Un hermoso jardín es el sueño de muchas personas, pero no todos tienen el talento para hacer realidad este sueño. Una de las habilidades del buen jardinero es encontrar el uso adecuado para cada cosa que pasa por sus manos. Por ejemplo, las bolsitas de té u otras infusiones usadas.  

Una bolsita de té puede hacer maravillas en tu jardín, simplemente enterrándola. Esto puede parecer extraño, pero realmente funciona. Eso sí, hay que saber que bolsitas puedes utilizar, porque no todas sirven.

1. enterrar bolsitas para mejorar la calidad del suelo

Al enterrar una bolsita de infusión usada en tu jardín estás nutriendo el suelo, y un piso rico en nutrientes garantiza que tus plantas estén más sanas y crezcan más rápido.

El té y otras plantas actúan como auténticos fertilizantes naturales. Y no solo el té, sino también la bolsita, que suele estar fabricada con fibras de abacá.

El abacá (Musa textilis) es una planta que también se conoce bajo el nombre de cáñamo de Manila y que crece principalmente en Filipinas, Ecuador y Costa Rica. La fibra se extrae de  las hojas de la planta, que, por cierto, además de transformase en bolsitas de té, también se usa en la producción de sobres, papeles especiales, cuerdas, etc. 

Una vez enterrada la bolsita, esta se descompondrá junto con su contenido, contribuyendo a crear una tierra de calidad para las plantas.

Ahora bien, algunas bolsitas no te servirán...

No entierres las bolsas de nailon

Ten en cuenta que algunas bolsas de infusión no son de fibra vegetal sino de nailon, es decir, de plástico.

Estas bolsas se usan a menudo en infusiones premium, porque son más resistentes y transparentes; sin embargo, no son recomendables porque contribuyen a la contaminación con microplásticos (de hecho, te bebes estas partículas que en el organismo no hacen nada bueno). 

Si la bolsa es de nailon, usa el contenido pero tira la bolsa al contenedor de rechazo o residuos.

Efectos de las distintas bolsitas de infusión

Todos los restos de plantas infusionadas son beneficiosos, pero cada una puede tener características peculiares.  

  • Las bolsitas usadas de té negro ayudan a mantener alejadas las plagas de insectos.
  • Las bolsitas usadas de manzanilla  favorecen el crecimiento de las plantas.
  • Las bolsitas usadas de té verde mejoran la composición mineral del suelo.

Bolsitas de té negro para conseguir pepinos jugosos

Conociendo el efecto de cada infusión puedes, por ejemplo, utilizar el té verde para estimular el crecimiento de las plantas que producen frutos como, por ejemplo, el pepino.

El té es un fertilizante perfecto y puede ayudarte a conseguir pepinos especialmente jugosos, porque las hojitas contienen una variedad de nutrientes como nitrógeno, potasio y fósforo que son esenciales para el crecimiento de las plantas. 

Al usar el contenido de las bolsitas de té usadas como fertilizante, puedes darle a las plantas de pepino un impulso de nutrientes natural y sostenible. Si quieres cerrar el círculo, cuando hayas cosechado tus pepinos y les des uso, puedes aprovechar también las cáscaras de esos pepinos como fertilizante en otras plantas que tengas en el huerto o jardín.

Bolsitas de infusión en el compostero

Si no te apetece enterrar bolsitas de té justo al lado de tus plantas, simplemente puedes tirarlas a la pila del compost. 

Los ácidos de las hojas de té ayudan a que el abono vegetal se descomponga. Esto significa que se acelera el proceso para transformar los restos biológicos en un fertilizante listo para ser utilizado.

2. Bolsitas de infusión para germinar semillas

¿Has probado alguna vez a germinar semillas? Entonces sabes que esto puede ser un verdadero desafío, porque no siempre acaban desarrollándose tantas semillas como te gustaría.  

Hay una manera de darle un impulso a tus plántulas y hacer que tu jardín florezca, y ese método implica la utilización de bolsitas de té usadas.

Toma una maceta con tierra universal, haz un huequecito y coloca en él una bolsita de infusión usada y aún mojada, rásgala y coloca en el centro una semilla.

La semilla se nutrirá de la bolsita y crecerá, una vez haya crecido lo suficiente se puede enterrar y colocar un poco más de tierra encima para que la planta se desarrolle perfectamente.

3. Bolsitas de infusión contra las malas hierbas

A menudo las malas hierbas se convierten en una pesadilla, porque no dejan de crecer entre tus preciosas plantas. También en este caso las bolsitas de té pueden ofrecer una solución natural.

Al plantar una bolsita de té usada en el suelo, se dificulta que las malas hierbas crezcan junto a las plantas y flores sanas.

un truco sostenible

Al utilizar bolsitas de té como fertilizante, no sólo estás haciendo algo bueno para tus plantas, sino también para el medioambiente. Al reciclar las bolsitas de té, ahorras dinero y evitas el desperdicio.

Además, obtendrás fertilizante adicional para suelos sin turba, lo que es mejor para el medioambiente porque proteges los páramos frente a la sobreexplotación.