Los epilobios son plantas ligadas a ambientes húmedos, que crecen en orillas de arroyos y riachuelos de alta montaña. De la treintena de especies que pueden encontrarse en nuestro país, la más conocida y visible es, sin duda, Epilobium angustifolium, propia de zonas degradadas o afectadas de aludes en los Pirineos y el Cantábrico.
Otra especie muy similar a ésta, aunque de porte más modesto, el Epilobium parviflorum, es la que con mayor frecuencia utilizan los herbolarios como aliada de a próstata y la que de forma reciente está mereciendo mayor atención por parte de la comunidad científica.
Se trata de una planta herbácea de unos 50 centímetros de alto, con las hojas alternas, de limbo agudo y piloso y flores de color rosa pálido, agrupadas en racimos corimbosos. Florece durante el verano y con fines medicinales se cosechan las sumidades aéreas.
Propiedades del epilobio
En la composición del epilobio encontramos bioflavonoides –quercetol, kenferol–, fitosteroles y taninos y se considera una planta antiinflamatoria, antiséptica y diurética.
- Su efecto terapéutico más destacable, sin embargo, es su capacidad para inhibir la actividad de una enzima, la 5-alfa-reductasa y aromatasa, responsable, en parte, del desarrollo de la hiperplasia benigna de próstata o agrandamiento de esta glándula sexual masculina, una dolencia ligada al envejecimiento y que afecta a una alta proporción de varones de más de 50-55 años, aunque en muchos casos no se detecte hasta 10 o 20 años más tarde.
- La hiperplasia provoca molestas dificultades en la micción a medida que la próstata aumenta de tamaño y oprime a la uretra, y da como síntomas más frecuentes la sensación de tener que orinar con asiduidad, problemas para miccionar con normalidad, flujo escaso o irregular de orina, dolor abdominal y en algunos casos, incontinencia. Los remedios con epilobio se han ensayado con éxito como tratamiento alternativo de la hiperplasia.
- Aparte de la hiperplasia, el epilobio también resulta eficaz para tratar la prostatitis o inflamación de la próstata, una dolencia que suele afectar preferentemente a varones más jóvenes, entre 30 y 45 años, y que se manifiesta con dolores al orinar y en el recto, y a veces incluso con sangrado en la orina. Suele estar provocada por una infección en los conductos urinarios o por una infección de tipo sexual.
- El epilobio se indica también por vía tópica en infecciones respiratorias, dermatológicas y bucales.
Remedios naturales con epilobio
- Para la prostatitis o inflamación de la próstata: Se combina epilobio con hojas de arándano y de gayuba, a partes iguales. Cómo prepararla: Se hierve una cucharada sopera de la mezcla por taza de agua uno o dos minutos y se deja que repose otros cinco. Se cuela bien y se puede ir tomando durante el día.
- La gran fórmula herbaria para la próstata: Esta tisana, que combina epilobio con dátiles de sabal y hojas de gayuba y buchú a partes iguales, resulta muy efectiva. Cómo prepararla: Se dispone medio litro de agua por dos cucharadas soperas de la mezcla, se hierve 2 minutos y se deja en reposo otros 5 minutos. Se cuela y se toma durante el día. Puede endulzarse si se quiere con anís estrellado o una pizca de miel de romero.
Cómo se toma
El epilobio se encuentra en planta seca para infusión, concentrado líquido y extracto fluido. Se comercializa también en cápsulas como descongestionante prostático.
Jordi Cebrián. Asesora: J M Teixé, herborista de «El Manantial de Salud»