicatrización de heridas después del nacimiento.

Ten en cuenta que seguir estrictamente la dieta Louwen y eliminar por completo el azúcar y la harina blanca de tu dieta al final del embarazo no es una garantía completa de que el parto vaya a ser fácil. En el proceso de nacimiento influyen demasiados factores influyen. Esta es otra razón por la que reducir el consumo de azúcar puede ser mejor que abstenerse por completo de consumirlo, sobre todo si la abstinencia total te hace sufrir.

Alimentos recomendados y no recomendados

En realidad, la dieta Louwen se puede resumir en una fórmula sencilla: evitar el azúcar industrial y las harinas blancas en las semanas previas al parto. La siguiente tabla muestra con más detalle qué alimentos se recomiendan y cuáles no.

Elige carbohidratos complejos y alimentos naturales:

  • Arroz integral.
  • Avena.
  • Legumbres.
  • Hortalizas frescas.
  • Fruta ácida baja en azúcar.
  • Productos lácteos.
  • Frutos secos y semillas.

Reduce o evita los carbohidratos muy simples, los alimentos azucarados y altamente procesados:

  • Pan blanco y bollos.
  • Pasta blanca.
  • Arroz blanco.
  • Patatas.
  • Dulces.
  • Bollería y repostería.
  • Comida rápida (ultraprocesados).

Recetas de la dieta Louwen

Numerosos alimentos y recetas que contienen pocos o ningún carbohidrato simple son adecuados para la dieta Louwen.

Si deseas conservar los alimentos y las rutinas que te gustan, a menudo basta con hacer pequeños ajustes. Por ejemplo, reemplaza la pasta de harina blanca por zoodles (espaguetis de calabacín) y disfrútala con una salsa de tomate recién hecha o pesto casero.