No hay nada más agradable que acurrucarse en una toalla esponjosa después de una ducha fresca o de un largo baño. Pero la alegría se estropea cuando los tejidos suaves no huelen a detergente, sino simplemente a humedad o, incluso, a sucio.

Y tampoco querrás que tu ropa huela mal o secar tus platos y cubiertos limpios con paños de cocina que desprenden olor a humedad. Entonces, ¿qué se hace cuando las toallas  y los paños de cocina recién lavados huelen mal?

por qué huelen mal las toallas recién lavadas

  • Las causas por las que los textiles recién lavados huelan mal pueden ser variadas. Por un lado, puede ocurrir que en el tambor de la lavadora o en la lavadora en general vivan una gran cantidad de gérmenes y bacterias que se depositan en las fibras de la ropa y desprenden un olor desagradable. Además, estas bacterias pueden ser un peligro para la salud.
  • Por otro lado, la ropa olerá mal después del lavado si se deja húmeda en el cesto de la ropa durante demasiado tiempo. De esta manera se da tiempo a las bacterias, las esporas de moho y los virus para multiplicarse y causar mal olor en las prendas.
  • Otra razón podría ser que la ropa no se lavó correctamente y todavía está sucia. La lavadora puede estar defectuosa, puedes haber usado poco detergente o haberla llenado demasiado.

Si las toallas huelen mal cuando se mojan...

Si las toallas huelen mal cuando se mojan, es posible que se hayan depositado gérmenes rebeldes o incluso esporas de moho en las fibras.

En cuanto se mojan de nuevo, el olor que desprenden se vuelve especialmente intenso.

Cómo eliminar el olor a humedad de las toallas

Para que tus toallas vuelvan a oler bien, primero debes lavarlas a más de 60 ºC con detergente en polvo.

Si eso no soluciona el problema, hay que tomar medidas más drásticas:

  1. Coloca las toallas y los paños de cocina afectados en la lavadora. Te en cuenta que sólo debes llenar el tambor hasta el 60% de su capacidad. Esto permite que el detergente y el agua de lavado lleguen completamente a todas las fibras.
  2. Vierte una taza de vinagre blanco en el tambor de la ropa.
  3. Enciende el programa de lavado a 90 ºC o el programa de lavado de algodón. Importante: si tu toalla no tolera las altas temperaturas, solo puedes probar el truco con el programa de lavado a 60 ºC; evita el programa de lavado eco, que suele utilizar temperaturas más bajas que no son eficaces para matar los gérmenes.
  4. Cuando haya terminado el programa de lavado, agrega media taza de bicarbonato de sodio al tambor y vuelve a lavar la ropa a 90 o 60 ºC.
  5. Una vez finalizado el programa de lavado, cuelga las prendas en un tendedero, idealmente al aire libre. Alternativamente, puedes ponerlas en la secadora.

Eliminar el olor a humedad de la ropa con ácido cítrico

Otra opción a la hora de lavar tus toallas malolientes u otras prendas que hayan cogido mal olor es utilizar ácido cítrico para limpiar:

  1.  Agrega un poco de ácido cítrico al detergente en polvo en el compartimiento del detergente. Puedes encontrar el ácido cítrico en droguerías bien surtidas, tiendas de bricolaje y ecológicas.
  2.  A continuación, ejecuta el programa de lavado como de costumbre, idealmente a más de 60 ºC.
  3.  Una vez terminado cuelga la ropa para que se seque al aire libre o utiliza la secadora.

Tanto el vinagre como el ácido cítrico tienen un efecto desinfectante y antibacteriano. Las altas temperaturas del agua también garantizan que las fibras se liberen más fácilmente de grasas, residuos de jabón, gérmenes, ácaros y hongos.

Si tu problema es de malos olores en el hogar, en este vídeo encontrarás buenos trucos para solucionarlo:

Más consejos para evitar el mal olor en la ropa 

  •  Después del lavado, abre el cajetín del detergente para que la humedad pueda salir y las esporas de moho no disfruten del ambiente adecuado para proliferar en el interior del aparato.
  •  Limpia tu lavadora regularmente. No olvides limpiar y secar el compartimento del detergente, las juntas de goma y el filtro de la pelusa.
  •  Dobla la ropa recién lavada solo cuando esté completamente seca. Si queda un poco de humedad puede provocar que los textiles huelan mal.
  • Revisa que el detergente y otros productos que uses en el lavado estén en buen estado y no hayan caducado. 

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