En la montaña, ahora mismo, entre el final del verano y el principio del otoño, esta planta ofrece un espectáculo de color. Esta maravilla se puede llevar a casa para llenar de vida y color el jardín. Si dispones de un balcón o terraza, también puedes disfrutar de esta planta, que no alcanza grandes dimensiones, en tiestos y jardineras.

El brezo (Calluna vulgaris) es fácil de cuidar, es muy resistente y, además, es muy beneficioso para las abejas y los insectos, un factor en el que tenemos que acostumbrarnos a pensar, además de en la belleza de las plantas.

¿Cómo es el brezo?

El brezo es una planta originaria de la Europa central y del norte. Normalmente alcanza una altura de 30 a 50 cm.

Según la variedad y el clima donde se desarrolle, florece entre julio y noviembre. Las flores van del violeta al rosa claro. También hay variedades blancas. 

Las hojas son muy pequeñas, en forma de aguja. 

Variedades de brezo 

Existen variedades de floración temprana que, en realidad, nunca llegan a abrir sus flores por completo, solo asoman sus pétalos. Estas variedades no sirven para que las abejas y otros insectos se alimenten porque no pueden llegar hasta el néctar. Tampoco son amigas de las abejas las variedades con flores dobles.

Sin embargo, los brezos que florecen en invierno y primavera son preferibles porque proporcionan una importante fuente temprana de alimento para las abejas, las mariposas y otros insectos.

Los brezos comprenden tres géneros estrechamente relacionados: Calluna, Erica y Daboecia. Para diferenciarlas puedes mirar sus hojas:

  • Los Calluna tienen hojas pequeñas en forma de escamas. Florecen en verano y otoño. Estas especies amantes de los ácidos necesitan un suelo ligero, arenoso pero rico en nutrientes, con un pH de 6,5 o menos.
  • Los Erica tiene hojas en forma de aguja. Suelen florecer en invierno y primavera (hay algunas especies que florecen en verano). Son más tolerantes a suelos neutros a alcalinos y crecerán bien en suelos con un pH de 7 o superior, siempre que el suelo haya sido enriquecido con materia orgánica.
  • Los Daboecia tiene un follaje pequeño, de forma ovalada a lanza. Florecen en primavera, verano u otoño (según la especie) y necesitan un suelo arenoso y ácido para prosperar.

¿Cuándo es el mejor momento de plantarlo?

En la mayoría de zonas, el mejor momento para plantar brezo es en primavera, ya que le dará tiempo a establecerse antes del invierno.

Cuidados básicos del brezo

En términos generales, el brezo es una planta muy resistente al frío. Sin embargo, en el caso de las plantas jóvenes, es conveniente cubrirlas con mantillo antes de que se sequen.

Ubicación

Lo ideal es elegir una zona soleada o ligeramente semisombreada del jardín. Es una planta muy apropiada para zonas del jardín con rocas (rocalla).

En principio es una planta que prefiere el exterior, aunque también se puede plantar en interiores, pero lejos de la calefacción y regando por abajo, es decir, colocando el agua en un plato para que absorba la humedad.

Distancia entre plantas

Lo mejor es plantar varios ejemplares separados unos 20 cm para formar un conjunto hermoso. Los brezos aislados no producen un efecto tan potente. Después de plantarlos conviene mantener la tierra húmeda unos días.  

En macetas

Si has adquirido una planta de brezo en un garden center o una floristería, plántalo a la misma profundidad que estaba en su maceta anterior.

Aprieta suavemente la tierra alrededor de la planta y riega en abundancia, idealmente con agua de lluvia, pues no soporta el agua calcárea.

Puedes plantar los brezos en macetas que conviene colocar en un lugar soleado. Mezcla dos tercios de tierra ácida con aproximadamente un tercio de arcilla expandida (arlita).  

Tierra

El brezo prefiere un suelo arenoso pero rico en humus, ya que es importante para la planta un buen drenaje del agua; no tolera bien el encharcamiento ni los suelos densos.

Además, el suelo debe ser ácido. Si el suelo es demasiado alcalino, el follaje de brezo puede volverse amarillo. En este caso, alimenta la planta con compost ecológico con el grado de acidez adecuada para las ericáceas (la familia botánica del brezo) a fines de marzo o principios de abril y cubre el suelo con virutas de corteza. Este tipo de compost también sirve para las hortensias, los rododendros, los arbustos de arándanos y las azaleas.

Un poco de arena contribuye a que el suelo tenga una estructura más suelta al suelo. Es una buena idea agregar un mantillo de virutas de corteza para eliminar las malezas y mantener el suelo ácido.

Riego y fertilización

El agua de lluvia es especialmente adecuada para el riego. Si no dispones de ella, hazlo con agua sin cal. Si en tu zona el agua es dura, puedes usar agua filtrada o añadir una cucharada de ácido cítrico por cada 50 litros de agua de riego.

Hay que decir que las plantas recién replantadas en casa mueren frecuentemente por dificultades con el riego.  Mantén la tierra húmeda, pero no encharcada. El brezo tolera bastante bien la sequía y no requiere un riego frecuente. Sin embargo, durante períodos secos prolongados, es posible que debas regar más a menudo, especialmente si los brezos se hallan macetas.

Durante la floración necesita más agua, pero no tanta como para que las raíces se pudran. La tierra debe permanecer constantemente húmeda.

Los brezos cultivados en un suelo rico en materia orgánica generalmente no necesitan fertilización. Sin embargo, es una buena idea cubrir la tierra alrededor con un poco de mantillo de hojas.

Los brezos en macetas se benefician de una fertilización a principios de primavera.

Poda del brezo

La poda es esencial para mantener un crecimiento saludable y una floración abundante. Hazla en primavera después de la floración, alrededor de marzo o abril, y elige un día nublado.

La mayoría de los brezos se deben podar hasta la base; no crecen bien a partir de madera vieja, así que desecha los que se hayan vuelto leñosos y largos.

La excepción a esta regla es el brezo arbóreo (Erica arborea). Durante los primeros años después de la siembra, poda hasta dos tercios. A partir de entonces, es necesaria poca poda. Otros brezos arbóreos, como Erica australis y Erica lusitanica, deben podarse después de la floración.

Corta los brotes nuevos del año pasado aproximadamente a la mitad. No tengas miedo porque estas plantas no son especialmente sensibles a la poda.

Propagación del brezo

La forma más fácil de propagar el brezo es mediante la técnica de acodo. Para ello, simplemente presiona un brote (aún unido a la planta madre) en el suelo en otoño, cúbrelo con un poco de tierra y coloca un peso para mantenerlo debajo de la tierra.

Con suficiente humedad y contacto con el suelo, se formarán raíces y para el próximo otoño o, incluso, la próxima primavera, se habrá desarrollado una nueva planta independiente. Una vez que esté bien enraizada, separa el brote de la planta principal y trasplántalo a su nuevo lugar en el jardín.

El brezo como planta medicinal

Las plantas de brezo se usaban en medicina ya en el siglo XIX. Las molestias de las vías respiratorias y urinarias se trataban con una infusión de brezo. También se podían aliviar irritaciones de la piel de todo tipo con brezo.

Hoy en día, se utiliza principalmente para la producción de miel de brezo.

¿Es tóxica?

Ni las flores ni las hojas de brezo son venenosas para gatos, perros o humanos. Por lo tanto, no hay necesidad de preocuparse por plantar brezo en el jardín o en macetas en el balcón.

Pantallas de brezo para ganar privacidad

El brezo seco se usa para fabricar pantallas o cercados naturales. Las pantallas de brezo son muy populares en jardines y espacios exteriores, ya que ofrecen una forma estética y ecológica de proporcionar intimidad y protección contra el viento.

Para fabricar estos cercados, se tejen las ramitas de brezo y el resultado es un panel de aspecto rústico y natural. Además de ser decorativas, las pantallas de brezo son resistentes y duraderas, aunque con el tiempo pueden requerir reemplazo o mantenimiento, ya que se desgastan con la exposición a las condiciones meteorológicas.