Las plantas que crecen en los balcones orientados al sur o al sudoeste son las más castigadas por los rayos de sol estival. Esta condición influye en su crecimiento saludable.

Tomando algunas precauciones y escogiendo las especies adecuadas, te garantizarás un oasis verde en tu balcón.

El calor afecta mucho a las macetas

Recuerda que para que una planta tenga su follaje y sus flores en plena condición, también lo deben estar sus raíces. Y cómo estas están contenidas dentro de una maceta, lo primero será intentar paliar las altas temperaturas refrescando estos contenedores. ¿Cómo?

  • Eleva las macetas: En verano el suelo llega a temperaturas “de cocción” y las raíces cercanas a la pared de la maceta y de la base detienen su crecimiento y capacidad de absorción de agua. Coloca trozos de ladrillos u otros elementos que separen a las macetas de estas superficies reverberantes.
  • Sombrea las macetas: Si hay un toldo, es el recurso perfecto para bajarlo en las horas de mayor incidencia solar. El otro recurso es sombrear la pared externa de las macetas con malla de brezo o de mimbre cortada a medida. Si el balcón tiene barandilla metálica, la malla de brezo entrelazada, generará un espacio de sombra en todo el conjunto.
  • Cultiva especies colgantes: Estas plantas sombrean por si mismas la pared de la maceta. Las primeras ramas y hojas recibirán el mayor impacto del sol y las raíces se refrescarán. Este efecto lo puedes conseguir con plantas suculentas como los Mesembryanthemum, los Sedum o los Senecios.
  • Crea isletas de frescura: En esta estación reubica algunas macetas para que las plantas más resistentes queden más expuestas al sol y protejan a las más sensibles. De esta forma se genera un pequeño microclima que beneficia al conjunto.

 

Otros cuidados para "refrescar" tus plantas

El acolchado, al igual que se hace en los jardines y en los huertos, refresca y mantiene la humedad del sustrato de las macetas. En este caso, puedes recurrir a un material orgánico como la corteza de pino de granulometría pequeña o a materiales inorgánicos como grava o arena de río.

Si el sustrato se ha desecado en exceso, puede llegar a comprimirse, generando una grieta entre la pared de la maceta y las raíces por dónde se escurre el agua de riego. Con cuidado, intenta aflojar los bordes del pan de raíces. Rellena con más sustrato, que ayudará a retener el agua.

Si la maceta es pequeña, una solución es sumergirla media hora en un barreño hasta ver húmeda la superficie. De esta forma quedará perfectamente humectado todo el sustrato. 

El riego es clave

El principal factor para tener éxito en esta estación es, sin duda, el riego y la forma en que es aplicado. Cuando la planta tiene suficiente agua, puede transpirar normalmente. Esa pérdida de vapor de agua contribuye a la refrigeración de cada hoja, provocando un descenso en la temperatura en la superficie foliar.

  • El riego automático es muy cómodo y, además, garantiza la dosis diaria requerida. Si este es tu método elegido, recuerda que en pleno verano es conveniente que riegues incluso con manguera al menos una vez por semana, para hidratar todo el sustrato y no sólo el área de salida de los goteros.
  • Si riegas a mano, hazlo preferentemente a primera hora de la mañana para que las plantas dispongan de agua en los momentos tórridos del día. En los balcones con orientación tan soleada, las plantas te agradecerán un segundo riego al final de la tarde. Si observas que alguna planta se mustia en exceso incluso con esta frecuencia de riegos, probablemente esté necesitando un trasplante a una maceta con más capacidad de sustrato.

Recuerda: Un abonado orgánico rico en fósforo y potasio y bajo en nitrógeno aumenta la resistencia de las plantas ante situaciones de estrés como son las altas temperaturas.

Plantas sugeridas para balcones con mucho sol

Flores:

  • Malvones y geranios: Son plantas muy rústicas y resistentes. Con mínimos cuidados, se llenan de flores. Los malvones en general son plantas de porte erguido y los geranios o gitanillas tienen los tallos colgantes. 
  • Petunias: Son conocidas por sus flores en forma de trompeta y su amplio abanico de colores, desde el blanco puro hasta los morados muy oscuros, pasando por los tonos rosado, rojo y lila. Hay variedades de tallo erguido y otras colgantes.
  • Girasoles ornamentales: Son variedades de no más de 50 cm de altura con pétalos que van del típico amarillo del girasol hasta los de color marrón rojizo. Es una de las florales más resistente al sol del mediodía estival.

Aromáticas:

  • Lavandas: Su floración violácea de mayo a septiembre no sólo aromatiza los espacios, sino que también es muy atractiva para abejas y otros polinizadores. Todas las especies de lavanda necesitan macetas de tamaño mediano a grande para tener un buen desarrollo radicular.
  • Salvias: Sus hojas carnosas ya nos indican que son plantas muy resistentes a pleno sol. Sólo en los días más tórridos del verano riégala a diario, sino dos o tres veces a la semana será suficiente.

Pequeños arbustos:

  • Lantanas: Esta planta te garantiza floración bicolor durante casi todo el año. Tienen excelente sanidad ya que su follaje contiene aceites aromáticos que repelen a las plagas. Hay variedades erguidas, como la típica amarilla y roja y otras decumbentes como la Lantana de color rosado.
  • Hibiscus: Estos arbustos productores de grandes flores acampanadas, son ideales para ubicar en los balcones junto a las paredes formando un telón de fondo a plantas más bajas. 

Recuerda: Si tu estilo de vida te lleva a viajar con frecuencia o sueles olvidarte de regar, las cactáceas y las plantas suculentas son las más indicadas para tu balcón soleado.