El horno es uno de los electrodomésticos que más se ensucia y que más difícil es de limpiar. Después de cocinar, los restos de alimentos y la grasa quedan adheridos en su interior y resulta difícil eliminarlos por completo.
Existen productos comerciales que pueden ayudar a que quede reluciente, pero a menudo contienen ingredientes agresivos e irritantes que no son muy recomendables. Afortunadamente, hay trucos que pueden marcar una gran diferencia y simplificar mucho la tediosa tarea de limpiar el horno.
4 trucos sencillos para limpiar el horno
Alicia Martínez, creadora del perfil de Instagram @aly_deco_home desde el que comparte su pasión por la decoración y por tener un hogar limpio y ordenado y que cuenta con más de 1,5 millones de seguidores, ha mostrado en un reel sus trucos para tener el horno como los chorros del oro. Son sencillos y te ahorrarán mucho trabajo.
1. Ablandar la grasa con lavavajillas
La grasa incrustada es lo más complicado de eliminar del horno. Puedes ablandarla colocando una bandeja de cristal apta para horno con un poco de agua caliente y una pastilla de lavavajillas dentro del horno, a media altura.
Prográmalo a 180° durante unos 45 minutos y verás como la grasa y la suciedad acumulada se despegan y te es mucho más fácil retirarlas después con la ayuda de una bayeta y un poco de jabón.
2. Usar un protector para mantener el horno limpio
Tan importante es limpiar el horno como evitar que se ensucie, y para ello podemos usar protectores especiales para horno para mantenerlo limpio por más tiempo.
Están hechos de silicona y son resistentes y reutilizables. Se pueden cortar a la medida de tu horno y solo tienes que ponerlos en la parte inferior para que todos los restos de comida y grasa vayan a parar encima de ellos y los puedas recoger fácilmente.
Además, estos protectores cuentan con la ventaja de que se pueden limpiar fácilmente en el lavavajillas, así que ni siquiera tendrás que frotarlos si no quieres. Es una buena forma para mantener el horno limpio y facilitar su mantenimiento.
3. Truco para limpiar la puerta del horno
La puerta del horno es una de las partes más difíciles de limpiar y también la que más se ve si queda suciedad incrustada o el cristal está opaco. Para que esté reluciente, Alicia utiliza uno de los productos con más usos en el hogar: el bicarbonato de sodio.
Abre la puerta del horno y, con esta colocada en horizontal, vierte un poco de agua muy caliente y bicarbonato, déjalo actuar unos segundos y, a continuación, frótalo con una bola de papel de aluminio.
Debes frotarlo suavemente, para no dañar el cristal, haciendo círculos. A continuación, retira los restos de bicarbonato con una bayeta limpia.
4. Limpieza profunda del horno
De vez en cuando, es necesario hacer una limpieza a fondo de todo el horno, para eliminar la grasa y la suciedad que quedan en aquellos recovecos a los que no llegamos con la limpieza del día a día.
En este caso, conviene quitar la goma o junta del horno (que ayuda a cerrar herméticamente la puerta y a evitar la fuga de calor). Debajo se suelen acumular restos de grasa y es importante lavarla para que pueda cumplir su función correctamente.
Alicia recomienda también sacar la puerta (con cuidado y siguiendo las instrucciones del fabricante) para higienizar bien los bordes.
Para limpiar a fondo las bandejas metálicas de horno, puedes usar también el truco de la bola de papel de aluminio que hemos explicado antes.
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