Japón posee una cultura fascinante que a los europeos nos llama la atención, probablemente porque han profundizado en valores que nosotros hemos dejado de lado. 

Al fijarnos en ellos, podemos adoptar o inspirarnos en sus costumbres para enriquecer nuestras vidas. Podemos hacerlo en todos los ámbitos, incluidos el diseño, la decoración y la organización de nuestros hogares, y no solo por motivos estéticos, sino porque contribuye a nuestra felicidad y bienestar. 

la estética zen en el hogar, pensada para sentirte mejor

Los principios decorativos que dominan en Japón se basan en una tradición propia milenaria y en los valores del budismo, la filosofía que ha dado forma a la civilización nipona desde hace 1.400 años. 

Conocer estos principios puede inspirarte para dar un nuevo estilo a tu hogar con el aliciente de que, además, te pueden hacer sentir mejor. 

1. Kanso: simplicidad o eliminación del desorden

Lo sencillo, simple y natural aporta claridad mental. Este principio se traduce en una regla básica: eliminar lo que no es imprescindible o esencial.

En lugar de llenar nuestras casas con objetos y decoración innecesaria, kanso nos invita a eliminar las distracciones y crear espacios donde puedas concentrarte mejor, relajarte y encontrar paz.

Deshazte de todo lo que no tenga una función clara.

Opta por muebles funcionales y diseños sencillos, y usa una paleta de colores neutros y suaves, que transmita calma.

2. Enso fukinsei: asimetría 

El ser humano tiene una predisposición prácticamente natural a disponer las cosas de manera simétrica. Quizá es una lección de la naturaleza: nuestro cuerpo se divide en dos partes prácticamente iguales. Sin embargo, la naturaleza también nos enseña que lo asimétrico, irregular o imperfecto es igualmente bello y deja caminos abiertos a nuestra mente. 

El reto consiste en crear belleza en tu casa con una asimetría equilibrada. Al decorar, no intentes que todo esté perfectamente alineado:

  • Puedes colgar cuadros o fotos en diferentes niveles, o colocar objetos decorativos de manera asimétrica.
  • Introduce elementos orgánicos, como piedras, ramas o plantas, que tengan formas irregulares y naturales.

3. Shibui: discreto, minimalista

Este principio es muy moderno: lo sencillo y discreto es más elegante que lo sobrecargado. La belleza de lo minimalista se va revelando con el tiempo. Si lo haces bien, un espacio decorado con shibui no queda fuera de moda con el paso de los años, sino que gana en belleza y profundidad.

El principio de shibui también se relaciona con la forma en que los objetos y muebles se colocan para permitir un flujo natural. Deja que los espacios "respiren" para promover un sentido de calma y equilibrio. El minimalismo se considera uno de los pilares sobre los que se construye la felicidad.

4. Shizen: naturalidad

La decoración del hogar no debería reflejar que detrás hay un artista muy original. Debe ser bella y cuidada, pero aparecer tan natural como un atardecer en el mar: con el mar, el sol y el cielo es suficiente para componer un cuadro precioso.

En casa podemos intentar reproducir la belleza de lo natural. Traer la naturaleza a tu hogar no solo es una cuestión estética, sino que también tiene un impacto positivo en tu bienestar emocional.

 

5. Yugen: profundidad

En tu hogar también hay lugar para el yugen o profundidad, que puedes conseguir con detalles que se refieran a la experiencia humana más íntima.

  • Puedes lograrlo con obras de arte, como cuadros, pequeñas esculturas, etc. Intenta que estas obras signifiquen algo para ti. 
  • También es yugen jugar con la luz y las sombras, usando lámparas de luz tenue para crear ambientes acogedores.
  • Asimismo puedes escoger texturas suaves y delicadas para cojines, alfombras o mantas de tacto confortable.

6. Datsuzoku: libertad

Escapar de la rutina diaria o de lo ordinario es uno de los objetivos de cualquier decorador: tu casa no puede ser un lugar como cualquier otro, no puede responder a una estética de catálago. Eres libre para introducir lo que tú desees, aunque parezca poco convencional.

  • Puedes añadir piezas únicas o artesanales que contrasten con la estética general de tu hogar.
  • Otra opción es modificar la disposición de los muebles de vez en cuando para alterar el flujo del espacio.
  • También es datsuzoku introducir colores inesperados o patrones poco comunes en pequeños toques, como en un cojín, una alfombra o el empapelado de una pared.

7. Seijaku: tranquilidad

Solo puedes llenarte de energía a partir del reposo tranquilo en tu casa. Fuera puede haber mucho ruido y estímulos de todo tipo, pero puedes convertir tu casa en un remanso de paz y alegría.

  • Crea espacios de silencio en tu hogar, como un rincón de meditación, donde puedas relajarte sin distracciones. 
  • Evita el uso de tecnologías ruidosas en áreas de descanso, como la sala o el dormitorio.
  • En esas zonas de descanso puedes, en cambio, utilizar materiales naturales como la madera, el bambú o la piedra para fomentar una atmósfera de serenidad.