A las hortalizas se las categoriza en dos temporadas de cultivo formada cada una por dos estaciones: primavera-verano” y “otoño-invierno”. En cambio, las flores que acompañan cada temporada avanzan con su esplendor una estación más. Por ello se las divide en flores de “otoño-invierno-primavera” y flores de “primavera-verano-otoño”.
Ahora, a finales de verano, disfrutas de las de flores de primavera-verano-otoño, y es el momento de sembrar las flores de otoño-invierno-primavera. De esta forma, las abejas y los otros polinizadores siempre tendrán abundante polen y néctar a su disposición.
Toma nota y empieza a sembrar ya. Así dispondrás de coloridas flores durante los meses de frío y hasta bien entrada la primavera.
Capuchina (Tropaeolum majus)
La capuchina es una herbácea anual resistente al frío, aunque las heladas severas suelen quemarla. Los tallos son rastreros y las hojas redondeadas son alternas con largos pecíolos que permiten a la planta enroscarse a un soporte u otra planta para alcanzar el sol.
En el huerto, la capuchina tiene la función de repeler a las moscas blancas de las coles.
Cultívala a pleno sol y en suelos bien drenados. Su hábito de crecimiento rastrero la hacen ideal como tapizante de sectores con poca profundidad de suelo en los jardines.
En suelos pobres tendrás mayor producción de flores; en cambio, en suelos muy ricos en nitrógeno, aumentará el número de hojas. No tolera los suelos anegados.
Las flores y las hojas son comestibles. Con los frutos verdes encurtidos, se preparan “falsas alcaparras”
Cómo sembrarla
Los frutos de la capuchina contienen 3 semillas del tamaño de un guisante. Este tamaño facilita la siembra en macetas pequeñas para luego trasplantarlas a tierra o sembrando directamente en el suelo del bancal.
Germina a los 15-20 días a 15ºC. En cercanías de las plantas adultas, suelen crecer nuevas plántulas. Estas son erguidas y con dos hojas redondeadas.
Pensamientos (Viola tricolor var. hortensis) y (Viola wittrockiana)
Los pensamientos son herbáceas de porte bajo. Las flores tienen un tamaño que va desde mediano a grande, generalmente tricolores, aunque existen variedades de un solo color. Son ideales para cultivar en macetas. Las flores son comestibles y usadas en repostería.
En el huerto, van muy bien en los bordes del bancal o asociados a lechugas, cebollas de verdeo, puerros, hinojos y rúculas. Son un gran aporte de color y ocupan muy poco terreno.
En los jardines, permiten diseñar y aportar una amplia gama de colores con una altura de 20-30 cm. Trasplántalos a pleno sol o sombra leve. Soportan heladas ligeras y calores primaverales repentinos.
Al regar, evita mojar la parte aérea, ya que se reduce la duración de las flores.
Cómo sembrarlos
Las semillas son muy pequeñas, por lo que será más conveniente la siembra de forma superficial.
Para facilitar este proceso, puedes mezclar las semillas con arena gruesa y recurrir a una pequeña cucharilla o al capuchón de un bolígrafo, que evitarán que queden muchas semillas juntas, perjudicando la germinación.
Pueden tardar un mes en germinar.
Caléndula (Calendula officinalis)
La caléndula, una planta de porte mediano y forma globosa, es muy resistente a las condiciones climáticas extremas.
Cultívala en el huerto para aumentar la biodiversidad atrayendo polinizadores y como planta trampa para atraer pulgones, que la prefieren a las hortalizas.
Las hojas son alternas de color verde claro o medio, sin brillo. Las flores son grandes y se disponen en capítulos solitarios, simples o dobles, siempre en colores cálidos como el amarillo y el naranja. Cultívala en una exposición bien soleada. No es exigente en el tipo de suelo, pero no la favorece el exceso de humedad. En cambio, soporta períodos de falta de riego o de sequía.
Al final de la temporada, recorta los tallos largos para estimular el rebrote y una nueva floración. Los pétalos son comestibles.
Cómo sembrarla
En climas suaves, se siembra a finales del verano para tener la floración invernal. En el norte, sembrar en el exterior a inicios de primavera.
Las semillas son grandes con forma de “coma”. Siémbralas en macetas compostables o envases pequeños, para luego trasplantar en el bancal. Es una planta que se “resiembra” con frecuencia, ya que los polinizadores facilitan una gran producción de semillas que son liberadas al medio.
A una temperatura de unos 20ºC, germinan a los 8-10 días.
Clavel del poeta (Dianthus barbatus)
El clavel del poeta una planta de tamaño mediano, de forma globosa y con el tallo floral erguido. Las hojas basales forman una roseta.
Las flores son pequeñas, simples o dobles. Los pétalos son dentados de colores uniformes que van desde el blanco al violeta, pasando por los rosados y alilados.
Plantada al pie de los jazmines y los rosales los protege de las plagas.
En el huerto, cultívala a pleno sol como bordura o como una mancha de color en la cabecera de los bancales. Prefiere los suelos bien drenados y ricos en materia orgánica.
Para estimular una mejor floración, quita las flores según se vayan secando. Controla las plantas adventicias que compitan con ella. Los pétalos se utilizan como decoración en ensaladas.
Cómo sembrarlo
Para conseguir las semillas, toma unas flores secas y golpéalas sobre un folio. Estas son pequeñas y oscuras.
Puedes sembrarlas casi superficialmente en una bandeja alveolada o en pequeñas macetas.
Las semillas germinan en una o dos semanas a una temperatura de 15 – 18ºC. Si la temperatura aún es alta, cubre con una capa muy fina de vermiculita y mantén húmedo el sustrato de siembra.