El pelo encrespado es uno de los problemas más habituales cuando hablamos de cuidados capilares, sobre todo si vives en zonas húmedas y tienes el pelo grueso. Por eso los productos anti-frizz para evitar el encrespamiento tienen tanto éxito. Pero también es cierto que muchos productos para cuidar el pelo –ya sean champús, sérums, mascarillas y, por supuesto, los tintes– contienen químicos que pueden ser dañinos para la salud (parabenos, siliconas, sulfatos, formaldehído...).

Si tienes el pelo encrespado, no sabes cómo dominarlo y te gustan los productos naturales, desde la redacción de Cuerpomente te proponemos que prepares tu propio acondicionador a base de semillas de lino.

Receta de acondicionador capilar con semillas de lino

Preparar este suavizante es muy sencillo, solo necesitas agua y semillas de lino; además de un cazo, un colador, una cuchara de madera y un bote de cristal con tapa (por ejemplo un bote de conserva de mermelada).

Preparación

Preparar este acondicionador es muy sencillo:

  1. Pon en el cazo dos vasos de agua y llévalo a ebullición, echa dos cucharadas soperas de lino, y deja hervir entre 3 y 7 minutos, hasta que el agua adquiera una consistencia ligeramente gelatinosa.
  2. Remueve y comprueba con la cuchara de madera, y cuando veas que cae un hilillo como de gelatina, (con una ligera textura de gel es suficiente), retira del fuego, deja reposar 3 minutos y cuela rápidamente el agua en el recipiente de cristal.
  3. Es importante que lo cueles mientras el agua está aún caliente, ya que si esperas demasiado después te costará más.

Cómo aplicarlo

Como cualquier acondicionador, después de lavar tu cabello, ya con el pelo aclarado, aplica el gel de lino, deja actuar 10 minutos y aclara con agua, como de costumbre. Sentirás tu cabello hidratado, suave y elástico.

Este preparado te durará dos semanas aproximadamente en la nevera y si le añades un chorrito de limón, unos días más.

Beneficios del lino para el cabello

El lino es una semilla mucilaginosa popular por ser rica en omega 3 (alfa-linolénico).

Los mucílagos (fibras solubles vegetales) son precisamente los que, de forma natural actuarán como tratamiento cosmético, dejando tu cabello hidratado, flexible y suave. En contacto con el agua sueltan un líquido viscoso (el gel de lino), que hace que tu cabello retenga el agua, por lo que es altamente humectante y como consecuencia hidratante.

La fibra mucilaginosa, además, aportará mucha flexibilidad a tu cabello; será una de las cosas que más notarás, sobre todo si venías usando productos comerciales con aceites minerales y siliconas, que taponan los poros, restándole soltura y vitalidad a tu cabello. Al contrario que los anteriores, el gel de lino sella la cutícula de forma natural, sin obstruir los poros.

Además, con este gel también evitarás el encrespamiento y con el uso prologando notarás tu pelo más fuerte, gracias a los ácidos grasos omega 3, vitaminas (vitamina E y C, vitaminas del grupo B y vitamina K), los lignanos (altamente antioxidantes)y minerales (calcio, hierro, potasio, magnesio, fósforo, cobre, zinc), todos ellos importantes en la formación y cuidado de los tejidos, (huesos, piel, uñas, cabello…).

Consumir semillas de lino también será un gran aliado en tu rutina de belleza. Con el uso prolongado de esta crema, tratarás la fibra capilar y el cuero cabelludo de forma natural, y lo mantendrás sano y bonito sin agredirlo.

Y un truco más, si aplicas el gel de lino más concentrado (dejándolo hervir más tiempo), te servirá como fijador natural en sustitución de gominas y lacas.