¿Se te acumula el agua en la bandeja inferior del frigorífico? No es una buena señal, pero no es un problema complicado que no tenga solución. Lo más frecuente es que el agua se acumule por la condensación, lo que puede producir charcos pequeños o grandes en el frigorífico. Para reducirla o evitarla debes encontrar la causa de la acumulación y tomar medidas lo antes posible.
¿De dónde viene el agua del frigorífico?
Un poco de agua en el frigorífico es completamente normal y fácil de explicar físicamente: cuando abrimos la puerta del frigorífico, entra aire caliente con vapor de agua que al enfriarse se condensa.
Como el aire frío puede contener menos humedad que el aire caliente, el vapor se convierte en líquido y forma una película húmeda o pequeñas gotas. Esto no es problemático. La cosa se complica cuando la condensación es tan grande que se desliza por las paredes y acaba formando charcos en la bandeja inferior de la nevera. No es suficiente con enjuagar esta agua.
- El agua en el frigorífico hace que los alimentos se echen a perder más rápidamente.
- La humedad favorece la formación de moho, que puede ser perjudicial para la salud.
- Como el frigorífico tiene que enfriar constantemente el aire caliente que entra, esto repercute considerablemente en los costes de electricidad.
El agua en el frigorífico puede ser peligrosa y costosa y, en última instancia, incluso perjudicial para el medio ambiente y para la salud.
Agua en el frigorífico: ¿qué se puede hacer?
En el primer paso es importante aclarar de dónde viene el agua y qué está provocando la formación del charco.
1. El drenaje está obstruido y provoca la acumulación de agua
Problema: Si te fijas, dentro de tu nevera, en la parte baja de la pared trasera hay un pequeño orificio cuya misión es recoger el agua que se ha condensado. Es frecuente que se atasque y que, por tanto, el agua lo desborde y se acumule en el fondo de la nevera.
Solución: Vacía el frigorífico y limpiar el orificio de drenaje con un palillo, una pajita o un alambre. Intenta sacar la suciedad hacia fuera, no empujarla hacia dentro. Si hay moho en el desagüe, lo mejor es limpiarlo a fondo para evitar que las esporas de moho se transfieran a los alimentos.
2. la goma de la puerta cierra mal
Problema: Si la goma que sella la puerta del refrigerador está deteriorada o se ha vuelto porosa entrará aire caliente al refrigerador. Además, si el frigorífico tiene que enfriar constantemente, los costes de electricidad aumentan.
Solución: Verifica el sellado: si al cerrar la puerta e intentar abrirla inmediatamente no ofrece un poco de resistencia, es que probablemente la goma no esté haciendo bien su función. Lo mejor es reemplazar la goma.
3. Nevera llenada incorrectamente
Problema: Si los alimentos se colocan directamente contra la pared y el frigorífico suele estar lleno hasta arriba, el aire no puede circular.
Solución: Puedes remediarlo fácilmente no colocando la comida directamente contra la pared y no llenando completamente el refrigerador. Recuerda que no todos los alimentos tienen que guardarse en el frigorífico: no es el mejor lugar para los alimentos secos, los aceites, etc.
4. Comida caliente en el frigorífico
Problema: Si pones comida caliente en el frigorífico, necesitará mucha energía para enfriarla y se formará rápidamente una molesta condensación.
Solución: Primero deja que la comida se enfríe y luego métela en el frigorífico.
5. Apertura frecuente de la puerta del refrigerador
Problema: Aunque la goma de la puerta del refrigerador esté en buen estado, si la abres con demasiada frecuencia o se deja abierta durante mucho tiempo, se formará agua en el refrigerador.
Solución: Primero piensa en lo que necesitas del frigorífico, luego abre la puerta de la nevera y ciérrala de nuevo rápidamente. No te entretengas en buscar las cosas. Incluso si solo necesitas un chorrito rápido de leche de avena para tu café, cierra la puerta mientras tanto.
En el momento en el que se forme hielo en la nevera, sólo una cosa podrá ayudarte y es descongelar el frigorífico.
Mas consejos
- Asegúrate de que tu refrigerador esté configurado a la temperatura correcta. Si la temperatura es demasiado alta, se puede formar condensación. 4-6 ºC es una buena temperatura.
- Poner un cuenco con sal en el frigorífico puede ayudar a reducir la humedad y los olores desagradables.